jueves, 29 de junio de 2023

FELICIDAD Y AMOR

 

                        Hay afirmaciones incuestionables e irrebatibles ya que, aunque estén vacías de contenidos concretos, nadie, absolutamente nadie, salvo los malvados, puede oponerse a ellas. El último de los ejemplos es el protagonizado por la Ministra Portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, al decir que desde el Gobierno van a combatir “con toda la fuerza del Estado” los “retrocesos” de los pactos PP y Vox, que apenas se están consolidando ahora en las distintas CCAA, pero, que ya ven, según ella, ya están causando estragos antes de ponerse en marcha, y, por tanto, el Gobierno al que ella pertenece “va a seguir trabajando por la felicidad y el amor de todas las personas”, a lo que, obviamente, si se trata de conseguir semejante objetivo, nada que objetar, pues sólo cabría apostar en las urnas masivamente por dicho gobierno ya que, por contraposición, el resto de fuerzas políticas que se presentan lo que buscarían sería la infelicidad y el desamor u odio de todos o de la mayoría de las personas, lo que, en democracia, sería un contrasentido superlativo ya que es difícil entender que en las urnas esa mayoría apueste por quienes proponen semejantes maldades colectivas para ellos. Es evidente pues que se trata de un sofisma populista de primera magnitud con el fin de confundir al electorado como si fuera imbécil. Por su parte Batet, la Presidenta del Congreso de los Diputados y cabeza de lista socialista por Barcelona para el 23-J, argumenta que “la mayoría de la población no tiene problemas para continuar pagando el alquiler” para defender con tan cínico argumento la decisión del Gobierno de finiquitar la prórroga del decreto anticrisis, provocando el rechazo, no ya de todos los que tienen graves problemas para llegar a final de mes, que no son pocos, sino además de los propios socios y apoyadores de la investidura de Sánchez como Gabriel Rufián que se pregunta “si no puedes pagar el alquiler y votas lo mismo que Batet, ¿quién se equivoca, ella o tú? Piénsalo”, como el portavoz de la campaña de Sumar y eurodiputado de los comunes, Ernest Urtasun denunciando que la subida de alquileres “es un problema social de enorme magnitud”, como incluso Margarita Robles desde las propias filas socialistas diciendo que “hay que ver la realidad” y ésta muestra que “hay personas que no llegan a fin de mes”, o como el portavoz adjunto de EHBildu en el Congreso, Oscar Matute, reprochando a Batet que quienes no tienen dificultades para pagar el alquiler será “la mayor parte de la población que ella conoce” y no el resto….. Batet ante semejante ola de críticas ha pedido disculpas y ha matizado su desafortunada declaración que, en todo caso, refleja la indeseable instalación del Gobierno y del PSOE sanchista en el irrealismo, en la demagogia y en el populismo más cutre. Y todo ello en medio de una campaña de Sánchez sin coordinación alguna entre Moncloa y PSOE (por ejemplo, se acaba de producir un vacío a la orden de tener reuniones con pensionistas para movilizarlos), ya que el partido, tras el descalabro del 28-M, está más pendiente de los movimientos internos, si cae el “sanchismo” el 23-J, que de intentar evitar lo inevitable, como es que se olvide el pintoresco historial del Gobierno Frankenstein pactando y cediendo con todo tipo de radicalismos indeseables para mantenerlo a flote como sea hasta el final, evidenciando que eso de la “felicidad y amor”, que dice su portavoz, es un mero camelo electoralista. Y, así las cosas, al PSOE sólo le queda confiar su suerte a una sobreexplotación de Sánchez para dar la cara (cinismo y cara no le faltan al Presidente) en los medios con más platós de televisión y entrevistas que mítines directos en la calle, mientras los populares ven “desesperación” del Presidente en esta estrategia y Feijóo dice en El Hormiguero a los ciudadanos que “si quieren seguir con independentistas, voten a Sánchez, y si quieren un cambio voten al PP” y carga contra el sanchismo al que califica de “maldad, mentira y manipulación”, mientras el PSOE obvia el plan para lavar la imagen de Sánchez (ya le dijo Susana Díaz en su día que el problema era él) entendiendo que “no se puede borrar a Bildu ni la ley del sólo sí es sí con cuatro gracias en varias televisiones”.

            No obstante, como parte de esta estrategia electoral y en competencia con sus socios (a ver quién da más), Sánchez agita el Orgullo para intentar frenar al PP en la calle y llama a movilizarse contra “Feijóo y Abascal”, los malos de la película, en la manifestación del sábado y manda a cinco ministros del PSOE a la misma, mientras los populares remarcan su “compromiso con el colectivo LGTBI”, siendo lamentable que, como sucede con el feminismo radical, se utilicen estas cosas con fines electoralistas, cuando la homosexualidad sigue estando criminalizada en 67 países, en algunos de ellos incluso con pena de muerte, y cuando afortunadamente, gracias a la lucha de todos, en nuestro país no suceden ya estas aberraciones, por más que algunos se afanen en abrogarse en exclusiva las soluciones al problema, mientras la ministra Irene Montero presenta en solitario los premios de Igualdad por el Orgullo sin presencia de Yolanda Díaz ni del PSOE, aunque sí la del ex presidente Zapatero que, convertido en un gran defensor del movimiento, recibe su premio, mientras Montero deja bien claro que “es tiempo de Orgullo y mucha furia Trans” y, por su parte, Vox retira la lona del odio del centro de Madrid por orden de la Junta Electoral de Zona, en la que se tiraba a la basura símbolos del feminismo, del colectivo LGTBI, la Agenda 2030, el movimiento okupa, el comunismo y el independentismo catalán, aunque la Junta Electoral lo rechaza porque lo considera propaganda electoral sin entrar en la legalidad o no de sus mensajes, entre los que, obviamente, algunos son más asumibles que otros para la mayoría de españoles.

            Entretanto, el separatismo amenaza a Feijóo con un “frente común” contra el 25% de clases en castellano, pues ERC y Junts proclaman que “combatirán” la educación en castellano (lengua oficial en toda España pero maldita en Cataluña) y el PSC llama a “defender el catalán” (lengua que hoy en día es cooficial en tierras catalanas y no corre ningún riesgo o amenaza), cuando la realidad es que la inmersión lingüística lastra el rendimiento de los alumnos y hunde sus datos de comprensión lectora, mientras, por ejemplo, un niño de 14 años sufre bullyng y dice que “me trataban como escoria” después de que su padre consiguiera para él el 25% de clases en castellano y cuando se investiga por delito de odio el acoso a una enfermera andaluza, hostigada por el separatismo y por el propio Govern tras criticar en un video el requisito del catalán para poder opositar. Además ERC dice que no volverá a investir a Sánchez sin referéndum en Catalunya, frente a lo que hizo en la pasada legislatura, con lo que los socios de coalición elevan el precio para facilitar otro mandato del líder socialista y, tras tener entretenidos con Sánchez a los españoles con la ilegal propuesta en la patética Mesa de Negociación, pretenden ahora negociar una ilegal consulta vestida con los eufemismos que hagan falta, sin que el Presidente del Gobierno se plante y diga de una vez por todas que las ilegalidades no son negociables en mesa alguna y, por tanto, han de ser retiradas de la misma. 

            Prosigue entretanto el proceso de formación de gobiernos autonómicos y, por tanto, se van consolidando los pactos PP-Vox en la mayoría de las CCAA así como los de Bildu y PSOE en Navarra. En Extremadura la popular Guardiola se abre por fin a negociar con Vox y pide “unos días” de tiempo para lograr la negociación, ya que Vox “es un partido constitucional con el que me quiero poner de acuerdo” para gobernar en la Autonomía extremeña, mientras el socialista Vara, que dijo tras el fiasco del 28-J que se retiraba de la política, cambia de opinión y manifiesta ahora que se presentará a la investidura, mientras los socialistas critican a la candidata popular por haber rectificado, pero ven razonable la rectificación de su líder y, entretanto, Abascal saca pecho en Valencia acudiendo a la primera sesión de las Cortes Valencianas y alardeando del acuerdo con el PP que califica de “sensato” y “muy razonable”, tras haber colocado en la Presidencia de las mismas a Llanos Massó, una activista antiaborto que niega la violencia de género y se opone a la educación sexual. En Baleares PP y Vox llegan a un pacto para que el PP gobierne en solitario pero aceptando un acuerdo programático con los ultras a cambio de la abstención que les facilite gobernar, acuerdo que cuestiona la eutanasia y el bilingüismo, con el objetivo de acabar con la discriminación del castellano y entrar en los consejos insulares de Mallorca y Menorca. Así, poco a poco, se va consolidando la gobernabilidad de las CCAA y ya son bien pocas las que quedan por pactar.

            Y en medio de este berenjenal electoral mientras las CCAA buscan sus fórmulas para ser gobernadas, Sánchez no tiene reparo alguno en utilizar la chequera gubernamental a pesar del nulo resultado que le dio en los comicios del 28-M y, al efecto, su Gobierno aprueba, a menos de un mes de las elecciones, ayudas a las familias por 9.000 millones, incluyendo en el decreto (su modo favorito de gobernar) permisos por cuidados de familia, prórrogas a las medidas contra la inflación, prohibición de los desahucios, desgravaciones del 15% para coches eléctricos y blindaje del taxi frente a los VTC, mientras con un decreto-escoba recupera los tres nuevos permisos para el cuidado de hijos y familiares que preveía la ley de Belarra que no llegó a aprobarse, provocando malestar en Sumar por marginarle de estas decisiones, algunas de ellas por iniciativa de UPodemos, como, por ejemplo, liquidando la prórroga de alquileres contra el criterio de Yolanda Díaz u ocultando tres nuevos permisos de Belarra a las familias. Y, por su parte, Feijóo sigue desgranando su programa electoral con medidas, entre otras, como bajar el IRPF a rentas inferiores a los 40.000 euros, superar los 22 millones de afiliados a la Seguridad Social, medidas antiokupación, acabar con la falta de médicos de atención primaria, mantener las centrales nucleares, homogeneizar los permisos y licencias de una autonomía para que sirvan en todo el territorio nacional, cambiar el reparto “arbitrario” de los fondos europeos, una “mochila austriaca” flexible, o situar a España entre las tres economías que más crecen en Europa. Y mientras Sánchez dice “siento que hemos retrocedido 20 años en 20 días”, Feijóo acepta un “cara a cara” con él pero no en la pública y anuncia que las políticas de Igualdad dependerán de él directamente si gobierna, en tanto que Sumar pide votar hasta las 22 horas el 23-J por las altas temperaturas….y entretanto el Gobierno critica al PP en reuniones con la UE sobre la Presidencia Española, provocando incomodidad en autoridades europeas al transmitir que una derrota del PSOE el 23-J malograría el semestre español, mientras diplomáticos constatan el tono electoral que usa el Ejecutivo español, que, ya ven, no se hace a la idea ni se resigna a que puede ser desalojado del poder en las urnas.

