Si nos guiamos por las
actividades de los distintos partidos políticos, especialmente el PP y el PSOE,
durante este fin de semana, no cabe duda de que se ha abierto la precampaña
electoral europea. El sometimiento final del PSN a las directrices del PSOE en
el asunto de la moción de censura en Navarra, las primarias abiertas convocadas
en el PSPV-PSOE, el cierre del congreso del PP vasco y la reunión en Alicante
de buena parte de la plana mayor pepera no dejan lugar a dudas. Además del
motivo causante de las convocatorias, los discursos correspondientes están en
clave electoral. Y las respuestas. Valga la respuesta de Cospedal al
cierre definitivo por parte del PSOE de la crisis navarra, que califica como un
gran éxito del PP ya que ha conseguido abortar “la infamia” que se pretendía en
Navarra. O basta las interpretaciones sobre el resultado del Congreso del PP
vasco, en el que, Quiroga obtienen un respaldo del 72% a pesar del apoyo del
mismísimo Rajoy, acusándola de haber ganado el Congreso pero no de conseguir la
unidad del partido, sobre cuyo daño la mismísima Quiroga ha pedido “perdón! Por
la parte que le toca. En todo caso, en clave electoral, cualquier crítica tiene
su lógica. Si hace cuatro días se acusaba al PP de cerrar sus congresos a la
búlgara, como sucedió en Andalucía, ahora se le critica su incapacidad para conseguir la
unidad del mismo con lo acecido en el País Vasco. Para la oposición,
obviamente, o el PP no es democrático o está dividido, el caso es intentar
buscar un talón de Aquiles donde, con verdades o mentiras, se le pueda hacer
daño, tal como intentará hacer el PP con sus adversarios. Es ley de
vida……electoral. Al final, lo importante es que el PSN, a regañadientes o no,
haya entendido lo que era mejor para el PSOE, que el PP vasco haya conseguido
elegir, a regañadientes o no, su nueva dirección política, y que el PSPV se
estrene en la nueva fórmula de elegir al líder de la formación de cara al
futuro. Enhorabuena a los elegidos en dichas formaciones.
Otro de los asuntos importantes es
el próximo aniversario, el décimo, del mayor acto terrorista en España, el
11-M. Un polémico asunto que, desbordado con todo tipo de especulaciones, según
Gómez Bermúdez, presidente del tribunal que lo juzgó, “diez años después, no
sabemos quién dio la idea de atentar el 11-M” que cambió el destino político de
España sin lugar a dudas. Nuevos datos, nuevos recuerdos y, ¡cómo no!, nuevas
especulaciones sobre un acontecimiento terrible ante el que ni el gobierno ni
la oposición de entonces estuvieron a la altura de las circunstancias y, ante
la inminente celebración de elecciones generales dos días después, optaron de
forma irresponsable por buscar ventajas políticas partidarias e vez de buscar
un consenso sin fisuras a la hora de afrontar el mayor peligro para los
españoles desde aquel fatídico episodio del 23-F de 1981. Un atentado que, como
el de las torres gemelas, pone en evidencia la vulnerabilidad de la libertad y
del sistema democrático en cualquier lugar del mundo. No en vano en estos
últimos diez años casi medio millar de islamistas radicales han sido detenidos
sólo en España, poniendo en evidencia que, a pesar del mayor esfuerzo en
asuntos de seguridad, no es descabellado que algo tan horrible e inhumano pueda
volver a suceder.
Y puestos a especular, nada mejor
que las fotos de la familia real, excepto el Rey, en Grecia donde han acudido
para conmemorar el aniversario de la muerte del padre de doña Sofía. Desde hace
bastante tiempo no se veía una imagen de los Príncipes de Asturias con la
infanta Cristina y al estar colocados en lugares distanciados la lógica
interpretación es la de una manifiesta frialdad o un prudente distanciamiento
entre ellos. En todo caso, una reunión familiar, como es el caso, no debiera
utilizarse, a mi juicio, como arma arrojadiza entre monárquicos y republicanos
que es de lo que, en definitiva, se trata.
En otro orden de cosas, mientras el
IBEX pide a Rajoy que recorte más la Administración y la prima de riesgo
consigue un nuevo mínimo al situarse el 171 puntos (¡quién lo diría!),
aparece la agencia de calificación
Moody´s diciendo lo que, por otra parte, todo el mundo sabe, que estima “poco
probable la independencia de Cataluña”. Y como en este país, tirios y troyanos,
están a la que cae para obtener réditos políticos, la polémica está servida.
¿Quién es Moody´s para meterse en camisas de once varas? En todo caso lo que
diga respecto a este asunto, poco o nada va a influir, salvo cuando añade que
la Comunidad mantendrá su “rating” mientras acceda al fondo de liquidez
autonómico. Casi otra obviedad innecesaria.
Para finalizar, mientras la opinión
pública española sigue conmocionada por la brutal paliza de una niña a otra que
fue grabada y publicada en Internet, en Uganda, la ley “anti-homosexual” ha
desatado la euforia de los iluminados en la persecución de los gays, dándose ya
casi cincuenta ataques, tanto a hombres como mujeres, por su condición sexual. Es
obvio que basta con dar carta de legalidad a los energúmenos o hacer la vista
gorda ante sus atroces comportamientos, para que la convivencia se convierta en
un verdadero infierno. Y, hablando de infierno, es en lo que se ha convertido
Crimea tras la convocatoria ilegal de un referéndum para saber si sus
habitantes quieren anexionar el territorio a Rusia que, trasgrediendo toda
legalidad internacional, alienta y ve con entusiasmo dicha posibilidad. Supongo
que quienes así amenazan la paz mundial, no estarán conformes con que se viole
sus respectivas unidades territoriales y que sólo se ponen a la otra orilla de
la legalidad por meros intereses espurios, de lo contrario sólo cabría
considerarlos como adalides del caos. Del caos universal.
Jorge Cremades Sena
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