Los
negociadores del pacto PP-Ciudadanos, que incluirá unas cien medidas concretas,
de las que ya han acordado la mitad, aunque se habla, como es obvio, de algunas
discrepancias (no muchas por cierto), constatan que entre PP y C´s hay
“coincidencias importantes” en la negociación, que también las habría entre
ellos y el PSOE (muchas de ellas ya incluidas en el anterior pacto
Sánchez-Rivera), es más, yo diría que todas o casi todas las coincidencias , si
se trata de temas que tienen que ver con el modelo de Estado y su integración
en Europa, pues las divergencias importantes las tienen los tres partidos
constitucionalistas (que en conjunto representan a una supermayoría de los
españoles) con los demás partidos (populistas, comunistas, radicales,
nacionalistas, independentistas…) por razones obvias. Por tanto las
discrepancias se ciñen lógicamente a determinadas políticas programáticas
concretas que habrán de pulirse obviamente durante la negociación ya que nadie
puede imponer las suyas al no tener nadie mayoría absoluta. Para eso sirve
negociar, para consensuarlas ponderadamente. De entrada Ciudadanos y PP
discrepan sobre el modelo de contratos laborales y la legislación para los
autónomos, con lo que el modelo de “contrato único” ralentiza la negociación.
Asimismo hay ciertos desacuerdos, que habrá que salvar, sobre la corrupción,
pues, al parecer, el PP prefiere apartar a los imputados cuando haya Gobierno,
mientras Ciudadanos prefiere que se marchen cuanto antes, aunque hay más
coincidencias en limitar las causas de la dimisión, pactando ya, al parecer,
que sólo se apartará a los investigados por casos de enriquecimiento personal o
financiación ilegal, en tanto que Rivera propone extender el acuerdo al resto
de partidos. Entretanto, se especula sobre que los juicios por corrupción
complicarían a Rajoy una nueva investidura, mientras Sánchez anuncia que
mantendrá el bloqueo a Rajoy en caso de una segunda investidura y descarta
incluso convocar Comité Federal tras las elecciones vascas y gallegas,
concluyendo los socialistas que abstenerse sería la “liquidación definitiva”
del partido; además, según se publica, la cúpula socialista amenaza desde
Ferraz a los disidentes del “no” con sanciones, mientras soterradamente aumenta
la división interna y la crítica ante el bloqueo institucional que pretende
Sánchez a quien parece no importarle que se repitan las elecciones por tercera
vez. Por su parte, Ciudadanos sólo garantiza el apoyo a Rajoy para esta próxima
investidura y se replantearía el acuerdo que ahora negocia con el PP si el dos
se septiembre, como parece ser, no es investido, mientras la anunciada y
manifiesta incompatibilidad de Rivera con el PNV complica obviamente una
hipotética alternativa del PSOE. Ya ven, elecciones navideñas a la vista.
Y como en este país
cada uno exhibe todo tipo de irresponsabilidades, mientras la Generalitat de
Catalunya decide incluir en sus Presupuestos el famoso referéndum unilateral,
Otegi en el País Vasco explota el victimismo a la espera de la decisión que ha
de tomar la Junta Electoral de Guipúzcoa, en primera instancia, sobre su
inhabilitación, pues se presume que será el Constitucional quien tome en
septiembre la decisión definitiva. Pero como eso de la legalidad y el respeto
al Estado de Derecho se toma a broma en España, EH Bildu centrará su campaña
electoral en Otegi aunque sea inhabilitado definitivamente, por lo que el
abertzale, ya lo ha anunciado, desafiará a la Justicia y hará la campaña de
Bildu aunque la Junta Electoral le confirme de forma inminente si es inhabilitado.
Cabe destacar además
que los grandes bancos han cerrado 741 oficinas en los seis primeros meses del
año y que la parálisis política hace caer un 20% la obra pública…. Ya ven, lo
extraño e inexplicable es que, a pesar de nuestros políticos y sus manifiestas
irresponsabilidades, España siga creciendo y generando empleo a un ritmo mayor
que el resto de la UE, aunque cabe preguntarse hasta cuándo durará el milagro.
En cuanto al exterior
el terrorismo, lamentablemente, es claro protagonista mediático. La nueva
amenaza yihadista que se está poniendo de moda es la de los “niños bomba”, cada
vez más utilizados por el ISIS para llevar a cabo sus orgías macabras. Tras el
atentado durante la celebración de la boda kurda, las autoridades iraquíes
detienen a otro menor, cargado de explosivos, cuando pretendía inmolarse en una
mezquita, constatándose que el Estado Islámico cuenta con más de 2.000
niños-bomba para sembrar el terror. Entretanto, mientras Sarkozy vuelve a
postularse como candidato a la Presidencia de Francia y París pierde un millón
de turistas por causa del terrorismo yihadista, en las playas francesas se
declara la guerra al burkini, manteniendo las autoridades su apuesta por la
seguridad con la prohibición del mismo en las costas de algunas ciudades, como
en la de Niza, donde los gendarmes obligan a las mujeres a que se despojen de
la prenda prohibida y además las multan por la infracción.
Otro asunto que cabe
destacar es que, mientras ya se dan los primeros síntomas de recesión por el
Brexit en la economía británica (resintiéndose la industria, los servicios y la construcción
sólo dos meses después del histórico referéndum), Merkel, Hollande y Renzi se
reúnen en la isla italiana de Ventotene para intentar reforzar la UE tras el
Brexit con una estrategia común para el futuro de una Unión sin el Reino Unido,
en tanto que una España con el gobierno en funciones queda al margen de las
grandes decisiones europeas.
Y mientras el
pretendido muro de Trump se estrella con la realidad de su gigantesca frontera
del sur, ya que, en vez de una amenaza para la seguridad, los 3.200 kilómetros
de la misma son vistos por los agentes como una emergencia humana que hay que
cubrir, en Venezuela Maduro corta por lo sano e inicia una purga de los
funcionarios que firmaron su revocatorio, dándoles dos días para que abandonen
sus cargos (es la democrática forma de proceder del régimen de Maduro que tanto
gusta a los comunistas y populistas españoles).
En cuanto a los
deportes se refiere, mientras regresan los olímpicos españoles, que aterrizan en
Madrid y Barcelona entre el cariño de los aficionados, el Consejo Superior de
Deportes ya busca nuevas vías para intentar brillar en Tokio 2020 tras el éxito
en Brasil y prepara una revisión de los programas de ayuda a los atletas. Por su
parte, la plata del etíope Lilesa pone en evidencia la represión policial
contra los oromo, su grupo étnico, que se ha cobrado más de un millar de vidas
en el último año por el mero hecho de querer preservar sus tierras y que Lilesa
denunció al cruzar la meta del maratón con un cruce de brazos.
Jorge Cremades Sena
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