            En cuanto se refiere a otros asuntos citar que los hogares consumen un 3% menos pero desembolsan un 8% más en gastos corrientes; que Alemania, Francia e Italia crean una alianza industrial sin España; que la ola de calor se cobra en Sevilla la primera víctima mortal de la temporada; que la Banca sube un 3´2% las comisiones a los particulares sin retribuir los depósitos; que muere Carmen Sevilla a los 92 años de edad; que se produce un record de suicidios en 2022 con casi 4.100 casos y los menores en riesgo; que el Gobierno promete a la UE que el 81% de la electricidad será renovable e insiste en el apagón nuclear, calculando una inversión de 294.000 millones pero previendo que el 85% proceda del capital privado; y que las hijas del Drones pagaron 50.000 euros a la red de Tito Berni e, investigadas por cohecho y falsedad, declaran ante la juez del Caso Mediador, que imputa al dueño del club que acogía las fiestas del ex diputado socialista.

Fdo. Jorge Cremades Sena

lunes, 26 de junio de 2023

PACTAR… ¿QUÉ?

 

                        Como era de esperar y como, seguramente, pretendía Sánchez con el adelanto de los comicios, han bastado las primeras discrepancias en los pactos entre PP y Vox en Extremadura para que el interés político y mediático sobre la campaña trate de cualquier cosa menos de los proyectos que los españoles votaremos el 23-J y pivote todo especialmente alrededor de los pactos que, como dicen las encuestas, habrán de firmar con otros partidos el PP o el PSOE si, tras los comicios, quieren gobernar España, pues ninguna de ellas concede mayoría absoluta a ninguno de los dos principales partidos que concurren a las elecciones, con lo que las opciones, salvo que los ciudadanos cambien de opinión radicalmente, son claras: o Gobierna el PP pactando con Vox, o repetimos el gobierno del PSOE pactado con Sumar (nueva marca de UPodemos) y apoyado por ERC, Bildu y compañía; de momento no caben otras opciones. Así las cosas, salvo que sigamos el ejemplo de Grecia (en que el conservador Mitsotakis, tras ganar las elecciones sin mayoría suficiente, decidió no ceder a las exigencias y chantajes de los partidos perdedores para pactar y, tras la celebración de nuevos comicios, se acaba de alzar con la mayoría absoluta, aunque el Parlamento tendrá hasta tres grupos de extrema derecha), todo apunta a que tras el 23-J los españoles estaremos abocados a pactar y, en ese caso, la cuestión más fundamental, el mal menor, no será tanto con quién pactar sino qué pactar, que es justo lo que olvidó Sánchez al pactar con Pablo Iglesias no un concreto programa de gobierno (incluso minoritario, ya que entre ambos carecían de mayoría absoluta) sino un reparto de cargos o sillones entre gobernantes mal avenidos. Esperemos pues que, en esta ocasión, hayamos aprendido algo y, gane quien gane, no se cometa semejante error, pues siempre será mejor, como ha sucedido en Grecia, trasladar la responsabilidad de nuevo al pueblo con repetición de comicios que hilvanar unos pactos de intereses personales de los dirigentes políticos sujetos a interpretaciones subjetivas sobre lo que han querido decir los ciudadanos ya que en nuestro país no caben fórmulas, como pudiera ser una segunda vuelta entre los partidos más votados, para resolver la gobernabilidad cuando el resultado conduce al caos. Así pues, sea el PP o el PSOE, ambos debieran dejarnos bien claro y por escrito, qué líneas rojas no van a permitir traspasar a sus presuntos aliados minoritarios para que los ciudadanos podamos decidir con conocimiento de causa y no nos veamos de nuevo decepcionados con promesas tajantes de no pactar con zutano o mengano para después, como hizo Sánchez, pactar con ellos, dejando con el culo al aire a sus electores y al resto de españoles. Asuntos de trascendental importancia como, entre otros, la xenofobia, el negacionismo, la violencia machista….. pero también, entre otros, el secesionismo y la integridad territorial del Estado, así como el respeto y acatamiento absoluto al orden constitucional, deben quedar bien claros a la hora de pactar, empezando porque Sumar, probable socio del PSOE como lo fue UPodemos, aclare si en su programa incluye el ilegal referéndum que propone ERC y que apoya Colau, al que se suma claramente Podemos, ambos participantes y miembros de la plataforma variopinta de más de quince partidos, cada uno de su padre y de su madre, con la que Yolanda Díaz comparece en los comicios y que, de momento, supone el primer desencuentro interno serio de Sumar en Cataluña… ¿lo apoyará también Errejón en Madrid con su invento Más País?, de momento Podemos se suma a Colau para desgastar a Yolanda Díaz con un referéndum en Cataluña, que, como lideresa de Sumar prefiere un acuerdo que “surja de la mesa de diálogo” y luego ratificarlo en las urnas, es decir, reiterar, para entretenernos, el famoso invento del Gobierno Frankenstein y ERC escenificando la ilusoria realización de lo imposible, en términos democráticos, como es la promesa ilusa de que los catalanes podrán decidir de forma legal el futuro destino de Cataluña al margen del resto de españoles, depositarios como ciudadanos españoles del derecho a decidir el futuro de España en su conjunto de la que forma parte Cataluña, histórica y constitucionalmente.

            Entretanto prosigue el intento de conformar los gobiernos que faltan en algunas CCAA y, de momento, el PP cede la presidencia de las Cortes de Aragón a Vox para gobernar en solitario, pues presidir el Legislativo es menos gravoso que tener consejeros radicales (pudiendo ser esa la fórmula más adecuada de cara al futuro), aunque la elegida para el cargo sea una ultra conspiracionista, que, obviamente, daría una pésima impresión como Consejera o Vicepresidenta del futuro Gobierno aragonés, pero, sin embargo las cosas se complican en Extremadura, donde el veto de la popular Guardiola a Vox genera malestar entre los cargos del PP que, a nivel nacional, ha decidido que en cada autonomía resuelvan autónomamente la formación de gobiernos y los pertinentes pactos, lo que no convence a todos pues ya algunos parlamentarios se quejan de que “hemos vuelto al rajoyismo” y sostienen que el “Vox de Valencia es el mismo que el de Extremadura” mientras Guardiola sostiene que son circunstancias distintas ya que el peso de apoyos a PP y Vox son distintos en los distintos territorios y lo injusto sería tratar por igual a lo desigual, mientras Génova le exige relajar el pulso con Vox, pues Feijóo trata de pasar esta página lo antes posible “para volver a colocar su mensaje” y, desde Vox, Sánchez del Real sostiene que “si ella respeta a los votantes de Vox, hay margen de acuerdo”….obviamente lo más adecuado sería sentarse para decidir qué pactar con arreglo al peso específico que cada partido tiene o repetir elecciones en Extremadura para que los extremeños decidan de forma más clara quien debe gobernarles, como sostiene Guardiola, quien apela a que en su campaña electoral prometió que no pactaría con Vox. Quien no tiene problema alguno, porque los madrileños así lo han decidido claramente, es Ayuso en Madrid que estrena mayoría absoluta y es proclamada Presidenta, rodeándose de una generación de tecnócratas y gestores para un Gobierno renovado y exhibiendo su buena sintonía con Vox, aunque declara que “la izquierda está destruida, sólo puede remover el pasado y Vox se lo pone fácil”, añade que “el ejemplo de Andalucía debería enseñarnos a no perder una oportunidad única en Extremadura, sería una pena que no consiguieran el cambio” y remata con que “el ruido con Vox ha despistado el rumbo de la campaña, hay que volver a lo que importa”.

            Y lo que importa, según el PP de Feijóo, es salir lo antes posible del debate genérico de buenos y malos para que llegue cuanto antes el 23-J y puedan decidir los españoles, mientras sale a la palestra Zapatero para decir que “muchos se lamentarán de los ataques a Pedro Sánchez” y mientras Samper, el portavoz del PP presenta la campaña Verano Azul para enviar un “mensaje ilusionante, positivo y con una sonrisa amable”, en tanto que Abascal “militariza” Vox con Buxadé en su “cruzada cultural” purgando a los críticos, los liberales, y se entrega al catolicismo tradicional, trasplantando a Madrid la estructura vertical del partido en Cataluña, mientras el poder económico teme el efecto desestabilizador de Vox, pues Ibex y Fondos de inversión consideran que “gente de nivel no entraría en un hipotético gobierno con Abascal de Vicepresidente” pues “el discurso y las exigencias que exhibe en la resaca del 28-M están despertando intranquilidad”. Mientras tanto, Feijóo se alinea con Vox y acusa al Gobierno de “politizar” la familia y, al efecto, anuncia un plan familiar que contempla un permiso de cuatro meses al padre, “bolsa de horas” y mejor IRPF apoyando así a la familia para que tener un hijo “no sea un lujo”, mientras, por otro lado, el PP sale del armario pues “es el partido donde hay más gays” y cargos del mismo dan un paso al frente para visibilizar y normalizar la orientación sexual ante la semana del Orgullo, en pleno acoso de la izquierda contra el partido acusándole de homófobo.

            Mientras tanto, a menos de un mes del 23-J, según SigmaDos, la izquierda recupera seis diputados favorecida por las disputas entre PP y Vox, con lo que la derecha perdería la mayoría absoluta y Sumar subiría cinco escaños tras el veto a Irene Montero; pero, según NCReport, el pulso de Vox al PP no impide el vuelco electoral ya que la formación de Abascal no crecería, aunque movilizaría un escaño para el PSOE y otro para Sumar, pero el centro-derecha mantendría una mayoría absoluta holgada de entre 182-186 escaños, ya que los resultados serían: PP 34´3% de votos y entre 144-146 diputados, PSOE 25´9% y 97-99, Vox 13´9% y 38-40, Sumar 13´1% y 31-33, ERC 3´1% y 11-12, Junts 2% y 8, PNV 1´6% y 6, EHBildu 1´3% y 5-6, CUP 0´8% y 2, y Otros se repartirían cinco escaños.

            Así las cosas, la buena noticia es que la economía crece más de lo previsto en el primer trimestre, aunque ha tardado 1.200 días en recuperar el PIB previo a la pandemia (crece un 0´6% en el primer trimestre y un 4´2% en el último año, pese a la caída del consumo); por otro lado el Banco de España y Competencia presionan a la Banca para que remunere los depósitos, pues el Gobernador dice que pagar por el ahorro ayudaría a frenar la inflación y la CNMC sospecha que hay un pacto tácito entre las entidades para no hacerlo. Y además, la campaña de microcréditos del PSOE da más interés que el Banco de España; las familias con hipotecas variables pagan 3.100 euros más al año y la subida de tipos cuesta 19.000 millones a los hogares endeudados, mientras sólo 12.000 hipotecados se apuntan al plan de rescate que pactó el Gobierno con la Banca. Entretanto España se quita las mascarillas tres años después de la covid ya que esta semana seguramente dejará de ser obligatoria en centros sanitarios, farmacias y residencias, tal como han acordado las CCAA y el Gobierno.

