De “autocracia electoral”
define la Eurocámara a la Hungría de Viktor Orban, caracterizada por la erosión
de la Justicia, la corrupción, el clientelismo y los ataques a la sociedad
civil y a la Comunidad LGTBI, por lo que vuelve a reclamar que se sancione a
Hungría por su deriva autocrática, y, al conocer la noticia, por un momento
pensé que se refería a España pues, salvo lo referente al LGTBI, todo lo demás
está pasando en nuestro país donde la erosión de la Justicia, la corrupción, el
clientelismo y los ataques a la sociedad civil por parte del minoritario
gobierno de Sánchez es palpable y lamentable. Por otro lado el Consejo de
Europa advierte duramente al Gobierno español de que “ninguna democracia puede
permitirse socavar la confianza en el Supremo o en el CGPJ” y recuerda, tras
los ataques al TS por la condena al Fiscal General, García Ortiz, insólito en
cualquier país nítidamente democrático, que “el respeto a las decisiones
judiciales es un principio fundamental” del Estado de Derecho. Entretanto,
según NCReport, la mayoría de españoles, el 52% cree que España es hoy menos
democrática que hace diez años, frente al 34´7% que cree que lo es más, y el
53´5% cree que no existe una derecha judicial, política y mediática que busca desgastar
al Gobierno, frente al 34´5% que cree que sí existe. Por otro lado, mientras,
según SigmaDos, Vox se lanza a la caza del voto obrero y ya roza el 19% y dobla
a Sumar (los dos polos más extremos del abanico parlamentario), la popular
Guardiola arrolla al alfil de Sánchez en Extremadura, donde Vox, como en el
resto de España, sigue creciendo y los resultados en la comunidad extremeña
serían: PP 42´3% de votos, PSOE 32´5%, Vox 13% y UP 7´9%, aunque, según el CIS,
serían PP 38´5%, PSOE 31´6%, Vox 17´3% y Podemos 9´6%. En cuanto a Cataluña se
refiere sube en las encuestas Silvia Orriols, alcaldesa de Ripoll, diputada en
Les Corts y lideresa de Aliança Catalana, secesionista radical, islamófoba y
catalana de pura cepa…. Obviamente los partidos democráticos, tanto de derechas
como de izquierdas, moderados y constitucionalistas, estaremos haciendo las
cosas demasiado mal para que en la ciudadanía se esté instalando esta
progresiva tendencia a la autocracia y no sólo en Hungría o en España, sino en
otros estados-miembros de la UE, que dificultan gravemente la gobernabilidad de
los países en una Europa que pierde peso en el vendaval geopolítico existente.
En este preocupante contexto, España
abre ciclo electoral bajo la sombra de los casos de corrupción, pues los
comicios autonómicos en ciernes, la prisión de Ábalos y un más que posible
adelanto electoral tensionan la política, haciendo cada vez más difíciles
acuerdos en beneficio de la ciudadanía. Así el panorama, Feijóo, que no anda
mal en las encuestas, decide echar un pulso en la calle a Sánchez y a su
gobierno minoritario de coalición, al que tilda de “cloacas” y “mordidas” en
una manifestación convocada en Madrid “para pedir democracia, urnas y
decencia”; manifestación, de varias decenas de miles de personas (80.000, según
el PP y 40.000, según Delegación del Gobierno) ante las que el líder del PP
arremetía contra Sánchez e incluso apuntaba a la cárcel porque “falta el uno” y
pedía elecciones anticipadas apelando a los socios parlamentarios del PSOE para
que “se retraten”, pues “el sanchismo está en la cárcel y tiene que salir del
Gobierno” y hay que poner fin a las “mentiras, impunidad y corrupción” del PSOE
con “elecciones ya”. Un imparable clamor ciudadano contra Sánchez por los
escándalos de corrupción que le acompañan tanto a él como a su gobierno
minoritario de coalición con Sumar, mientras Feijóo reclama una “limpieza
profunda” de las instituciones y reprocha a los socios de Sánchez su apoyo,
sobre el que tendrán que dar pronto explicaciones en las urnas. No obstante, PP
y Vox vuelven al choque para captar el voto antisanchista y ponen fin a la
tegua alcanzada en la Comunidad Valencianas enzarzándose ante las elecciones
extremeñas ya en marcha mientras Abascal reprocha a Feijóo la corrupción del PP
en la Diputación de Almería.
Y, hablando de corrupción, el Gobierno
responde a Ábalos que no se dejará “chantajear” mientras el PSOE se revuelve
contra las “difamaciones” del ex ministro encarcelado, en tanto que los aliados
parlamentarios mantienen su apoyo a Sánchez aunque crece la preocupación entre
ellos por lo que pueda venir. Y es que Ábalos, entre otras cosas, señala
directamente a Armengol, diciendo “me desprecia a mí y al Congreso”, envía un
escrito al Parlamento (él sigue siendo diputado, aunque sin sueldo ni derecho a
voto en el Congreso) para exigir que se proteja la “inmunidad parlamentaria” y
acusa a la Presidenta de la Cámara de prevaricar porque “ella tiene que
defender al Congreso frente al Supremo”. Entretanto el PSOE llama “deleznable”
a Ábalos por romper un “pacto de no agresión” y Ferraz explota ante sus ataques
a Begoña Gómez, la mujer del Presidente, mientras el Gobierno teme que se
“venga abajo” en prisión, pues “es peligroso, sabe mucho”. En todo caso,
Sánchez da luz verde contra su “ex número dos” y el PSOE lo llama “indecente”, cambiando así de
estrategia tras el aviso de Ábalos contra Begoña y cargan contra él diciendo
que “es un mentiroso y chantajista”. Mientras tanto, entra en escena Víctor
Ábalos, hijo del todopoderoso ex ministro y ex secretario de organización del
PSOE y mano derecha de Sánchez, diciendo: “Santos le ofreció un cheque en
blanco a mi padre en nombre del Presidente” e implica a Lastra y Robles en la
“bomba interna” del PSOE que hizo caer a su padre, añadiendo “no soy un
corrupto, me han destrozado la vida” y añade “Sánchez dio la orden directa a mi
padre de ir a ver a Delcy”, “mi padre
subió al avión y ella le dijo que venga Zapatero, que le llamen; quería hablar
con él porque era su referente”, detallando que fue el “Delcygate” lo que marcó
“un antes y un después para mi padre” (es la nueva versión, de aquel oscuro
episodio en Barajas, que todavía no ha sido explicado fehacientemente).
