En la
clausura de la Convención Nacional del PP Rajoy promete bajar impuestos y
alerta contra “conjuros caribeños”, garantizando la creación de empleo, la
unidad de España y el Estado del Bienestar para evitar la “ruleta rusa del
populismo” pidiendo a los españoles que protejan el “cambio” económico para no
arriesgar lo conseguido hasta ahora con gran esfuerzo. Y lo hace coincidiendo
con la contundente victoria electoral de Syriza en Grecia, cuyo líder, Tsipras,
ha basado toda su campaña en un fuerte mensaje contra la austeridad. En efecto
Syriza, con el 36´35% de los votos y el premio de 50 escaños, que, según la ley
electoral griega, se concede al partido ganador, se queda a dos escaños de la
mayoría absoluta con 149 diputados, seguido de Nueva Democracia con el 27´84% y
76 diputados y el partido de extrema derecha Amanecer Dorado que con el 6´3% y
su cúpula en la cárcel consigue meterse como tercera fuerza política con 17
diputados, llamando la atención especialmente la debacle del PASOK que queda
por detrás de El Río con el 6´02% y 17 escaños o los Comunistas con el 5´47% y
15 escaños. Es la decisión soberana del pueblo griego que ha generado cierta
incertidumbre en el resto de países de la Eurozona ante la política agresiva
contra la Troika que propugna Tsipras, entre otras cosas, negándose a suscribir
los compromisos adquiridos por Grecia, en un claro desafío a las políticas
diseñadas desde Bruselas. Si, incluso habiendo moderado Tsipras su discurso
inicial de impagar la deuda griega y sustituirlo por renegociarla, dice ahora,
tras ganar las elecciones, que el país “abandona la austeridad” y anuncia que
el acuerdo con el Eurogrupo “está muerto”, no extraña que sus acreedores y
socios en la UE, entre ellos Alemania que es el principal, ya le haya avisado
que “no habrá ayudas si Atenas no cumple” y que el jefe del Bundesbank le pida
al nuevo Gobierno griego que respete los acuerdos firmados. Tampoco extraña que
su homólogo ideológico español, Pablo Iglesias, eufórico por los resultados
obtenidos por Tsipras, le avise a Rajoy de que “ya se oye el tic-tac del cambio”
como le ha sucedido a su colega Samaras en Grecia al quedar relegado al segundo
lugar en el Parlamento griego. En fin que, al margen de la valoración que unos
u otros hagan de los resultados electorales griegos, un panorama incierto se
vislumbra en toda la Eurozona en los próximos tiempos. ¡Que todo sea para bien
del pueblo griego y del resto de pueblos de la UE!
En España, donde hay
no pocas similitudes con Grecia pero desde luego sustanciales diferencias, por
si acaso, la presidenta andaluza Susana Díaz rompe con IU y convoca elecciones
adelantadas en Andalucía para marzo. Un adelanto electoral estratégico que coge
a contrapié a sus socios de IU, que, tras sostenerla en el gobierno, la tachan
de desleal y poco fiable, así como al PP y a Podemos, principal contrincante,
hoy por hoy, del PSOE, mientras a nadie se le escapa que una victoria de Susana,
más que probable, le abriría nuevos horizontes personales y partidarios. No hay
que olvidar que tras las siguientes elecciones locales y autonómicas, que no hace
coincidir con las andaluzas, según los inciertos resultados de las mismas
pueden quedar abiertos determinados retos de cara a las generales que serán las
últimas de la serie.
En cuanto a otros
asuntos, mientras se publica que Hacienda intentó localizar diecisiete veces a
Oleguer Pujol, tras la confesión de su padre, en cinco domicilios distintos, su
hermano Oriol implica nada menos que a Mas en gestiones que le reportaron
500.000 euros; una implicación en cobro de comisiones o tráfico de influencias,
ya que se especula, según los SMS, que Mas tuteló la fuga de empresas pilotada
por Oriol Pujol e indican que en el “caso ITV” el president conocía las
negociaciones “desde el minuto uno”, instando la Fiscalía al juez a investigar
los pagos en B al exdiputado de CiU en operaciones inmobiliarias. En fin,
nuevos datos sobre al clan Pujol y sus aledaños que, una vez más, ponen en
evidencia el cinismo indecente de aquella estrategia de “España nos roba” para
distraer a los catalanes de la correcta identificación de quienes eran los
autores del engaño y el latrocinio.
Destacar además que,
mientras en Argentina se sigue investigando el feo y turbio asunto del
asesinato de Nisman, el periodista que huyó a Israel por amenazas tras desvelar
la muerte del fiscal dice claramente y sin tapujos: “Me pregunto si mi tuit
arruinó el plan de alguien”. Sin comentarios.
Jorge Cremades Sena
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario, gracias