            En cuanto se refiere a otros asuntos citar que Montero, la ministra de Hacienda, quiere hacer funcionarios sin examen a 658 interinos; que la urgencia electoral retrasa el nombramiento de la Ejecutiva de Sumar; que De los Cobos pide a Marlaska que cumpla la sentencia del TS y lo restituya “sin dilación”; que hay más de 1.000 acusados de pederastia en la Iglesia Española; que un mosso d´esquadra pasó datos a Tsunami Democratic sobre la seguridad de Felipe VI y Letizia en una visita de los Reyes por los Príncesa de Girona; que Sánchez utiliza Cultura para pagar apoyos en el Congreso, pues Iceta asumió el 32% de las enmiendas totales a los PGE que el Gobierno pactó con sus socios de investidura; que el Tribunal de Estrasburgo increpa a España por el retraso en renovar el CGPJ y denuncia que el retraso vulnera los derechos de seis jueces aspirantes; que Alcaraz gana el torneo londinense de Queen´s, su primero en hierba, y es “número uno” de nuevo en el tenis; que Hacienda sospecha que la trama de Tito Berni ocultó mordidas en bitcoins y pide a la jueza que investigue si se usaban criptomonedas con el fin de esconder movimientos de dinero para pagar tráfico de influencias; y que se dispara la nacionalidad para residentes extranjeros con Marruecos en cabeza, mientras se desata la alerta en Melilla, pues más de 3.000 inmigrantes están listos para saltar la valla y los guardias civiles temen que se produzca un nuevo asalto masivo violento como el de hace un año y denuncian la falta de medios para hacerles frente mientras Marruecos refuerza la seguridad en la frontera.

Fdo. Jorge Cremades Sena

jueves, 22 de junio de 2023

LA MEJOR ESPAÑA

                        Pedro Sánchez, necesitado de cazar votos como sea y temiendo que si sale a la calle puede ser cuestionado por los ciudadanos, se inventa una nueva estrategia de campaña electoral para afrontar el 23-J sin tener que dar la cara en la calle o haciéndolo lo menos posible, pero, eso sí, explotando al máximo su presencia en televisión para hacer propaganda electoral desde Moncloa o desde la calle Ferraz, que, obviamente, llega a más gente y evita soportar la crítica directa o la evidencia del rechazo de los votantes. Al efecto, prioriza un modelo insólito de campaña diferente convirtiendo Ferraz, la sede del PSOE, en un plató de televisión, a los cargos del gobierno y del partido en el público en directo y a él mismo en presentador de un programa de auto-entrevistas por el que hará desfilar, de momento, a cinco miembros del Ejecutivo (si funciona el invento, pueden ser más), inaugurando esta inédita estrategia electoral con la entrevista de Sánchez a su ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, a quien, finalizada la entrevista, despide con un “pido un aplauso para el Ministro Escrivá”, petición que es aceptada con total entusiasmo por el auditorio compuesto de miembros de la Ejecutiva del PSOE, ministros de Sánchez y otros cargos o militantes socialistas que convierten la sede del partido en una plataforma de adhesiones incondicionales al jefe incuestionable. Y todo ello con una puesta en escena con fondo rojo en el que puede leerse con letras bien grandes “la mejor España”, sin que el resto de los mortales sepamos, a ciencia cierta, si se refiere a la España que el Ejecutivo Frankenstein nos deja (hace bien pocos días rechazada en las urnas) o a la que Sánchez nos promete de cara a los comicios del 23-J y que promete conseguir si es que gana los comicios y vuelve a reeditar su actual gobierno de coalición, cuestionado por no pocos ciudadanos; mientras tampoco sabemos si su autoadjudicado papel de periodista y entrevistador en esta pintoresca estrategia electoral es un ensayo para, en caso de no poder revalidar su cargo de Presidente del Gobierno, correr el mismo destino (aunque él ya tenga todo su futuro garantizado) en el mundo del periodismo que Pablo Iglesias con quien, según él, no podía dormir tranquilo si lo tenía en el Gobierno para después hacerlo Vicepresidente del mismo. De momento, tras la entrevista del periodista Sánchez al ministro Escrivá, sabemos que para después del 23-J el Presidente garantiza un permiso parental de 20 semanas si es reelegido, pero el problema de esta promesa o de otras es que, al margen de las buenas o malas intenciones que él tenga, ya carece de credibilidad para la ciudadanía aunque él ahora busque restaurarla, renegando de pronto de Bildu, con quien dijo que jamás pactaría (y ahora dice que la prueba de que no pactó es que no ha tenido ningún ministro abertzale) y manteniendo distancias con su ministra Irene Montero a la que apoyó fervientemente en el “sí es sí” hasta que dicho apoyo se hizo insostenible (y ahora la cuestiona diciendo que muchos hombres se sentían “incómodos” frente a “ciertos discursos feministas” que tenían ”más de confrontación que de integración”), todo ello sin entrar en las relaciones y manejos de Sánchez con los secesionistas de ERC, ni en el resto de sonadas rectificaciones, promesas incumplidas o flagrantes mentiras, que ahora niega en televisión diciendo que no mintió sino que cambió de opinión…. pero cambió de opinión y rectificó tantas veces que, si le exoneramos de llamarle mentiroso, cabría aplicarle el refrán de que “rectificar es de sabios, pero es de necios tener que hacerlo a diario”. La cruda realidad, sólo en el tema del machismo, por el proceder de Sánchez es que, entre otras cosas, el PSOE, con Podemos en Igualdad, pierde unos 837.000 votos masculinos (aunque algunos lo llamen votos machistas) generando la lógica “inquietud” en el partido ante el lastre electoral del 28-M, que achaca a la confrontación de Montero ya que “no se puede ir contra la mitad de la población y estar señalándoles todo el rato, al final se te van”. Pues eso….al final se te van, especialmente cuando las soluciones del Ejecutivo, por ineptitud o empecinamiento, rebajan las penas a los maltratadores y adelantan las excarcelaciones a quienes la anterior legislación (tachada de machista y otras cosas por el estilo) mantenía penas mayores por sus execrables delitos y que, finalmente, tuvo que ser rectificada por Sánchez con el apoyo del PP dado que sus aliados y ministros podemitas se oponían y lo votaron en contra en el Congreso sin que el Presidente dijera lo más mínimo al respecto y, mucho menos, les recriminara o los cesara por su patética deslealtad.

            Y es precisamente la “violencia machista” el detonante para que se arme la marimorena en las negociaciones de gobernabilidad entre PP y Vox en las distintas CCAA, pues, tras conseguir el PP en la Comunidad Valenciana que Vox apartara a su candidato y, gracias a ello, se pudiera formar un gobierno de coalición sin miembros ex condenados por maltrato, en Extremadura la candidata del PP, María Guardiola, se planta ante Vox y se muestra dispuesta a ir a una repetición de elecciones antes de llegar a un acuerdo de coalición con Vox, lo que Feijóo avala con el argumento de que el apoyo a Vox en Extremadura es mucho menor que el que tiene en Valencia, lo que justificaría ciertos acuerdos para gobernar, como ha pasado en Baleares, pero no conceder la exigencia de Vox de gobernar en coalición. Guardiola argumenta, reiterando su promesa en campaña, “no gobernaré con quienes niegan la violencia machista” y Génova la apoya, mientras el todavía presidente extremeño, el socialista Vara, que se había retirado tras el desastre electoral del PSOE el 28-M, aunque él había ganado las elecciones extremeñas y empatado a escaños con el PP, se desdice de lo dicho y vuelve ahora anunciando que, ante el fracaso de las negociaciones PP-Vox para gobernar, se presentará a la investidura, tras haber logrado que el PSOE presida la Asamblea de Extremadura, mientras Guardiola insiste en que “en el PP caben todas las posibilidades, pero no Vox, están en otro sitio” y, sobre la actual situación, añade que “Feijóo sabía que era una posibilidad, le he ido informando de todo”. En definitiva, el PP arriesga Extremadura (que decidan de nuevo los ciudadanos, al igual que en 2019 se hizo con las generales con Sánchez) para “reforzar el centrismo” y la guerra con Vox aboca a nuevos comicios bajo control del PSOE en la Asamblea extremeña, mientras Génova lo apoya y acusa a Vox de “entorpecer” la negociación complicando “el cambio”, y mientras el PSOE, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, consigue no sólo la presidencia de la Asamblea sino también mayoría en la misma y Guardiola manifiesta “no pactaremos a cualquier precio” en clara alusión a lo que Sánchez hizo en su momento para formar su actual Gobierno Frankenstein.

            Entretanto Feijóo promete que, si llega a gobernar, revisará “una a una” las leyes que Sánchez aprobó con Bildu y anuncia un decálogo de medidas, entre otras, bajada del IRPF, recuperar los delitos de sedición, aumentar las penas por corrupción, una nueva ley orgánica del CGPJ, y la lucha contra la violencia machista para que sea transversal, prioritaria y alejada del uso partidista, mientras en Baleares el PP pone fin al acoso lingüístico y ya “podrán elegir idioma libremente” y, mientras tanto, Ayuso toma posesión como Presidenta de Madrid, augura el final de Sánchez y sus políticas “totalitarias”, perfilando una enmienda al Gobierno sanchista por sumir al país “en la involución democrática”. Por su parte Yolanda Díaz culmina la purga de Podemos, el partido que la catapultó, borrando de Sumar también a la guardia pretoriana de Iglesias en el Congreso, fichando perfiles críticos con la dirección podemita, salvando sólo en las listas a un tercio de diputados de UPodemos y, en definitiva, arrincona al “pablismo”, deja fuera de las listas a quienes fueron sus principales apoyos durante su proceso de construir Sumar, aunque “roba” al “gurú” económico de Podemos como portavoz de campaña, mientras se fotografía con los candidatos números uno y dos de sus listas de Sumar en cada circunscripción, con lo que deja excluidos del acto de presentación de listas y de la foto a no pocos candidatos de Podemos, como Belarra, y a algunos de Más País, como Errejón. Entretanto Bildu se jacta de su poder pues Otegi controla ya más del 14% de los ayuntamientos navarros y el 42% de los vascos, es decir, 21 consistorios más que hace cuatro años, confirmando que su estrategia de apoyar al Gobierno de Sánchez ha sido para los abertzales bastante positiva, no pudiendo decir lo mismo los socialistas.

            Y en esta “la mejor España” de que Sánchez hace gala en sus entrevistas a los ministros, el Banco de España prevé más crecimiento y menos inflación, pues el PIB subirá un 2´3% con el IPC en el 3´2%, aunque nuestro país es el primero en recibir fondos de la UE pero el duodécimo en ejecutarlos, mientras Italia dobla la tasa de absorción española en los dos primeros años y Francia es la más ágil, cuando el Banco de España avisa también de otro despegue de precios y ve “señales de desaceleración”,  duda de las optimistas previsiones del Gobierno para bajar el déficit y la deuda, como nunca desorbitados. Y es que España va sólo séptima de la UE en atraer fábricas de baterías pese a los fondos europeos, mientras la deuda de las Administraciones se dispara otros 81.000 millones en un año, el endeudamiento público crece un 5´6% en doce meses y sigue por encima de los 1´5 billones de euros que dejaremos como herencia negativa a nuestros jóvenes. No obstante el llamamiento masivo a fijos discontinuos (eufemismo de trabajadores temporales) para el verano rompe el techo del millón, pues las empresas aceleran las incorporaciones por miedo a que les falte personal estos meses de verano, los mejores para crear empleo aunque sea de forma temporal, pues, aunque la mona se vista de seda, mona se queda y con eufemismos no se resuelven los problemas.

