No lo digo
yo, es lo que se desprende de una encuesta realizada por NCReport en la que la
mayoría de los españoles cree que con Podemos en el poder (y valga la
redundancia) España sería Grecia. Y justo cuando Grecia decide hoy mismo el
destino del euro y, en buena medida, el de la Unión Europea, con un referéndum
cuyo resultado no garantiza en ningún caso la salida de la crisis, siendo
además un plebiscito sobre Tsipras, en España, según la citada encuesta, el
86´9% exige a los helenos que paguen las deudas contraídas con Europa, el 78´3%
opina que Tsipras prometió medidas que no podía cumplir (es la esencia de los
populismos), y el 39% piensa que en el referéndum ganará el “sí” frente al
31´2% que augura que ganará el “no”. Es lo que en principio prefieren los
españoles, partidarios muy mayoritariamente de que los griegos, como el resto
de pueblos de la UE, paguen las deudas contraídas, frente a una minoría que
apuesta por la morosidad y, por tanto, por la inseguridad jurídica, la desconfianza
y el caos. Supongo yo que quienes mantienen el sacrosanto derecho de los
griegos a negarse a pagar las deudas contraídas, entre otros con España, apelando
a su soberanía, estarán de acuerdo asimismo con el sacrosanto derecho de los
demás pueblos, entre ellos el español, a exigir, apelando a idéntico principio
soberano, a que se les paguen las deudas, no vaya a ser que tan sacrosanto
principio sólo se considere positivo cuando lo ejercen unos y no si lo
ejercieran los demás. Y, supongo yo, que, al igual que Tsipras ha de rendir
cuentas ante los griegos, Merkel, Hollande, Rajoy y compañía tendrán que
hacerlo ante sus respectivos pueblos… ¿se los imaginan haciendo campaña en
referéndums contra Grecia tal como Tsipras hace contra la UE? Seguro que se
consideraría un comportamiento irresponsable donde los haya… ¿por qué no
considerarlo igual de irresponsable si es Tsipras quien así se comporta? Si
jugamos a la democracia habrá que hacerlo con todas las consecuencias, lo
contrario es jugar a la democratitis, un virus extendido en mentes totalitarias
que sólo juegan a la democracia cuando ésta les es favorable a sus particulares
intereses y en caso contrario rompen la baraja.
Y en esta España con
Podemos en la oposición, al menos de momento (aunque en algunos municipios y
autonomías gobernando gracias a los socialistas o co-gobernando con ellos),
Ciudadanos, según encuesta de Metroscopia, es el socio favorito para los
votantes del PP y del PSOE (es decir para la mayoría de los españoles), ya que
un pacto de gobierno entre PSOE y Podemos genera desconfianza mayoritariamente,
lo que requeriría que en la campaña electoral que se avecina (ya que no existe
segunda vuelta) los partidos se comprometieran a dejar bien claro (pero no mintiendo
como han hecho en las locales y autonómicas) con quienes piensan pactar en caso
de no obtener mayorías absolutas, lo contrario, como ha sucedido, es un secuestro encubierto de
nuestros votos. Entretanto, el populista “Kichi”, alcalde de Cádiz, que no
vería mal declarar ilegítima la deuda municipal (al igual que Tsipras), dice
que “en Podemos se tienen que terminar los personalismos” (como si en el
marxismo leninismos no fuera esencial el culto al lider o al jefe), mientras el PP se
apunta a la estrategia de poblar todas las tertulias políticas y las redes
sociales con nuevos dirigentes treintañeros que nada hayan tenido que ver con
Bárcenas y compañía, como es el caso de, entre otros, Pablo Casado, el nuevo
Vicesecretario de Comunicación (es obvio que las nuevas tecnologías son vitales
para todo, incluida la política), renovarse o morir… ¡y eso que el PP sufrió un
veto en la cabecera de la manifestación del Orgullo Gay por parte de los
organizadores! impidiéndoles así visulizar su supuesta renovación. ¡Para una vez que lo intentan! En fin, como si hasta las tendencias sexuales de unos u otros fueran
patrimonio ideológico de las izquierdas o las derechas.
Por otra parte,
mientras abogados del Estado (en excedencia, ¡menos mal!) se dedican a asesorar
en pleitos millonarios contra España, el juez ordena rastrear las comisiones de
FCC a Pujol Jr. al constatar que se le abonaron 710.000 euros con facturas
falsas a través de su tapadera y exigiendo averiguar si “la razón” de los pagos
es la adjudicación de obras públicas en Cataluña… ¡No, me digas!, seguramente
se debió a las tendencias caritativas de los empresarios sin nada a cambio. Y
es que los hay con suerte, como los Pujol, por ejemplo.
Y para finalizar,
mientras niños y jóvenes yihadistas ejecutan en masa a 25 militares en las
ruinas de Palmira, concretamente en el teatro romano de la ciudad siria, Jorge
Fernández-Díaz, Ministro del Interior, asegura que en España “es el momento más
crítico desde el 11-M por la amenaza yihadista”, que con ello no quiere generar
alarmismo (algunos le acusarán de ello) pero que tampoco quiere ocultar que
existe “un riesgo elevado de atentado terrorista” en España.
Jorge Cremades Sena
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