ENTRE EL AMOR Y LA IGNORANCIA

                        Aunque el “caso Noos” y la comparecencia al respecto de la Infanta Cristina ante el juez Castro, merece un artículo específico (Ver “Declaró la Infanta, y ahora qué” en Blog Ojo crítico, http://jcremadesena.blogspot.com.es/,), no puedo, ni debo, pasar de largo en este comentario cotidiano de un asunto que ocupa las portadas de los principales diarios y en algunos de ellos casi en exclusiva. Mientras la izquierda convocaba manifestaciones ilegales para abuchear a la Infanta y en pleno debate sobre si Cristina haría el paseíllo para acudir al juzgado o lo haría en coche, mientras un dispositivo policial de 300 agentes se disponía para que asistiese en coche por razones de seguridad y se especulaba con que el juez le solicitaría como responsable civil unos 600.000 euros en concepto de devolución de la mitad de lo supuestamente desviado por su marido, y mientras más de 90 medios de comunicación (entre ellos la televisión iraní y un periódico japonés) se acreditaban para cubrir la declaración, doña Cristina de Borbón ha comparecido en el juzgado de Palma para declarar como imputada, dejando estupefactos a quienes sostenían que semejante trámite jamás tendría lugar. Para contestar a más de 400 preguntas (la mayoría ajenas al asunto concreto y específico de su imputación y muchas relativas a las andanzas de Urdangarín, su marido) durante más de 6 horas, la Infanta ha basado su defensa, para disgusto de algunos,  en la confianza casi ciega en su marido, en que estaba al margen de la administración de Aizoon y en que carece de formación técnico-tributaria, amparándose para su inocencia entre el amor y la ignorancia. “Yo confiaba en mi marido” y “No sé, no me acuerdo, no me consta” es la receta machacona, diseñada por su defensa, para no incurrir en contradicciones relevantes ante el juez Castro que, una vez más, es puesto en evidencia por el fiscal del caso, quien, al recibir de la Infanta respuesta negativa a su pregunta “¿Sabe qué delito fiscal le imputan”, concluye tajantemente “Yo tampoco”. Sin obligación legal como imputada a decir la verdad, ni a declarar contra su marido (al igual que el resto de los mortales) aun conociendo sus actividades delictivas, la imagen de mujer enamorada, confiada e ignorante, por inverosímil que parezca, es buena estrategia de defensa desde el punto de vista penal, salvo la existencia flagrante de pruebas contundentes achacables a ella misma y no a actuaciones movidas y justificadas por un exceso de confianza hacia familiares tan allegados. Tengo la sensación de que será difícil acusarla de un delito. Cuestión distinta es su responsabilidad civil y su mermada ejemplaridad. Al tiempo.

            Peor imagen tienen los protagonistas del caso Gürtel por redactar el pliego del concurso que ganó para la visita del Papa. Y pésima imagen que mil cien inmigrantes sean rescatados cerca de Lampedusa, mientras otros catorce mueren ahogados y aplastados al intentar entrar masivamente en Ceuta y ser frenados por la Guardia Civil. Una trágica paradoja que países como el nuestro, con serios problemas laborales como el índice insostenible de parados y el 25% de los trabajadores con empleos por horas, sean objeto de deseo, al extremo de arriesgar sus vidas para engrosar las bolsas de pobreza y miseria a los que son condenados en términos generales los conocidos como “sin papeles”. Menos mal que el desplome de los tipos de la deuda nos permitirá ahorrar unos 2.500 millones, permitiendo que el bono español a 10 años cotice al 3´5%, el precio más bajo desde 2.006. Algo es algo, aunque, como contrapartida negativa, la luz subirá hasta un 2´3% más al aumentar el tramo fijo de factura, aunque, según otras fuentes, bajará la factura; lo que parece cierto es que las renovables ya han costado al consumidor unos 50.000 millones.

            Y con toda seguridad, sin amor y sin ignorancia, actúan los independentistas vascos y catalanes. Urkullu ofrece a Rajoy un plan de excarcelación total para ETA, aplicable tras la disolución de la banda, mediante la firma de un documento de “arrepentimiento” por parte de cada recluso que escalonadamente irían saliendo de prisión y gradualmente se les iría acercando a cárceles del País Vasco, mientras que a aquellos presos por delitos de sangre cometidos en los últimos diez años se les aplicaría un “Plan Específico”. Obviamente la AVT exige a Rajoy que no ceda al “vergonzoso” plan del Lehendakari. Así, mientras ETA anuncia que hará “aportaciones significativas” al proceso sin “tardar” y Urkullu apremia a Rajoy para, según su plan, dar pasos hacia el final de ETA a través de otra política penitenciaria que acelere el proceso, en el PP se producen serias discrepancias, como en el asunto del aborto, que, comenzando con el abandono de algunos y la creación de otro partido nuevo, se sabe cómo empiezan pero no como acabarán. Por su parte en el ámbito catalán también bajan las aguas turbias y, mientras cada vez son más los padres que solicitan que sus hijos estudien en castellano, la quimera independentista provoca cismas cada vez más claros entre el mismísimo Mas y Homs, quien no tiene reparos en solicitar ayuda a empresarios de Madrid para bajar la tensión “in crescendo”, reconociendo que el asunto “se nos puede ir de las manos”, en tanto que el president no se baja del burro y con el mayor de los descaros, mientras mantiene su locura, solicita 6.400 millones al Estado (tras llevarse el 42% del fondo autonómico) cuando Madrid ya ha conseguido financiarse por sí sola. Un verdadero disparate si se tiene en cuenta que, coincidiendo con el mensaje de Rajoy en Cataluña, Cameron acaba de advertir a Escocia algo tan lógico y evidente como que “dividirnos es debilitarnos”, coincidiendo con la renuncia del nacionalismo flamenco a la independencia ya que el principal partido de Bélgica sólo pide más competencias (seguro que saltarían de alegría si lograran el techo de las que tienen tanto el País Vasco como Cataluña en España). Esperemos que más bien antes que después en los nacionalistas vascos y catalanes se instale la cordura.

Jorge Cremades Sena