            Por lo que respecta a otros asuntos cabe citar que una sentencia de la Audiencia Nacional revela que Rabat espió en España al Polisario; que el Barça no da opciones al Real Madrid en su tercer partido y se alza con la Liga de Baloncesto; que Hacienda impulsa el ascenso de interinos a dedo antes del 23-J; que los Reyes de Jordania visitan España y exhiben su buena sintonía con los Reyes de España; que el 40% del territorio español está en alerta o emergencia por la sequía, cuando las reservas de agua están al 47% de su capacidad; que el TC admite a trámite el recurso de Vox contra la reforma del aborto impulsada por Montero y se pronunciará también sobre la eliminación del permiso paterno en las menores de 16 y 17 años; que Felipe González arropa a Alfonso Guerra en la reivindicación de otro PSOE, acudiendo ambos a la presentación del libro del ex ministro socialista Virgilio Zapatero, rodeado de antiguos miembros de su Ejecutivo y con su ex vicepresidente marcando distancias con la política de alianzas de Sánchez; y que la juez rastrea las cuentas del local de las fiestas de Tito Berni y pide tras años de movimientos bancarios a la sala donde la trama del exdiputado socialista se dejó, sólo en una noche, 11.000 euros y “estos pagos no son un caso aislado”, en tanto que la fiscalía ve prevaricación de altos cargos del gobierno canario en el “Caso Mediador” pues el comportamiento de los dos altos cargos apunta a “una intervención que reviste indicios delictivos”.

Fdo. Jorge Cremades Sena

lunes, 19 de junio de 2023

MEJOR CALLADITOS

 

                        En plena elección de alcaldes para formar gobiernos locales conforme a lo que han votado los ciudadanos el 28-M, mientras los partidos miran a las generales que celebrarán, por decisión de Sánchez, el 23-J, bien podrían algunos políticos entender que es mucho mejor para la higiene democrática y para sus propios partidos estar calladitos que decir tonterías o barbaridades, especialmente cuando con ellas se entorpece la estrategia de su partido lo que incrementa la dosis de estupidez de semejantes oradores, siendo mejor que se dedicaran a otra cosa. Es lo que acaba de hacer el Delegado del Gobierno de Sánchez en Madrid aplaudiendo públicamente a Bildu porque “ha contribuido a salvar miles de vidas” y elogiando a los “supuestos enemigos de España” frente a los “patrioteros de la pulserita”, justo cuando la Delegación en el País Vasco se disponía a contratar a una ex portavoz de Gestoras Pro Amnistía para dar cursos a policías y justo después de haber recibido el Gobierno de España y el PSOE el más brutal batacazo en las elecciones locales y territoriales, al extremo de que ha arrebatado al PSOE casi todo su poder territorial, entre otras cosas, por amaños indeseables de Sánchez con radicales y secesionistas, como Bildu o ERC, para sostener su “Gobierno Frankenstein” y que tendrá que comparecer en las urnas de nuevo dentro de un mes. En efecto, Francisco Martín, que así se llama tan insigne Delegado y hombre de confianza de Sánchez, que lo nombra para dicho cargo, con su declaración, añadiendo que la formación abertzale y ERC han hecho más por los españoles que “todos los patrioteros de pulsera” (obviamente en clara referencia, entre otros, al PP que ha gobernado muchos años en nuestro país y puede estar en situación de volver a gobernar), acaba de romper la campaña electoral de cara al 23-J y la estrategia del propio PSOE, que, con toda razón, también se ve obligado a criticar la intervención del prohombre sanchista ya que “no tiene sentido azuzar un tema que nos destrozó” mientras Feijóo, desde el PP, pide su dimisión porque “probablemente, es lo más grave que hemos escuchado en los últimos años”, cuando la Audiencia rastrea a los 21 condenados de Bildu por si debe embargarlos…..¿se refiere el Delegado a éstos abertzales, muchos de ellos con delitos de sangre a sus espaldas, cuando dice que han hecho mucho más por España que todos los ministros, consejeros y concejales de la derecha que ha habido en España durante este periodo democrático y a los que llama “patrioteros de la pulserita”?..... Pero, lo grave es que ni el Delegado Martín dimite (sólo se limita a pedir disculpas ante el escándalo), ni Sánchez lo cesa (como ha venido haciendo ante las barbaridades de algunos de sus ministros durante la Legislatura)…. es obvio que, con semejantes amigos, Sánchez no necesita enemigos. El Presidente se limita a agarrarse a Vox (necesario al PP para formar gobiernos locales y territoriales) para intentar paliar la fuga de votos socialistas a Feijóo; a meter el miedo en el cuerpo contra el giro hacia la derecha y la extrema derecha, para él no distinguibles; y a alertar a la UE de la posible llegada de Vox al Ejecutivo español, sin reparar que, en todo caso, él mismo ha contribuido a ello al coaligare y apoyarse en todo tipo de radicalismos de izquierdas, que, ya ven, han contaminado hasta extremos insoportables a un PSOE tradicional y moderado que jamás se ha visto en situación de desprestigio y descrédito tan grave y preocupante como ahora, y que, además, con personajes, entre otros, como el citado Delegado del Gobierno ni siquiera puede sacar provecho de las meteduras de pata y barbaridades que protagonizan algunos dirigentes de Vox como es, entre otros, el caso del “número dos” en Valencia, quien, tras convertirse en Vicepresidente de la Generalitat al conseguir el PP relegar al “número uno” por cuestiones de maltrato, dice que “la violencia de género no existe”, obligando a Feijóo a intervenir para censurarle por negar su existencia, mientras Otegi, aliado de Sánchez, sale en defensa de Martín por alabar a los proetarras diciendo que salvan “miles de vidas”, argumentando que de lo que Martín ha dicho hay “algunas cosas ciertas”.

            Y tras este mensaje del Delegado del Gobierno en Madrid (inadecuado y perjudicial para el PSOE y para el Gobierno que lo nombra) y el choque PP-Vox por la violencia de género un día después de su pacto de Gobierno en Valencia (perjudicial para el PP y que el PSOE intentará explotar hasta la saciedad), se trata ahora de ver quien tiene más capacidad de descalificar al otro, con dichos y hechos, de cara al 23-J y quien tiene menos jeta para incoherencias que puedan volverse contra ellos mismos. Sánchez, que sigue calladito frente a las palabras de su Delegado de Gobierno en Madrid, dice que “mucho más peligroso que Vox es que el PP asuma sus políticas”, cuando él ha asumido casi todas las indecentes políticas que le han impuesto sus socios y aliados, y añade que “derogar lo que funciona gripa la economía; cualquier error tendrá un coste alto”, que “con Sumar la coalición sería más fácil; con Díaz trabajamos de manera leal” y que “el PSOE tiene la responsabilidad de que España siga avanzando”…..Por su parte Feijóo, eufórico por el resultado de los pactos de gobiernos locales y autonómicos, que multiplica por tres el poder del PP y divide a la mitad el que tenía el PSOE, manifiesta que “no habrá más pactos como el de Valencia” y toma el control de las negociaciones tras el malestar causado por cuestionar su socio valenciano la existencia de la violencia machista y añade que “el 28-M fue la cura de humildad de Sánchez, el 23-J será un baño de realidad”, que “si los españoles quieren que vuelva a gobernar Frankenstein, Sánchez ya no les habrá engañado”, y que “el sentido de Estado del PP en Barcelona o Vitoria no lo ha demostrado el sanchismo”….. y lo dice justo después de que el PP haya cedido sus votos al socialista Collboni para evitar un alcalde independentista en la Ciudad Condal y además haber logrado apartar a Colau (la nefasta alcaldesa saliente de Barcelona) de un gobierno con los Comunes y pasarla a la oposición…. y lo dice también después de que en Vitoria el PSOE haya logrado la alcaldía gracias al veto de PP y PNV a Bildu, a pesar de que los de Otegi hayan logrado por vez primera un puesto en la Mesa del Parlamento de Navarra gracias a la abstención del PSOE.      

            Entretanto, habrá alcaldes del PP en Ceuta y Melilla, y en 30 de las 50 capitales de provincia (entre ellas Burgos, Valladolid, Toledo, Sevilla, Valencia etc etc) y grandes ciudades, aunque el PP haya regalado seis alcaldías a PNV y PSOE para apartar a Bildu, mientras el PSOE cede 52 alcaldías en las que fueron primera fuerza y el PP intenta evitar allá donde puede pactar con Vox y sólo formará gobiernos de coalición en el 15% de capitales, pues en otras, como en Valencia, la popular Catalá consigue la alcaldía sin el apoyo de Vox, mientras el separatismo se hunde en las grandes ciudades catalanas al perder Lleida, Tarragona, Reus o Badalona. Así las cosas, Feijóo se jacta de vetar en Barcelona y Vitoria el secesionismo y reivindica el “sentido de Estado” del PP en el País Vasco y en Barcelona, mientras Sánchez, atrapado en sus contradicciones, despliega una ofensiva mediática para movilizar el voto y apela a la emoción para animar al PSOE, que él mismo ha hundido, argumentando que “el viaje debe continuar”, cuando el problema es que dicho “viaje” no se sabe bien dónde nos lleva y, especialmente, donde lleva a los socialistas. De momento, salvo Tezanos, que tiene claro que nos lleva a una victoria del PSOE el 23-J, todos los demás dicen lo contrario: según 40dB, el bloque PP-Vox se acercaría a la mayoría absoluta, el PSOE perdería 14 escaños y Sumar, lastrado por las luchas internas, sólo lograría 35 diputados, pues el PP alcanzaría entre 128-142 escaños, PSOE 99-109, Vox 37-41, Sumar 34-36, y Otros 34-40; según SigmaDos, el PP obtendría el 34´1% de votos y 141 escaños, PSOE el 28´7% y 105, Vox 13´2% y 36, y Sumar 12´8% y 30; y, según NCReport, el PP conseguiría el 34´7% de votos y entre 145-147 diputados, PSOE 25´5% y 96-98, Vox 14´1% y 38-40, y Sumar 12´9% y 30-32….. Todo ello cuando Sánchez tiene poco más de un mes para recorrer ese “viaje” que, según él, “debe continuar” y no cabe duda de que, con la ayuda del CIS de Tezanos como guía y profeta, conseguirá llevarnos al paraíso, ese cielo que Iglesias pretendía conseguir por asalto y que al final ha llevado a UPodemos a la irrelevancia política más absoluta.

