Aunque
cuando Ada Colau se dedicaba al activismo social, siendo una de las fundadoras
de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca en Barcelona, venía a manifestar
(al igual que hacían los del Movimiento 15-M) que lo suyo era eso, el activismo
social, sin interés alguno por dedicarse a la política, los hechos están
demostrando todo lo contrario. Utilizada la plataforma del descontento para
hacer proselitismo político y conseguir la alcaldía de Barcelona, Ada Colau, ya
integrada en la política, que repudiaba, y sometida a todos los servilismos de
la misma y a todos los vicios, como el nepotismo o el pragmatismo obligado
(convertida en “casta” que diría su “amigo” Iglesias), pretende ahora dar un
paso más y anuncia la creación de un nuevo partido al margen de Podemos, su
coyuntural aliado de En Comú Podem, convencida de que, si hasta ahora podían en
común, a partir de ahora ya pueden por separado, si hasta ahora, para ganar las
elecciones, jugaban a la ambigüedad, junto a Podemos, sobre el secesionismo
catalán, ahora ya no la necesitan y por ello, su portavoz en el Congreso Xavier
Doménech dice que “vamos a llevar el referéndum hasta el final”, impulsando
este nuevo partido, al margen de Podemos, que seguramente eliminará a Pablo
Iglesias del mapa político catalán y que obtendrá el favor de ERC en unas
generales futuras, lo que pone en evidencia que, cuando entre pillos anda el
juego, cualquiera de ellos puede hábilmente hacer la jugada que a nivel
personal más le conviene haciendo uso de cualquier pillería. Al final, entre
mareas, en común, compromís, abertzales, antisistemas… y todo tipo de
personajes diluidos en la nada bajo la apariencia de plataformas coherentes,
surgidas de una aparente democracia asamblearia, sin orden ni concierto alguno,
vamos a ser incapaces de saber exactamente con cuantos diputados cuenta el
autoproclamado vicepresidente del Gobierno de Pedro Sánchez para garantizar
definitivamente la ingobernabilidad más irresponsable en nuestro país. Si Colau
va a lo suyo e igualmente hace Compromís, las mareas y, en definitiva, cada una
de las varias decenas de partidos minúsculos que, por conveniencia, conforman
Podemos, cada uno de ellos con su particular paranoia, ya sólo basta que Pedro
Sánchez consiga vía libre para, habiendo obtenido el peor resultado electoral
de toda la historia de su partido, el PSOE, se eche en brazos de semejante
marabunta y acabar mancillando todo el esfuerzo y prestigio del centenario
partido socialista que, por cierto, siempre aguantó, incluso durante la Guerra
Civil, las embestidas de los comunistas para seguir siendo baluarte de las
libertades, los derechos y la igualdad de todos los ciudadanos.
En fin, en todo caso,
Iglesias, aunque sea para hacer el paripé (ya tiene detrás una historia de
pucherazos y eso que acaba de empezar) tendrá que consultar a las bases para
que acepten pactar con Sánchez (basta recordar lo de las CUP con Junts pel Sí,
para saber de qué tipo de democracia estamos hablando) y éste habrá de hacer lo
propio con la dirección socialista que, a efecto de pactos, es el Comité
Federal quien, al menos en teoría, decide. Así, Podemos advierte de que
cualquier pacto deberá ser votado por “los inscritos” en la web (más de
300.000) y, menos mal que ya quitaron aquella idea de las eternas jornadas
asamblearias de la Puerta del Sol en que se exigía la unanimidad para dar
validez a los acuerdos; mientras que Sánchez, tal como dicen los Estatutos,
habrá de someterse a la última palabra, que la tiene el Comité Federal y no
como hace su “número dos” (aunque tuvo que rectificar) defendiendo la autonomía
de Ferraz, que Sánchez desautorizó después, tras recibir agrias críticas por su
desapego al ideario del partido y por intentar “presidir a toda costa” (caso
insólito) para preservar su propio liderazgo, cuando lo más razonable es que,
tras el descalabro electoral sin paliativos, ya debiera haber dimitido y que un
Congreso eligiera el líder del futuro, asunto que, por cierto, ya lleva el PSOE
demasiado tiempo sin encontrarlo. Por su parte Rajoy y Rivera inician
conversaciones para conseguir “que sea posible la gobernabilidad de España” y,
a tal efecto, “explorar fórmulas”, aunque, con los resultados electorales en la
mano, es imprescindible contar con el PSOE, si es que al final su Secretario
General recupera o le hacen recuperar la sensatez y el sentido de Estado.
En cuanto a otros
asuntos cabe destacar que Patxi López será el único que tendrá coche oficial en
el Congreso; que Francisco Rivera torea con su hija en brazos; y que un hombre
en Vitoria abusa de una niña de 18 meses y al ser descubierto por la madre,
tras forcejear con ésta, arroja a la niña por la ventana provocándole graves
lesiones. Por otro lado, un terremoto de 6´3 grados causa 26 heridos y
atemoriza a Andalucía y Melilla, situada a 100 kilómetros del epicentro, que de
haber sido a la mitad podría haber causado estragos en dicha ciudad, mientras
los científicos exigen que se aumenten las inversiones para limitar el impacto
de seísmos en España, que tiene zonas con cierto riesgo.
Y mientras la UE
considera tomar medidas drásticas para el problema de los refugiados, al
extremo que varios países quieren prolongar dos años la suspensión del acuerdo
de libre circulación, el Coronel de la Guardia Civil que dirige el Centro
Europeo contra el Terrorismo dice “que el terrorismo lo parasita todo, incluso
la crisis de refugiados”. Por otro lado cabe citar que las petroleras pierden
250.000 millones de euros con la caída del crudo y que la OMS alerta de que el
virus zika, que ya está causando estragos en Brasil, se extenderá a casi toda
América.
Jorge Cremades Sena
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario, gracias