Asumida ya por Sánchez
la tesis de los secesionistas de que el “procés” es un conflicto político y,
por tanto, lo acontecido durante el patético 1-O no fue un flagrante delito
contra el Estado de Derecho al formar parte de ese “conflicto político”,
Moncloa sigue dispuesta a abordar una Ley de Amnistía, sí o sí, para intentar
conseguir con ello el apoyo del secesionismo totalitario a la investidura del
Presidente, aunque intenta rechazar amnistiar a los violentos CDR para asumir
el coste del 1-O (ya sería demasiado) cuando doce de sus miembros están a punto
de ir a juicio acusados de delitos de terrorismo y además ocho de ellos de
tenencia de explosivos. Pero es que además del sometimiento de Sánchez a los
chantajes del secesionismo, el prófugo Puigdemont exige que un mediador
internacional arbitre las negociaciones para resolver “el conflicto político”
como si España fuera una república bananera y no un Estado de Derecho
democrático perteneciente a la UE y, por tanto, homologado y homologable con
las democracias de sus Estados miembros, en las que sería impensable que sus
respectivos gobiernos pactasen o negociasen semejantes asuntos con partidos
liderados por fugados de la Justicia y sería igualmente imposible un arbitraje
internacional para superar los conflictos políticos. Así las cosas y con
semejante degradación democrática aceptada por el Ejecutivo español los
díscolos del prófugo añaden tensión a la investidura, mientras Aragonés
presiona y se dispone a exigir un referéndum “escocés” en Cataluña (como si la
historia y el marco legal democrático de Reino Unido tuviera algo que ver con el
de España), acudiendo hoy al Senado para defender sus exigencias ante los
barones del PP, en tanto que Zapatero (otro que tal baila) se declara a favor
de ella y Felipe González pide que, en todo caso, Sánchez consulte a los
españoles sobre el asunto, como hizo él con el polémico caso de la permanencia
de España en la OTAN, tras habernos metido en ella el Presidente Calvo Sotelo.
Por su parte Feijóo, ante todo este embrollo, se planta en Barcelona y Bilbao
con su “tercera vía” para presentar la próxima semana una propuesta de
“autonomismo amable” frente a las cesiones de Sánchez, con el objetivo de
actualizar su discurso y su programa sin renunciar a sus esencias en materia
territorial, lo que de entrada parece estar sentenciado al fracaso. No obstante
Moncloa sigue confiando en un acuerdo “in extremis” con el prófugo Puigdemont
ya que sus encuestas son más pesimistas que las del CIS de Tezanos, que otorga
al PSOE un apoyo del 32´6% frente al 32´2% del PP, y por ello las usan para
presionar a sus socios y hacerles entender que repetir elecciones no les
conviene a ninguno para no asumir el riesgo de un gobierno popular más
perjudicial para todos ellos, con lo que lo que hay que hacer es garantizar
gobernar esta legislatura con las mimbres que han dado los comicios del 23-J,
por esperpéntico y variopinto que sea, valga lo que valga y cueste lo que
cueste….cuestión distinta es lo que convenga al conjunto de los ciudadanos
españoles y a la higiene democrática de nuestro país.
Y en medio de este patético
espectáculo la guerra entre Israel y Hamás pone en evidencia las antagónicas
posturas entre los miembros socialistas y los populistas del Gobierno español,
una evidencia más en la política exterior, al igual que en muchas otras
políticas, en que la visión del socialismo democrático y del comunismo populista
no son compatibles, provocando un caos gubernamental cuando el sector
minoritario del Ejecutivo se niega a asumir colegiadamente las posturas
mayoritarias del mismo o a dimitir, dado que el Presidente no les cesa. En
efecto, el dividido Gobierno de Sánchez provoca una verdadera crisis
diplomática con Israel que califica de “inmoral” a parte del mismo denunciando
que se “alinea con el terrorismo” por lo que pide a Sánchez que “condene las
vergonzosas declaraciones” por parte de algunos ministros, mientras Exteriores
tilda de “falsedades” estas declaraciones sobre el Gobierno y acusa a Israel de
difundirlas. Pero lo cierto es que Sánchez evita corregir a Belarra que reclama
procesar a Netanyahu por crímenes de guerra, aunque la crisis diplomática
causada por la ministra podemita le fuerza a endurecer su discurso y admitir el
derecho de Tel Aviv a defenderse tras los “horribles atentados terroristas
perpetrados por Hamás” mientras pide el reconocimiento de Palestina como Estado
y exige a Israel que garantice en Gaza “la protección de la población civil”. No
obstante la tozuda Belarra desoye a Sánchez y exige romper relaciones con Tel
Aviv, mientras la embajadora israelí pide al Gobierno español que “haga todo lo
posible para que no haya más expresiones de odio”
Entretanto Vox, aprovechando que el
Pisuerga pasa por Valladolid, propone negar la entrada o la residencia a
migrantes de países islámicos y el Congreso debatirá la iniciativa, que
obviamente es un despropósito contrario al sentido común y a la legalidad
nacional e internacional….. pero, en fin, ya ven cada quien a su tema. Por su
parte el Ministerio de Interior refuerza la seguridad en diez embajadas,
aumentando los controles en las de Israel, Palestina, Jordania, Turquía,
Líbano, EEUU, Reino Unido, Dinamarca, Francia y Suecia, y pide que los agentes
extremen su propia protección.