            En efecto, Yolanda Díaz se sale con la suya pues Podemos, el instrumento inventado por Iglesias para llegar al paraíso, asume un “modesto” rol en su invento electoral, Sumar, heredero de UPodemos, y, por supuesto, el veto a Irene Montero, que, por cierto, no hará campaña el 23-J en favor de Yolanda, su subalterna en UPodemos y ahora su jefa en Sumar, mientras Belarra, la otra jefa podemita, que sí va en las listas, califica de error el rechazo a su compañera del alma ya que, según ella, da alas a la derecha, aunque la deja caer en desgracia. Y, nombrados los alcaldes y a la espera de que designen los miembros de sus respectivos gobiernos, Martínez-Almeida, alcalde de Madrid por mayoría absoluta, manifiesta que “la izquierda se equivoca con el discurso que hace en torno a Vox”, que “las decisiones que se tomen tras las generales ni me tienen que afectar” y que “la derogación del sanchismo es la garantía de convivencia, nunca estuvo tan en riesgo” (es la tranquilidad de gobernar con sólidas mayorías). Y su compañero de partido, Daniel Sirera, presidente del Grupo Popular Municipal en Barcelona, tras decidir que el alcalde de la ciudad sea del PSOE (segunda fuerza política) y no de los de Puigdemont (primera fuerza) dice que “el PSC encontrará al PP si crea una mayoría constitucionalista” pues “he impedido que una coalición separatista de Puigdemont y Aragonés se haga con Barcelona”, aunque “si fuera por Vox el ayuntamiento barcelonés estaría hoy en manos de Junts y Junqueras” y añade “le dije a Collboni que Colau debería apartarse si quería ser alcalde, pero no tengo ninguna garantía”…..ya ven, ahora toca mover ficha al alcalde socialista barcelonés para buscar sus alianzas, mientras en no pocos ayuntamientos y diputaciones el PSC lo ha hecho con ERC.

            Por lo que respecta a otros asuntos cabe citar que Escrivá carga contra la Airef por las cifras sobre el Ingreso Mínimo Vital, para el ministro hay 550.000 hogares beneficiados, para la Autoridad Fiscal sólo 280.000; que Margarita Robles planta a la OTAN por excluir empresas españolas y bloquea su plan industrial; que el BCE sube los tipos de interés al 4% con lo que se encarecen más las hipotecas; que el 45% de los alquilados está en riesgo de pobreza, siendo España el país de la UE con más arrendados que bordean la exclusión social por los altos precios de los alquileres y sus bajos ingresos; que la Selección Española de Futbol gana la Liga de las Naciones tras vencer a Croacia en los penaltis; que la deuda española supera el objetivo de Moncloa para todo el año al escalar a otro record de 1´53 billones de euros, el 113% del PIB; y que Sánchez bate records de opacidad con 191 resoluciones incumplidas, pues el anterior Gobierno de Rajoy dejó sin contestar dos reclamaciones del Consejo de Transparencia entre 2015 y 2017, casi cien veces menos de las del Ejecutivo de coalición liderado por Sánchez, mientras Ferraz publicita un acuerdo con un organismo internacional que no renueva desde hace seis años y cuyos controles previstos tampoco cumplía cuando estaba vigente.

Fdo. Jorge Cremades Sena

jueves, 15 de junio de 2023

TOTUM REVOLUTUM POLÍTICO

 

                      Era de esperar; hacer coincidir la formación de gobiernos autonómicos y locales con la campaña de elecciones generales suponía generar un “totum revolutum” político de primera magnitud, aunque no sabemos si éste era uno de los objetivos de Sánchez al adelantar por sorpresa los comicios al 23-J o se trata de una simple casualidad. En todo caso, lo cierto es que la confluencia de ambas tareas desata más aún, si cabe, las contradicciones, las demagogias, el cinismo, las amnesias intencionadas y las incoherencias intolerables a las que nos tienen acostumbrados nuestros políticos al aplicar esa especie de ley del embudo por la que, según convenga a cada uno en cada momento, lo ancho es para mí y lo estrecho para ti. Así las cosas, mientras se están elaborando las candidaturas electorales para el 23-J, comienza este “totum revolutum político” con el pistoletazo de salida del primer gran pacto entre PP y Vox para gobernar la Comunidad Valenciana y los grandes municipios valencianos, desencadenando con ello, como era de esperar, todo tipo de acusaciones contradictorias por parte de la izquierda cuando la izquierda con Sánchez ha hecho exactamente lo mismo para gobernar España y muchas autonomías y municipios, hasta que los ciudadanos españoles han decidido en las urnas mandarla a la oposición en los gobiernos locales y territoriales y se está a la espera de lo que decidan dentro de un mes en las generales, pues en caso de batacazo, y con casi todo el poder territorial perdido, sería realmente una hecatombe política de primera magnitud y consecuencias impredecibles especialmente para el PSOE, el impulsor de gobiernos de coalición radicales y minoritarios, apuntalados mediante pactos con radicalismos extremos de izquierda, secesionismos totalitarios y violentos anti-sistema, para oponerse ahora cínicamente a que la derecha haga lo propio o algo parecido al pactar, si quiere gobernar, con radicalismos de derechas, que demagógicamente denigra con el mantra de que la derecha es toda igual al calificarla de derecha extrema o extrema derecha, lo que supondría, si aplicamos su criterio con objetividad, que el otro bando, el suyo, estaría formado por la izquierda extrema o la extrema izquierda, tan pernicioso, como mínimo, para nuestra democracia como lo anterior. Esta es la cruda y triste realidad cuando lo deseable, si queremos erradicar de verdad los radicalismos para prestigiar la gobernabilidad democrática, sería establecer fórmulas en favor de que gobiernen los partidos moderados, de derecha o izquierda, que representan a la inmensa mayoría de españoles sin tener que recurrir a quienes juegan contra el sistema constitucional; y ello requiere, bien acuerdos mutuos entre ellos para favorecer que gobierne la lista más votada o, al menos, no impedir que lo haga, para evitar que al final, se impongan, como ahora sucede, los chantajes de partidos radicales minoritarios para poder gobernar sin tener que estar permanentemente yendo a las urnas hasta que algún partido consiga una mayoría absoluta. Lo impresentable, por ejemplo, es que, quienes defendían hace cuatro días que en las listas de Bildu iban candidatos condenados por terrorismo (y lo justificaban con que Bildu es un partido legal y sus candidatos ya habían cumplido sus condenas), pongan ahora el grito en el cielo porque en la lista de Vox va un candidato que fue condenado por maltrato a su mujer (y ni siquiera se justifique con que ya haya cumplido su condena ni con que Vox es también otro partido legal); lo inaceptable es que quien prometía que no pactaría con Podemos ni con Bildu, ERC y compañía, para después pactar con ellos, ponga ahora el grito en el cielo porque otros hayan prometido, aunque no de forma tajante como él, no gobernar con Vox y ahora pacten, aunque lo hagan poniendo al partido minoritario determinadas condiciones o “líneas rojas” que jamás se pusieron a Podemos, ERC, Bildu y compañía; y lo intolerable es que, quienes ponen cínicamente semejante grito en el cielo sigan entretanto, sin rubor alguno, pactando de nuevo con Bildu en Navarra o con ERC en Cataluña. ¿Es coherente esta forma de proceder? Creo que no, pues aplicar la ley del embudo y semejante cinismo sólo provoca la erosión en la credibilidad de nuestros políticos….y a las pruebas me remito.

            En efecto, con este “totum revolutum”, casual o intencionado, el PP, según los resultados electorales, necesita a Vox para gobernar en varias CCAA, en siete grandes ciudades y en 128 municipios, mientras Vox amenaza con repetir elecciones autonómicas (en los municipios no, ya que vale en segunda vuelta designar alcalde al candidato de la lista más votada) si el PP veta a sus candidatos, y, curiosamente Génova, que no descarta tajantemente coaliciones con Vox aunque prefiere gobernar en solitario, le pide que aparte a su líder en Valencia condenado en su día por maltrato ya que “es una línea roja” para pactar, lo que supone uno de los principales escollos para arrebatar nada menos que la Comunidad Valenciana al PSOE, cuando es la joya de la Corona de los socialistas tras haber perdido antes Andalucía….y las líneas rojas impuestas por el PP para pactar con Vox son la violencia de género, la igualdad, el estado autonómico y la inmigración europea, argumentando que “si seguimos con Abascal el modelo de Sánchez con Iglesias acabaremos igual que ellos”, pues Sánchez no exigió línea roja alguna para pactar. Sin duda, ante semejantes “líneas rojas”, que jamás se le impusieron a UPodemos, había un plus de dificultad para pactar un gobierno PP-Vox en la Comunidad Valenciana, lo que podría entorpecer acuerdos en otros territorios, pero el popular Mazón consigue salvar la situación pactando que el líder de Vox, condenado por maltrato y vetado por el PP, no entre en el Gobierno Valenciano y Vox, finalmente, acepta el veto aunque le da la salida de irse al Congreso de los Diputados encabezando la lista por Valencia, y, así las cosas, salvadas las “líneas rojas” impuestas por el PP, Vox presidirá las Cortes Valencianas y entrará en la Generalitat con tres consejerías, una de ellas con rango de Vicepresidencia. Mazón despeja pues el camino a Feijóo con este acuerdo de Gobierno en la Comunidad Valenciana y logra que el candidato condenado no sea consejero de su gobierno, mientras el PSOE, como se esperaba, acusa a Génova de “blanquear la violencia de género” y califica el acuerdo de “vergüenza” e “insulto a las víctimas” y, según algunos, Mazón dinamita la estrategia nacional del PP con Vox con este pacto “exprés”, pistoletazo de salida para la formación de gobiernos en otros territorios. Ya ven, el “totum revolutum” está servido.

            No obstante, mientras Abascal, crecido tras el pacto en Valencia, deja claro en Murcia que ningún apoyo al PP será gratis, Feijóo evita extender el modelo de Valencia a otros territorios, según él, porque las circunstancias en cada uno de ellos son distintas y, por tanto, distintas han de ser las soluciones con los resultados electorales de cada territorio en las manos. En efecto, López Miras, que está sólo a dos votos para la investidura, se niega de momento a un gobierno de coalición con Vox y rechaza la cuota de poder que éste le reclama, mientras Feijóo justifica el pacto valenciano porque allí “a Vox lo ha votado mucha gente” y Abascal, al igual que en Valencia, reclama el Parlamento de Murcia, lo que desata un debate en la cúpula popular sobre los pactos con Vox; en definitiva, Murcia planta al partido de Abascal en sintonía con Génova y rompe la idea de un acuerdo global, mientras socialistas y populares comparten la impresión de que la alerta antifascista ya no le funciona a la izquierda, aunque en Extremadura, la popular Guardiola también diga que no va a ceder ante los de Santiago Abascal, y por más que, al margen de la impresión que cada uno tenga, el mantra del antifascismo y del anti-populismo se siga utilizando en la campaña y Sánchez alerte de que peligran los fondos europeos si gana el PP el 23-J, mientras Abascal aprieta para tener también su cuota de poder en Aragón…. ¿votarán sus candidatos para arrebatar el poder al PP y que gobierne el PSOE?, ¿se abstendrán?.....de momento, misterios sin resolver. Entretanto, Bildu acepta que la socialista Chivite presida Navarra pero le exige al PSOE la alcaldía de Pamplona; García-Page ofrece al PP sin éxito que en los municipios de Castilla-La Mancha gobierne la lista más votada, pero el PP lo rechaza dado que es lo que Feijóo ofreció a Sánchez en campaña para todos los territorios y Sánchez lo rechazó; y Junts y ERC reeditan en Barcelona el frente independentista del 1-O, pues Junqueras da la espalda al PSC y bendice que sea alcalde Trías, quien en su anterior mandato diseñó una Barcelona “capital de un nuevo Estado”, aunque el socialista Collboni intenta “in extremis” evitar que sea alcalde ahora y el partido descarta que continúe Colau, tercera fuerza en votos en las elecciones locales, mientras el PSC y ERC pactan las diputaciones de Tarragona y Lérida, y mientras el secesionista Aragonés pone el Govern a punto con separatistas duros ante una posible victoria de Feijóo el 23-J, respondiendo así al sector más duro de ERC que le pide “poner palos en las ruedas al Estado” con dos nuevas consejeras vinculadas al “procés” y en previsión de que pueda acabarse el chollo de un Gobierno español sometido al chantaje de los radicales secesionistas con tal de mantenerse en el poder.

