Desde
luego que sí. Y no tanto porque Granados así se lo dijera a su socio, “David,
esto tiene muy mala pinta”, para avisarle de que le estaban vigilando, mientras
Marjaliza, ensimismado en lo suyo, le preguntara “qué es el UCO”, ya que la muy
mala pinta para dichos sujetos, una vez confirmada, tiene una muy buena pinta
para el resto de la sociedad. En efecto, todos ellos en la cárcel o en libertad
bajo fianza es la mejor de las noticias; enviados por Interior a cárceles
distintas al tratarse de una “organización criminal”, mejor que mejor;
abortadas sus triquiñuelas de burlar la Justicia al denegarles la libertad que
pedían por “detención ilegal”, noticia excelente. Todo ello ayuda a que, de una
vez por todas, se ponga fin a tramas delictivas que hacen de la corrupción su
“modus vivendi” como, según el juez, es el caso, pues la prisión es, de
momento, el lugar más idóneo para personajes que participan en una
“organización criminal”, que tienen cuentas ocultas en paraísos fiscales, que regularizan
cuentas a precios de saldo, que mienten descaradamente, que son imprescindibles
o “núcleo” de la trama delictiva, que dan, entre otros, un “pelotazo” de diez
millones de euros con suelo público, en este caso de Madrid, o que, como
“conseguidores” de todo tipo de engaños y fraudes, alardean y disfrutan de un
nivel de vida inmerecido, mientras los ciudadanos honrados apenas pueden llegar
a fin de mes. Por tanto, los derroteros por donde va la Operación Púnica tienen
muy buena pinta para la sociedad en su conjunto. Lo que tiene muy mala pinta es
este “octubre negro” de la corrupción que acaba de terminar sumando, entre unos
casos y otros, nada menos que 127 investigados nuevos, todo un record en tan
corto espacio de tiempo, que pone en evidencia el peligroso nivel de corrupción
que tenemos en España, dando al traste con buena parte de la poca confianza que
los ciudadanos tienen ya en sus representantes políticos, quienes, o reaccionan
rápidamente de forma contundente, o las consecuencias futuras pueden ser
catastróficas.
Tiene muy mala pinta
que no se haya tomado medidas cautelares contra los Pujol cuando el fiscal cree
que Oleguer blanqueó dinero con 39 empresas y, al parecer, contrató una
empresa, la sociedad PuntotecMovil, que también es investigada, para destruir
pruebas cada semana y que guardaría en su sede las copias de seguridad, o que
movió 2´3 millones opacos de Holanda a Luxemburgo para comprar los terrenos de
un cuartel en Melilla, o que la UDEF señala que ejecutó un “plan preconcebido” para
lavar varios miles de millones. Demasiadas cuestiones para que siga campando a
sus anchas. Tiene muy mala pinta que los partidos carezcan de capacidad real
para retirar de un plumazo a un alcalde, diputado o cualquier otro cargo
elegido en sus listas (cerradas y bloqueadas) que, como la alcaldesa de
Alicante por ejemplo, estén imputados en uno o más casos de corrupción,
viéndose forzado a lo sumo a forzar a que el presunto delincuente se haga el
haraquiri, si quiere, y poco más. Tiene muy mala pinta que los casos de
corrupción se atasquen cinco años de media en los juzgados (Gürtel o Pretoria,
por ejemplo, se iniciaron en 2009 y todavía están en fase de instrucción), que
se acumulen los casos y den la sensación de que, no siendo tantos los
implicados (750 políticos, que representan un 0´25% del total, aunque sí muy
escandalosos por su volumen de corrupción y su pertenencia a casi todos los
partidos), todos los políticos sin excepción son unos corruptos y que además
gozan de impunidad absoluta. Y tiene muy mala pinta que por unas u otras
excusas o circunstancias los principales partidos políticos sean incapaces de
llegar a un acuerdo amplio para modificar lo que sea preciso de cara a agilizar
la justicia, a dotarse de más poder para erradicar los casos de sus filas, o de
penalizar de forma más severa y contundente a quienes metan la mano donde no
deben.