Mientras tanto se publica, sin que
nadie lo desmienta, que la causa de la caja del PSOE está pendiente de un
informe de la UCO con lo que aporte Ferraz; que nadie alza la voz contra
Sánchez en la Ejecutiva del partido; que Koldo instó a Ábalos a fugarse a
Colombia o Perú, mientras éste cree que puede pactar con Fiscalía “cinco
minutos antes del juicio”; que el ex ministro y Koldo sostienen que Begoña se
implicó para que Moncloa concediera la millonaria ayuda a Air Europa; y que la
trama acorrala a Sánchez por su suegro y el dinero de las primarias, pues las
donaciones a la campaña interna por el liderazgo del PSOE son el punto más
débil del Presidente encendiendo la luz roja en Moncloa, mientras el PP cree
que le acabará tumbando la fontanería del proceso interno de 2017.
Y en medio de este entramado
oscurantista Marlaska silencia el último ataque yihadista en Madrid, en
definitiva, el caso del herido en Puente de Vallecas el pasado sábado cuando un
individuo atacaba a agentes al grito de “Alá es el más grande”, lo que se está
investigando como terrorismo; un ministro, Marlaska, que ya se resistió a ver
una acción extremista en el atropello mortal de Torre Pacheco en 2021 y el
crimen de Algeciras en 2023. El problema es que, llegados al extremo de que
todo está bajo sospecha y nadie se fía de nadie, Interior inicia el relevo en
la cúpula de la UCO, tan cuestionada por el Ejecutivo, tras ascender a general
al actual Jefe, el coronel Rafael Yuste, quién frenó intentos de “intromisión”
y que tendrá que dejar el puesto cuando la unidad está en plena investigación,
entre otros, de los casos de Aldama y de Begoña Gómez, lo que, dada la ausencia
de imparcialidad con que actúa el Gobierno, se teme que, como en otros casos,
se busque para el relevo a alguien más proclive a la docilidad con el
Ejecutivo.
Por su parte Feijóo además pide ayuda
a la patronal catalana para una moción de censura y, en concreto, que convenza
a Puigdemont para que la apoye, mientras dirigentes del PP le piden a él que
presente la moción aunque la pierda, pues Génova reclama “asumir el riesgo”
para que se retraten los socios de Sánchez y cada quien que apechugue con las consecuencias.
Y, para colmo de los colmos, Juan
Carlos I difunde por redes un video reivindicativo de la Monarquía y su legado
dos días antes de la publicación en España de sus polémicas memorias; video que
Zarzuela considera “inoportuno e innecesario”. Ya ven, éramos pocos y parió la
abuela. ¿Es que nadie es capaz de poner un mínimo de sentido común?.
En cuanto a otros asuntos citar que
los altos funcionarios denuncian la subida salarial hasta 2028 por fraude de
ley; que María Blasco, ex directora del organismo, dice “pedí que echaran del
CNIO al gerente, no hicieron nada y me cesaron a mí”; que en dos días el Gobierno
compromete 14.000 millones para funcionarios y pensionistas, y las pensiones
aumentarán un 2´7% en 2026 para compensar la inflación; que más de un millón de
descendientes de españoles solicitan la nacionalidad en una avalancha de
peticiones en los consulados por la ley de memoria; que investigan como posible
suicidio a las dos adolescentes halladas muertas en Jaén y amigos suyos afirman
que habían sufrido acoso escolar; que la peste porcina amenaza un negocio de
8.800 millones de euros, la UME se suma al despliegue para controlar el brote
epidémico y China veta las importaciones de porcino que procedan de Barcelona;
y que Rabat castigará a Feijóo con más inmigración si corrige desde Moncloa el
giro de Sánchez, adelantándose Marruecos a un cambio de Gobierno en España y
avisando al líder del PP de que pasará a la acción si modifica la política
actual del Ejecutivo de Sánchez (se ve que al régimen alauita no le viene nada
mal el gobierno sanchista de España).
Y del exterior, destacar que Trump
proclama el cierre total del espacio aéreo venezolano y Maduro tilda la medida
de “acto hostil unilateral” y “colonialista”; que Felipe VI no es bien recibido
en el perdón histórico en Guernica, el Gobierno no acudió a arroparle y el PNV le
afeó que fuera de “mero acompañante” del Presidente alemán; que Zelenski pierde
a su jefe de Gabinete por un asunto de corrupción y Ucrania resiste en un
frente cada vez más brutal, mientras Macrón, en momento tan “decisivo”, recibe
al líder ucraniano y le promete más sanciones contra Rusia para obligarle a
negociar; y que Netanyahu pide al Presidente de Israel el indulto por sus escándalos
y lo argumenta en razones del “interés nacional” (¿les recuerda esto del
indulto por “interés nacional” a alguien?; a mí, sí; ¿saben a quién?).
Jorge
Cremades Sena
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