            Y mientras se conforman los gobiernos territoriales y locales, los diferentes partidos van elaborando sus listas para las generales. En el PP, Feijóo sitúa a sus fieles en los primeros puestos y renueva el 75% de cabezas de lista con un 44% de mujeres, con gallegos fieles y guiños a Ayuso y a Ciudadanos, promocionando a dos de sus ex líderes con Marta Rivera de la Cruz como número dos por Madrid. En Sumar, Yolanda Díaz, sin Irene Montero ni Echenique, pero sí con Ione Belarra, coloca como su número dos a Agustín Santos, embajador de España en la ONU, que es cuestionado por el entorno de Podemos ya que, cuando fue jefe de Gabinete de Moratinos en época de Zapatero, se empezó a hablar de Marruecos como “potencia administradora” del Sahara, y ante la paradoja de que Yolanda coloca de número tres a la activista saharaui Tesh Sidi (ya ven, en el populismo de Sumar, como antes en el de UPodemos, cabe todo), es decir, la activista pro saharaui, por un lado, y, por otro, el embajador trotskista defensor del “procés” en sus polémicos artículos y de la posición española sobre Gibraltar de la época de Franco, pues es notorio su apoyo a acabar con el Reino de España y al 1-O calificando a los golpistas de “presos políticos”, a Puigdemont de “presidente en el exilio” y a Cataluña de “nación intervenida”…este personaje es el fichaje estrella de Yolanda. Y en el PSOE, Pedro Sánchez, mientras Calviño no se presenta en las listas, aunque dice “mi compromiso está más allá de las listas”, y en plena desbandada de cargos a causa del descalabro en los comicios del 28-M, se ve obligado a que la dirección socialista intervenga en las listas de las federaciones, provocando el consecuente descontento en los diversos territorios al denotar la necesidad de Sánchez de buscar sitio a sus afines en el Congreso ante una previsible eventual etapa en la oposición…..y mientras Calviño, que no es candidata, reclama un debate con el responsable de Economía del PP y Podemos presiona “in extremis” a Sumar con un Consejo Ciudadanos, quien, por adelantado, ya no necesita ser colocada es la fiscal y ex ministra Dolores Delgado, que es nombrada como Fiscal de Memoria contra viento y marea pese a las alertas de nulidad del nombramiento.

            En cuanto a otros asunto se refiere, citar que Garamendi cambia las reglas de la CEOE para poder ser reelegido pidiendo el fin del límite de mandatos y más avales a los candidatos; que la UE acuerda la Ley Rider con la abstención de España; que Escrivá rebaja los requisitos de formación para regularizar a inmigrantes; que el Banco de España prevé que en 2024 no habrá stock de viviendas para nuevas familias; que Unicef acusa a España de desproteger a la infancia, pues uno de cada tres niños está en riesgo de exclusión social; que las víctimas de violencia machista se disparan un 11% en tres meses; que Sánchez boicotea la reunión de la OTAN con los proveedores de Defensa porque no hay empresas españolas y la Ministra Robles no asistirá a la misma; y que José Cobo Cano es elegido arzobispo al “auxilio” de Madrid bajo la supervisión directa del Papa con el encargo de renovar la Iglesia Española.

Fdo. Jorge Cremades Sena

lunes, 12 de junio de 2023

UN ACUERDO DE INTERESES

 

                        Por fin, tras un largo periodo de descalificaciones internas, vetos y coacciones, Sumar y Podemos consiguen “in extremis”, tal como se esperaba, un acuerdo para concurrir juntos en las elecciones del 23-J, con lo que la comunista Yolanda Díaz, consigue unir en su plataforma o proyecto personal al que llama Sumar (el nuevo invento para intentar camuflar el fracaso del anterior experimento, conocido como Unidas Podemos) nada menos que a unos quince partidos, partidúsculos o asociaciones de amiguetes con el único objetivo de cada uno de sus líderes de figurar en Sumar, si es posible, en un puesto de probable salida como diputado o senador, lo que, dado que al final casi son más coroneles que tropa, explica las tensiones protagonizadas hasta el momento de conseguir el acuerdo sin que, obviamente, haya trascendido la más mínima diferencia ideológica entre los aspirantes al proyecto de unidad de la izquierda a la izquierda del PSOE sanchista, seguramente porque no la hay ya que lo que sí hay (a la vista está y a las pruebas me remito) es una pelea insensata y fratricida por ocupar personalmente los escaños, que en circunstancias de poco apoyo ciudadano, como es el caso y se acaba de constatar en los resultados del 28-M, se presumen a la baja con lo que no podrían satisfacer las expectativas personales de tanto aspirante a ocuparlos. La opción era evidente, siempre será peor ir separados que juntos, aunque el deterioro supino de dirigentes podemitas, como Irene Montero (desautorizada por el Supremo en el “sí es sí” y condenada a pagar 18.000 euros a un hombre por acusarle sin prueba alguna de maltratador) exigía apartarla de la operación Sumar, a lo que se oponía su compañera y amiga Belarra, quien, visto lo visto, utiliza a Montero como mercadería para conseguir algunas cosas que finalmente se traducen, incluida ella misma, en unos ocho puestos de podemitas en las listas de Yolanda con alguna probabilidad de ser elegidos (elegidas, -es, -is, -us; no vaya a ser que me traten de facha machista y fascista por utilizar el genérico, que todo el mundo entiende), si es que se consigue atajar en la campaña la hemorragia de votos que su enfermizo populismo les está provocando. El asunto es evidente, pues se trata de lo mismo, pero que parezca otra cosa por si cuela. En efecto, Podemos, tras llevar casi al límite la negociación con Sumar como medida de presión, claudica ante Yolanda, tal como se presumía, pues los nuevos partidos de la nueva coalición exigían su cabeza, aunque, como mal menor, aceptaban a Belarra, salvando así a regañadientes los escollos que simplemente eran las listas y la presencia de Montero, que ya es invendible ante la ciudadanía, aunque no sea ella sola la única responsable de lo que ha pasado con aquel movimiento 15-M que, según Iglesias, iba a liberar a los españoles de la “casta” y del “régimen del 78”, cuando, ya ven, ahora se enzarzan en una guerra fraternal entre ellos precisamente para seguir instalados en dicha casta y no ser desalojados de la misma. Al final Sumar sella sin Montero la coalición o el frente populista (ya sólo faltaría que se sumara el socialismo sanchista, para tener el frente popular completo) aglutinando a más de quince partidos que conforman la mayor coalición de izquierdas de toda nuestra democracia, dirigida por la líder comunista Yolanda Díaz y todos sus componentes admiten sin reparo alguno la distribución de puestos dictados por ella. Podemos sacrifica a Montero, su “principal activo”, y acepta a regañadientes diluirse en Sumar a cambio de ocho teóricos puesto de salida en las listas, que llevarán la cara de la Vicepresidenta, mientras la famosa “ley del sólo sí es sí” (apoyada con entusiasmo por todo el Gobierno de coalición) nos deja hasta el momento 1.127 rebajas de penas y 115 excarcelaciones anticipadas de maltratadores, mientras dicho Gobierno se niega por tercera vez a informar al Congreso de los cambios de sexo de la Ley Trans, el otro bodrio legal que seguramente también traerá cola. Yolanda impone a Podemos clausulas para controlar a sus diputados y celebra “el mejor acuerdo”, dando por zanjada la crisis por la exclusión de Montero ya que, según ella, “España quería que nos diésemos la mano” y comparece sin entrar a debatir el veto o no a Montero, o las “coacciones” denunciadas por carta a sus militantes por Ione Belarra, la secretaria general del partido.

            Por su parte Sánchez advierte en el Comité Federal que “las cosas se dicen aquí”, en clara referencia a los barones críticos, especialmente a Lambán y Page, con los que la confección de listas ha dinamitado su relación, ya bastante deteriorada, los barones trasladan el mensaje de “dejad solo a Pedro” mientras la bronca por las listas y las imposiciones del Presidente esconde el pulso por controlar su sucesión tras el posible final del sanchismo, en caso de que el PSOE sufra otro descalabro electoral, con lo que Sánchez en realidad está en una situación de precariedad en cuanto a poyos internos se refiere. Y es que, aunque sea solapada, la guerra por la sucesión de Sánchez tras el 23-J entra en acción mientras los barones críticos esperan a los resultados, pero ya se mueven ante el posible escenario de la nueva etapa que se abre, en medio de la dimisión de la Presidenta del PSOE de Sevilla, la histórica socialista Amparo Rubiales, por llamar “judío nazi” a Bendodo, coordinador del PP, aunque, tras pedir disculpas ante las críticas generalizadas por decir semejante barbaridad, rectifica antes de irse y dice que retira lo de “judío” y que sólo le llama “nazi”…..¡es que ya estamos todos locos o es que nos hemos contagiado del populismo agresivo podemita! Bendodo simplemente contesta que, con semejantes apelativos, Rubiales sencillamente se califica a sí misma y Sánchez reivindica sin matices la gestión de su Gobierno ante el Comité Federal e insta al PSOE a no rendirse, pues “la victoria es posible”.

