Es la petición del Ministro
de Interior, Jorge Fernández, a la
Comisaria de Interior en el encuentro que han mantenido en Bruselas para
aclarar los malos entendidos sobre la actuación de la Guardia Civil en Ceuta, además
de quejarse por sus críticas en twitter sobre el asunto y de solicitarle 45 millones
de euros para gestionar mejor las fronteras de Ceuta y Melilla que, obviamente,
no sólo son fronteras españolas, sino de toda la UE. “Si la concertina no te
gusta, dame alternativas” ha sido la frase concreta, invitándola además a que
visite Ceuta y Melilla para que conozca en vivo la rocambolesca situación que
se vive en la frontera, donde, por cierto, otros mil quinientos inmigrantes han
intentado traspasar la valla en masa en las últimas horas. Aunque algunos, sin
responsabilidades de gestión al respecto, se permitan de forma indecente hacer
demagogia sobre un asunto tan delicado, acusando de inhumanas las actuaciones
al respecto sin aportar alternativa alguna, los gobernantes decentes no pueden
permitirse semejante irresponsabilidad. Es imposible mantener simultáneamente la
orden de controlar los pasos fronterizos, desaprobar los métodos utilizados
para lograrlo y no aportar la alternativa correspondiente para obtener el éxito
perseguido. Si no le gusta el uso de la concertina, de las pelotas de goma, de
los botes de humo….y tantos otros métodos disuasorios, o me proporciona
alternativas para impedir el paso masivo de personas que huyen del hambre y la
más inhumana miseria, o me proporciona medios para mejorar en sus países
situaciones tan inhumanas o, sencillamente, me ordena abrir de par en par las
fronteras y que Dios nos ampare a todos. Aunque desde la teoría todo puede ser
ideal, incluido un mundo paradisiaco en el que todos somos buenos y benéficos,
en la práctica todo gobernante debe saber que es imposible sorber y soplar al mismo
tiempo. Por tanto practicar lo imposible, como se pretende, no suele ser lo más
acertado.
Tampoco parece muy acertado que
Blesa justifique las preferentes alegando que “los jubilados no son ignorantes”,
pues, aun siendo cierto, para entender el contexto de la situación le ha
faltado añadir que los banqueros son demasiado listos, al menos, algunos de
ellos y, en especial, si en vez de gestionar bancos privados se dedicaban a
gestionar las cajas de ahorros públicas metidas a bancos.
Si no acertado, si es sincero lo
declarado por Martitegi, ex jefe de ETA, al manifestar “hago mías todas las
acciones de ETA en sus cincuenta años”, dejando claro por tanto que ni se
arrepiente de nada, ni tiene que pedir perdón a las víctimas, lo que supone que
el Estado, al margen del gobierno de turno, debiera ser igual de sincero que
él, aplicando con idéntico fervor sus principios democráticos y, por tanto, haciendo
suyas todas las responsabilidades de aplicar severamente la justicia por todo
el dolor causado en esos cincuenta años. Por cierto, ya que hablamos de
violencia como método político, David Ventura, el líder de la asociación
catalana independentista, Omnium, que justificó el asesinato de un joven por “defender
a Cataluña frente a España” ha dimitido de su cargo, llamando la atención que,
siendo militante de Reagrupament, un partido político unido a Convergencia,
ésta formación política siga guardando silencio sobre tan grave asunto. Supongo
que se tratará de un lapsus sin mayor importancia.
Y, mientras la Comunidad de Madrid pide
el final del privilegio financiero del País Vasco y Navarra, un privilegio
trasnochado que antes o después habrá que eliminar, el Presidente del Gobierno
ha sentido el respaldo de las grandes empresas en el Foro de Bilbao que han
elogiado sus políticas económicas, así como de la CE y del FMI, aunque Lagarde
haya pedido incluso más reformas, advirtiendo que “es pronto para cantar
victoria”.
Lamentablemente también es pronto, a
pesar del esfuerzo diplomático internacional, para albergar esperanzas fundadas
de una futura distensión en el conflicto de Ucrania, sino todo lo contrario. De
entrada los mercados ya han dado muestras de haber encajado el ambiente
prebélico en la zona, hundiendo el rublo a bajo mínimos y con fuertes pérdidas
momentáneas en distintas bolsas. Todo pendiente de lo que pueda suceder, para
bien o para mal, en las próximas horas. En juego está la paz europea e incluso
algo más. Ver artículo “Vientos de guerra en Ucrania” en Blog Ojo crítico, http://jcremadesena.blogspot.com.es/,
Jorge Cremades Sena
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