Y ya que andamos con asuntos de
terrorismo y odio, se publica que miembros de ETA implicaron a Otegi, el actual
socio de Sánchez sin haberse arrepentido de nada, en nueve secuestros y un
asesinato, pues archivos secretos de la Policía y la Guardia Civil reflejan su
actividad entre 1977 y 1987, ya en plena democracia, cuando hasta ahora sólo se
conocían tres de esos diez delitos ya que el acuerdo del Gobierno de UCD con
ETA-pm impidió investigar decenas de crímenes….y Otegi entró luego en ETA-m;
según los archivos citados, un etarra aseguró que Otegi dio la orden de “en
caso de problemas le ajusticiamos” para secuestrar al político Javier Rupérez
pues el actual líder de EHBildu, sometía a los raptados a duros interrogatorios
y lo grababa. En fin un perfil siniestro del actual “hombre de paz”, eso sí,
sin arrepentirse de nada, que permite a los hijos de Juan de Dios Doval de
Mateo, asesinado por ETA en 1980, manifestar que “no habrá justicia ni memoria
mientras se siga blanqueando a los asesinos” en tanto que los archivos
policiales señalan la presunta participación de Otegi como ordenante del
atentado que asesinó a su padre, ya que el asesino confeso declaró que fue
Otegi quien le ordenó el crimen, pormenores que los hijos de Doval de Mateo no
sabían pues hasta hoy se desconocen más de 300 casos que están pendientes de
resolver. Bien podría Otegi, convertido en uno de los posibles puntales de la
investidura de Sánchez, colaborar en el esclarecimiento de tanta tragedia
totalitaria….y seguro que colaborando con Patxi López, que conoció y sufrió
aquellos horrores, harían un verdadero favor a la memoria histórica reciente,
pues en la ley actual para muchos asuntos la memoria es una desmemoriada.
¡Cuánto hemos cambiado desde entones….qué pena!.
Por lo que respecta a otros asuntos
citar que el Gobierno avisa a Bruselas que el gasto en funcionarios crecerá en
7.500 millones; que hay malestar en el CGPJ por la “politización” del TC a la
espera de la amnistía; que es hallado muerto, electrocutado, entre dos vagones
el joven desaparecido en Sevilla; que el Gobierno congela los fondos para la
sanidad pública; que el choque de PP y Vox por el catalán deja en suspenso los
presupuestos en Baleares y los de Abascal apartan a su portavoz en las Islas
para mantener el órdago a los de Feijóo; que el juez imputa a Laporta y da por
hecho que hubo “árbitros corruptos”; y que Collboni y Almeida recuperan la
“normalidad entre Madrid y Barcelona” tras reunirse sus alcaldes en la capital
cinco años después de la última cita entre Manuela Carmena y Ada Colau.
Y del exterior, destacar que el hijo
del empresario más rico de Ecuador gana las elecciones; que la UE da un paso
para estabilizar el precio de la luz; que las urnas refrendan el fin de la era
conservadora en Polonia con lo que Europa gana sin lugar a dudas; y que el
bloqueo de Gaza deja a los hospitales al borde del colapso en plena matanza en
uno de ellos por un bombardeo de cuya autoría se culpan mutuamente Israel y
Hamás, mientras Biden visita la zona, avala la versión israelí y consigue que
Netanyahu acepte que llegue ayuda a Gaza a través de Egipto, pero los líderes
palestino, egipcio y jordano se niegan a reunirse con él en plena escalada de
las protestas populares en los países islámicos tras la matanza del hospital
gazatí.
Fdo. Jorge Cremades Sena
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