            Y entretanto Feijóo acusa al presidente del Gobierno de mentir y critica su “triunfalismo” ya que “no estamos bien”, y va señalando sus propuestas (entre ellas, rebajar el IRPF a clases medias y bajas e impulsar un sólido programa reformista con bajada de impuestos para impulsar el crecimiento, convocando al efecto a representantes del tejido económico y social para acelerarlas) y elaborando las listas con fichajes autonómicos, mientras negocia sin prisas con Vox en cinco CCAA. Además, mientras los barones del PSOE dan tregua electoral a un Sánchez optimista y Podemos arrastra a Sumar a una dura pugna interna a pesar del acuerdo logrado entre ellos, Feijóo señala a De Cos como favorito para llevar Economía, con lo que el Gobernador del Banco de España lidera una lista de ministrables populares a la que se suman Guindos, Bravo o González Páramo, en tanto que Gamarra advierte de que Sánchez, en caso de conseguir formar Gobierno, sería más débil y abocaría a España “hacia la ingobernabilidad”. En efecto, la realidad es que Podemos no da tregua alguna a Yolanda Díaz, la inventora de Sumar, y dinamita el arranque de la nueva coalición populista, pues Echenique e Iglesias insisten en presionarla y denuncian más “vetos” hacia la formación morada e Irene Montero rompe su silencio para apoyar al primero con un escueto “jefe, te quiero mucho”. En fin, cuestión de amores y quereres. Entretanto los nuevos barones del PP están convencidos de que “las ganas de cambio van a desatar un tsunami el 23-J” y, al efecto, Mazón, en la Comunidad Valenciana, manifiesta “quiero un gobierno lo antes posible, antes de las elecciones generales, pero negar que Pedro Sánchez ha infectado las negociaciones sería de necios” y Azcón, en Aragón, dice “yo aspiro a llegar a acuerdos con todos los partidos que estén a la derecha del PSOE, con todos, pero la gobernabilidad se debe centrar en el PP”.

            Así las cosas, mientras la Junta Electoral decide que será obligatorio el DNI en toda España para votar por correo (apuntando a record por las peticiones hechas ya) y que los viajes que se hayan contratado antes de conocerse la fecha de las elecciones eximirán de la obligatoriedad de formar parte de las mesas electorales, según GAD3, los españoles, divididos por el adelanto electoral, ven positivo el resultado del 28-M, pues el 51´3% considera buena la victoria del PP en las municipales y autonómicas, incluido el 29% del votante socialista, y, según SigmaDos, el PSOE aprovecha la crisis de Sumar y el PP sigue creciendo, pues Sánchez recuperaría cuatro diputados y obtendría 103, pero Feijóo también crece y mantendría la mayoría absoluta junto a Vox. Y, salvo que Tezanos, el mago de Sánchez que naufraga en las encuestas y no vio venir el tsunami azul el 28-M, diga lo contrario, según GAD3, Feijóo superaría los 150 escaños y dejaría a Sánchez sin opciones, pues la suma de las izquierdas se quedaría muy lejos de reeditar el actual Gobierno de coalición a pesar del acuerdo, cogido con pinzas, entre Sumar y Podemos, pues el PP con el 36´6% de votos conseguiría entre 150-153 escaños, el PSOE 27´7% y 101-104, Vox 12´4% y 33-35, Sumar 11´2% y 27-29, y Otros 9% y 34 diputados.

            Y en medio de todo este berenjenal Dolores Delgado, la ex ministra de Sánchez que, con polémica, dejó su sillón ministerial para pasar a ser Fiscal General del Estado, es nombrada ahora por su sucesor, García Ortiz, como Fiscal de Memoria Democrática con gran oposición del Consejo Fiscal, con lo que el Fiscal General consuma el dedazo ya que siete de los nueve vocales electos se niegan a votar su nombramiento para tal cometido, pues “es palmaria la inidoneidad de Delgado por su íntima relación con Garzón”, generando con ello una bronca en el Consejo sin parangón, mientras al actual Fiscal General le importa bien poco el asunto y va a lo suyo. Un feo asunto por el que fiscales históricos como Javier Zaragoza y Carlos Castresana abandonan, ente otros, la asociación progresista de fiscales mientras crecen las críticas contra el “nepotismo” de García Ortiz al colocar a su amiga contra todo pronóstico y cuando el informe anual de la Comisión Europea sobre calidad democrática coloca a España a la cola en la confianza en la autonomía de los órganos judiciales, pues con hechos como éste, entre otros, los españoles al final no creen en la independencia de la Justicia, básico en cualquier Estado democrático.

            En cuanto se refiere a otros asuntos, cabe citar que el Tribunal de la UE rechaza el límite a los VTC, dando así un golpe al taxi; que Madrid supera a Barcelona en ingresos turísticos y logra un 55% más de empleo en el sector; que Marruecos obstaculiza la apertura de las aduanas de Ceuta y Melilla, pues cartas oficiales revelan las reiteradas trabas de Rabat a cumplir lo pactado; que empieza la exhumación de 128 víctimas en Cuelgamuros con el objetivo de recuperar los restos de víctimas de la Guerra Civil de ambos bandos; que el palacio oficial preferido de Sánchez también extrae agua de Doñana y en los últimos cinco años se han gastado más de 2´5 millones para acoger las vacaciones del Presidente del Gobierno; que el problema de la soledad en España cuesta 14.100 millones anuales y afecta a un 13% de ciudadanos; que el PSOE, cuando lo dirigía Zapatero, ordenó a Correos en 2005 una investigación “sin éxito” sobre Feijóo durante el tiempo que el actual líder del PP lo gestionó, pero no hallaron nada irregular; que dirigentes del PP advierten del “peligro” de permitir a Trías ser el alcalde de Barcelona y reclaman a Feijóo que la votación sea afrontada como “asunto de Estado”; que se produce una rebelión académica y empresarial por el “becariazo” de Yolanda Díaz, pues más de un millón de alumnos no podrá terminar sus estudios a causa de la aprobación del Estatuto del Becario, aprobado en connivencia con CCOO y UGT pero “al margen de la comunidad educativa”; y que Hacienda provoca otra revuelta de funcionarios al acelerar el acceso de interinos justo antes del 23-J pues los administradores civiles del Estado tildan de “inadmisible” que se rebaje “por completo” el listón de exigencia para acceder y alertan de la maniobra para politizar el cuerpo que nutre de ejecutivos y altos consejeros a los ministros.

Fdo. Jorge Cremades Sena

jueves, 8 de junio de 2023

EXCENTRICIDAD, IRREALISMO O DESESPERACIÓN

 

                        Pedro Sánchez, haciendo gala de sus habilidades para utilizar las marrullerías y el juego sucio cuando considera que ello beneficia a sus intereses personales, sorprende a todos con la insólita propuesta de retar a Feijóo nada menos que a seis debates “cara a cara” cuando él en 2019 se negaba a los “cara a cara” que le solicitaba Casado, entonces líder del PP, y argumentaba que no era de recibo no debatir con el resto de líderes políticos que se presentaban a las elecciones para debatir sin embargo “cara a cara” con el líder de la oposición, pues eso era antidemocrático ya que, más o menos, menoscababa el derecho a debatir del resto de candidatos. No sabemos pues si lo que ahora sucede es que, sintiéndose ya oposición tras el varapalo del 28-M, vuelve a la estrategia opositora de retar al presidente del gobierno saliente como hacía cuando, antes de la exitosa moción de censura, retaba a Rajoy a debates “cara a cara”, para después negárselos a Casado por ser antidemocráticos, o si, por el contrario, es que se olvida de que, de momento, sigue siendo el Presidente de Gobierno aunque sea en funciones. En todo caso nadie entiende este giro de que lo que era hace poco antidemocrático es ahora imprescindible para la democracia, con lo que la insólita propuesta de tener seis “cara a cara” (ni uno ni dos, nada menos que seis) con Feijóo ha provocado el rechazo unánime de tirios y troyanos pues los populares en Génova consideran la propuesta una “excentricidad” u “ocurrencia a la desesperada” del Presidente y Yolanda Díaz, vicepresidenta de Sánchez en su Gobierno, tilda la propuesta de “machista” y de estar “fuera de la realidad”, mientras el resto de candidatos (ya sean de izquierdas, de derechas o mediopensionistas) obviamente se oponen también a la peculiar propuesta, conscientes de que, en todo caso, el objetivo de Sánchez, a quien se le ve el plumero, es borrar a sus socios, centrarse en el bipartidismo y focalizar la campaña en su pugna personal con el líder del PP, mientras en el PSOE (salvo en los fieles con orejeras a Sánchez y por intereses personales) sorprende que el Presidente no acepte de una vez por todas que el problema principal es su desgaste personal y el de sus aliados, a quienes ahora pretende pisotear, comenzando por Yolanda Díaz que, olvidando de donde procede y cómo ha llegado a ser Vicepresidenta del Gobierno, ahora no se fía de Podemos porque lo considera un elemento desestabilizador para su personal proyecto, Sumar, y lo ve como el caballo de Troya socialista para debilitarles, mientras hasta 40 ex cargos del partido de Iglesias ya han mostrado su sintonía con el proyecto de la Vicepresidenta dl Gobierno, alimentado por Sánchez desde el Ejecutivo con un claro trato de favor hacia ella frente a las ministras podemitas Belarra e Irene Montero, quienes, por otro lado, se han venido ganando a pulso los rechazos de que ahora mismo son objeto por parte incluso de los suyos. Así las cosas, obviamente el PP, como el resto de partidos, rechaza la propuesta oportunista del líder del PSOE de los “cara a cara” todos los lunes ya que su objetivo es centrarse en la calle porque “Feijóo se mueve con mucha más comodidad en ese entorno”. Y entretanto Sánchez busca acomodo en las listas del PSOE a 14 ministros y a sus afines caídos el 28-M, mientras Podemos intenta blindar a Irene Montero en las listas de Yolanda pese a la presión de Sumar, que ultima el acuerdo con Más Madrid y Compromís, en tanto que líderes territoriales de Podemos (la matriz de todos estos inventos para salir del paso) presionan a la dirección para pactar ante un riesgo real de colapso y de fractura en las filas moradas, cuyos líderes dijeron en su día que venían a terminar con la “casta” para después, instalados confortablemente en ella, acabar a codazo limpio y descalificaciones personales en una especie de sálvese quien pueda mientras los más listillos buscan nuevas formas populistas para seguir engañando a las gentes de buena fe, cuando el único objetivo es que todo siga igual pero con distintos nombres, pues la finalidad real es conservar y hacer prevalecer los intereses personales de cada uno de los protagonistas pero con la apariencia de que se trata de nuevos proyectos diferentes cuando la triste realidad es la ausencia de proyecto viable alguno, en tanto que el malestar en las demarcaciones territoriales de Podemos ya llega desde Madrid, Navarra, Extremadura, Galicia y Canarias, pidiendo a Belarra e Irene Montero pacto con Díaz o “pasos al lado” que es lo que, para muchos debiera hacer Sánchez, si quiere que al menos el partido tenga cierta credibilidad de cara al futuro.