No extraña que, dentro
de cada partido tradicional, se tema una debacle electoral, tal como apunta la
reciente encuesta de Metroscopia por la que hoy por hoy en unas elecciones
generales se alzaría con el triunfo Podemos con el 27´7% de votos, por delante
de PSOE con un 26´2%, PP con un 20´7%, IU con un 3´8% o UPyD con un 3´4%. No
extraña que tanto PP como PSOE, aunque lamentablemente por separado, aceleren y
prometan llevar al Congreso sus propuestas anticorrupción, mientras dentro de
sus filas cabe todo tipo de pareceres al respecto, temiendo que, si sus líderes
no actúan con rapidez, el desastre electoral pueda ser morrocotudo. Así Rajoy,
acelera y promete llevar este mismo mes al Congreso sus medidas de
regeneración, mientras que, al contrario de lo que piensa la mayoría, algunos
como Monago diga tajante: “Yo sí pactaría con Podemos”; pensará que si hoy
Gobierna Extremadura gracias a IU por qué no lo va a hacer en el futuro gracias
a Podemos. Habrá que ver si Podemos piensa como él, ya que semejante
predisposición jamás puede ser unilateral, sino que depende, como mínimo, de la
voluntad de dos.
De la voluntad de dos,
como mínimo, dependerá también el inminente desenlace del esperpéntico 9-N que
entra en la semana decisiva. De un lado el informe del Consejo de Estado,
solicitado por el Gobierno como procede, advierte de forma unánime de que
incluso sería ilegal cualquier otra convocatoria hecha “horas antes” de la fatídica
fecha; vamos, que está prohibido jugar al ratón que te pilla el gato; advierte
que la nueva consulta, es decir, la mascarada, “agrava los vicios de inconstitucionalidad”
y acusa a Mas de “falta de lealtad” por su “reiterada y pública voluntad de
eludir los mecanismos de control” e incluso manifiesta que tendría incluso
menos garantías democráticas que la anterior consulta ya invalidada. De otro
lado, como era previsible conociendo el percal, la Generalitat anuncia que, en
todo caso, seguirá adelante con sus planes y pide a los voluntarios que lleven
“ropa discreta”; Mas, volviendo de nuevo a la desobediencia, incluso anuncia
que denunciará al Gobierno por “abuso de poder” (¡quién lo diría!) al impugnar
el referéndum ilegal, mientras su socio Junqueras, haciendo gala de su
planteamiento tramposo, da un paso más diciendo que “si España no acepta
negociar, Cataluña no pagará su deuda”. Por su parte el PSC reclama a Rajoy que
no impugne la mascarada intolerable. Seguramente será para no alarmar a la
bicha de ERC que, según los sondeos, ganaría las elecciones autonómicas, y
poder así negociar con Junqueras lo innegociable como es la soberanía del
pueblo español. Y, como ven, esto sí que tiene mala pinta.
Otros asuntos
conocidos en este fin de semana no tienen tan mala pinta, aunque, algunos de
ellos, según a quienes afecte, puedan parecerlo. Cada vez más jueces fuerzan a
los padres a mantener a hijos estudiantes o desempleados alargando la
obligatoriedad de pensiones de alimentos para hijos de 30 años de edad,
mientras tanto, cada vez son más las mujeres que congelan sus óvulos por
razones de trabajo aumentando un 61%. Por otra parte, mientras AENA aplaza a
enero su salida a Bolsa para elegir al auditor por concurso, las empresas del
IBEX se preparan para ir de compras al dispones de unos 62.000 millones por lo
bien que les está yendo, en tanto que el IRPF para los autónomos bajará al 19%
en 2015 y al 18% en 2016. Y, sin lugar a duda alguna, lo que tiene muy, pero
que muy buena pinta, es la evolución de Teresa Romero que por fin sale del
aislamiento al que estaba sometida a causa del ébola.
En cuanto a noticias
exteriores, con mayor o menor incidencia en España, la UE denuncia malos tratos
a los inmigrantes en la valla de Melilla mediante una carta de queja al Gobierno
por parte de la Comisaria de Interior saliente, su última perla contra España
antes de irse. Entretanto, la teniente coronel Ana Betegón será la primera
española al frente de una misión internacional al tener el mando en Afganistán
lo que, teniendo en cuenta que España es la quinta potencia en número de tropas
en el extranjero, es de gran importancia. Y, mientras se producen disturbios y
cierre de lugares religiosos en Jerusalén, China ocupa el vacío en Oriente
Próximo, ya que Pekín toma el relevo de Occidente en países como Irak y
Afganistán. Por otro lado, mientras Juan Manuel Santos, el Presidente de
Colombia, que inicia una intensiva gira por Europa, dice que “España es el
modelo para modernizar” su país, el Primer Ministro francés, Manuel Valls,
afirma rotundo que “si la izquierda no se reinventa, puede morir”. Buenos
ejemplos para que en España se tome buena nota de ellos. Falta nos hace.
Y en lo deportivo, el
Madrid golea de nuevo, en este caso 0-4 al Granada, superando en la tabla a un
irreconocible Barça que pierde en su casa con el Celta 0-1, otra derrota del
Barça de Luís Enrique.
Jorge Cremades Sena
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario, gracias