            Es lo que hay, pues la prioridad para Sánchez es intentar taponar las goteras que él mismo ha provocado en el PSOE con su peculiar gestión sanchista, cada vez más parecida al populismo de sus socios y aliados, y, al efecto, ya coloca a las ministras Ribera y Robles, como dos y cuatro en las listas de Madrid, reservando el número tres para un ministro varón por aquello de la cremallera igualitaria, mientras, por otro lado, para otras circunscripciones recupera a Ábalos y Calvo, mientras desautoriza a Lamban en Aragón al imponer contra su deseo a la ministra Alegría de número uno por Zaragoza, mientras prosigue el proceso de seguir colocando a todos sus ministros en las listas en puestos de salida. Y por su parte Feijóo sigue a lo suyo arengando al PP desde Valencia en busca de una gran movilización el 23-J para mantener hasta entonces la inercia favorable de las autonómicas, mientras desvela sus objetivos para los primeros cien días, si es que gobierna, recuperando la sedición, con un nuevo CIS y un renovado poder Judicial, con Pablo Vázquez, preparando con Garicano y Báñez “un plan ejecutivo” volcado en las instituciones y la economía con un máximo de 15 ministerios frente a los 22 que tiene Sánchez para contentar a todos, ya que muchos de ellos por sus competencias pueden ser gestionados perfectamente por simples secretarías de Estado o incluso Direcciones Generales. En efecto, Feijóo, entre otras cosas, apuesta por acabar con el Ministerio de Igualdad, cuyas actuales competencias se gestionarán desde otros Ministerios, y derogará la “Ley Trans”, mientras el actual Ejecutivo tacha de “proyecto destructivo” el plan del PP, que promete multar a los colegios que no cumplan con el 25% de clases en castellano y para ello reforzará la Inspección Educativa para hacer que se cumpla la ley. Por otro lado, Abascal recupera presencia y controla las negociaciones de pactos territoriales con el PP, que deja en manos de sus barones los pactos con Vox, mientras el líder de Vox tacha de “error” los acuerdos con regionalistas a los que el PP está recurriendo en la medida de lo posible para eludir pactar con él, y, al efecto, ya avanzan las negociaciones con cántabros y aragoneses tras los acuerdos en Canarias. Y todo ello mientras aumenta la tensión en la recta final para el pacto Podemos-Sumar entre ataques de Iglesias, mientras Yolanda trata de mantener su invento al margen de choques entre sus futuros socios.

            Y, por si fuera poco, el Tribunal Supremo avala la rebaja de penas por la aplicación de la ley del “sólo sí es sí”, rechazando así el criterio del fiscal y, en definitiva, del Ministerio de Igualdad y, por ende, del propio Gobierno que aprobó la ley con total entusiasmo, aunque luego, Sánchez, desbordado por la cruda realidad y el empecinamiento de sus ministras podemitas de “sostenella y no enmendalla” tuviera que apoyarse en el PP para reformar la norma ante la hemorragia de rebajas de condenas y excarcelaciones anticipadas. En efecto, el Supremo arrolla al Gobierno con su ley-estrella del “sí es sí” al rechazar la Sala de lo Penal por unanimidad 27 de los 29 recursos interpuestos y avalar las rebajas de penas a los agresores…..pero nada de dimisiones ni ceses por semejante despropósito de la ley, la ministra Montero se limita a lamentar la decisión sin asumir ningún error y considera una “mala noticia” después de haber culpado de todo a los jueces por ser “machistas”, cuando en la judicatura la mayoría de jueces (juezas, juezis, juezos y juezus) son mujeres; en fin, sin más comentarios. Por cierto, hablando de jueces y fiscales, la mitad del Consejo Fiscal pide a García Ortiz que dimita y acusa al Fiscal General del Estado de mentir y utilizar una “burda maniobra” para colocar por dedazo a su amiga Dolores Delgado, su antecesora en la Fiscalía General del Estado desde que Sánchez la hiciera pasar prácticamente de ministra a dicho cargo, dejando claro que la Fiscalía depende del Gobierno y, ya ven, a buen entendedor….. (es el concepto de Sánchez de lo que es y debe ser la Fiscalía General del Estado); el caso es que desde la asociación mayoritaria de fiscales se trata de impedir que Dolores Delgado sea nombrada al frente de la Fiscalía de Memoria Democrática, mientras ella pide para su “macrofiscalía” materias que lleva su compañero Garzón, como impulsar casos de justicia universal y derechos humanos, la especialidad del despacho de su pareja, por lo que los fiscales denuncian un “conflicto de intereses” advirtiendo a García Ortiz que puede ser sancionado si insiste en nombrar a su amiga, que lo promovió al cargo de Fiscal General del Estado cuando ella cesó como tal y le piden que se estudien las “incompatibilidades” de la ex ministra para asumir la Memoria Democrática.

            Entretanto Sánchez aprueba 90.000 millones más en créditos y ayudas de la UE y promete 18 nuevas reformas a Bruselas a poco tiempo de las elecciones; por otro lado el Gobierno no informa del acuerdo migratorio con Biden, desconociéndose el texto competo del acuerdo, el gasto público que supondrá o el número de desplazados; además el Gobierno convoca 101 plazas públicas para periodistas a un mes de las elecciones, cuando en el último año del gobierno del PP se ofertaron 8 plazas, en 2019, con Sánchez ya en el poder, ascendieron a 60 y ahora casi se multiplican por dos; y para terminar, se produce una rebelión autonómica contra Calviño por no negociar los fondos, mientras la ministra utiliza con fines electorales el dinero europeo para cerrar la agenda política y centra el reparto de más de 100.000 millones en el plan “social”.

            Por lo que respecta a otros asuntos cabe citar que la Guardia Civil sospecha que los pagos a Negreira iban a directivos del Barça considerando que eran “sobresueldos” para parte de la cúpula; que la OCDE se suma a las revisiones al alza del PIB español; que España cede al BEI la gestión de los créditos europeos para las autonomías; que los cambios de las condiciones de las hipotecas se disparan a su record y en abril afectaron a préstamos por valor de 2.500 millones, cinco veces más que en febrero; que el TC admite el recurso de Griñán pero no suspende su pena de prisión; que las importaciones de gas ruso por España son el doble que hace un año; y que Alemania frena la injerencia de sus diputados en Doñana, pues mientras el Gobierno español les recibe con todos los honores, su Embajada evita que visiten Huelva alegando ahora que no deben interferir en el 23-J con el boicot a la fresa española que ha respaldado Moncloa (increíble…..pero cierto).

Fdo. Jorge Cremades Sena

lunes, 5 de junio de 2023

VUELTA A LA CENTRALIDAD

 

                        Históricos del PSOE (aunque ya sabemos que para Sánchez y sus radicales socios del Gobierno Frankenstein todos ellos son fachas), reaccionan ante el “insoportable” discurso del Presidente al Grupo Parlamentario Socialista y reclaman que el PSOE vuelva a la moderación y la centralidad, de donde jamás tendría que haber salido, y, que, al menos, en asuntos de Estado, pacte con el PP, pues sólo con el entendimiento entre las dos grandes opciones moderadas de derecha e izquierda se pueden solventar los grandes problemas de España y garantizar el futuro de la convivencia en paz y libertad de los españoles, diseñado en nuestra Constitución. Al efecto, Nicolás Redondo, llega a afirmar ante exdirigentes como Ibarra, Marugán, Méndez o Leguina (como se sabe, fachas de toda la vida), que “la palabra refundación da miedo, pero nos hemos refundado muchas veces”, convencido de que a lo largo de la Historia lo peor para el PSOE y para España ha venido siempre con la radicalización política que, al final, logra que se impongan las soluciones radicales minoritarias contra el sentir mayoritario del pueblo soberano. Pero el actual PSOE, apela a la épica de Zapatero en 2008 (otro dirigente que se cubrió de gloria, aunque Sánchez le ha superado con creces en todos los frentes) para “activar a la izquierda” y, aunque lanza una OPA a Podemos, no descarta repetir la coalición y, así las cosas, los socialistas aspiran a concentrar el voto útil mientras los morados, que tantos quebraderos de cabeza han dado a los españoles, soportan un aluvión de dimisiones por el malestar hacia la cúpula tras el fiasco electoral que, como Sánchez, también han sufrido. En todo caso, la renuncia de Garzón a ir en las listas, apostando por que IU juegue a la “renovación de caras públicas” en Sumar pone el foco en Belarra y Montero, mientras Yolanda Díaz agradece su gesto al ministro y Moncloa reniega ahora de la operación fallida del tándem Sánchez-Díaz, pues Sumar ya no suma como muleta del PSOE, e intenta aglutinar a los votantes en las siglas socialistas, ya que los ministros dan por perdido el poder y sólo confían en resistir apelando al voto útil. Y es que la crisis de Podemos estalla con dimisiones incluidas en tres regiones, mientras los aliados de Sumar chocan con Yolanda por la estructura del nuevo invento o futura coalición, pues ella, mientras felicita a Garzón o Colau por su renuncia a ir en las listas, evita confirmar a Montero y Belarra, valorando la “renovación de caras” y trasladando a las citadas ministras, dirigentes de Podemos, la “pregunta” sobre si deben figurar o no en las listas del 23-J. Y ante semejante situación, Page, el único socialista que ha conseguido revalidar su mayoría absoluta en la Autonomía que preside y uno de los más críticos con Sánchez, manifiesta, en cierta sintonía con los exdirigente socialistas históricos citados, que “PP y PSOE están jugando a que no haya centro” y añade que “el PSOE eligió a Sánchez pero eso no nos hace sanchistas” y que “no creía que la marea fuera tan fuerte, el tema nacional ha sido una interferencia evidente”…..pues, apaga y vámonos, ahora, a diferencia del 28-M, estamos estrictamente en elecciones generales, más clave nacional, imposible, con lo que, de confirmarse lo que dice Page, los sanchistas pueden esperar lo peor.

Y con semejante ánimo de campaña, según SigmaDos, el PP se dispara, gana terreno a Vox y saca una diferencia de 45 escaños al PSOE (con el 34´2% de los votos y 144 diputados llegaría con Vox a 177, frente a un PSOE que obtendría un 25´7% de votos y 99 escaños), mientras la alianza de Sumar y UPodemos empeoraría los resultados que tienen sendas formaciones si van por separado (con el 14´2% de votos llegarían a 34 escaños); y es que el sondeo señala además que más votantes del PSOE ven más presidente a Feijóo que a Sánchez (el 40´6% confía en el éxito del líder popular frente al 39´4% que apuesta por Sánchez), que el 26% relevaría a Sánchez por otro candidato, y que el 27% de los que han optado por el PSOE el 28-M votará por otro partido, mientras que el 72% de los que se han decantado por el PP repetirá la elección. Según NCReport el PP roza los 150 escaños a costa de Vox y absorbiendo los diputados de Ciudadanos (PP obtendría el 34´6% de votos y entre 145-147 escaños, PSOE 23´3% y 94-96, Vox 14´3% y 39-41, Sumar 10´5% y 24-26, Podemos 4´2% y 2-3); según GESOP, el PP rozaría la mayoría absoluta con Vox, aunque Sánchez obtendría el mejor resultado del último año pese al batacazo del 28-M y Sumar hunde a Podemos (PP obtendría entre 126-132 diputados, PSOE 104-110, Vox 42-45, y Sumar 33-36); y según 40DB, una sola lista de Sumar con Podemos alejaría del Gobierno a PP y Vox, que tendrían al alcance de la mano la mayoría absoluta si van por separado (si el bloque de la izquierda va junto tendría 181 diputados y el de la derecha 169, y si van separados tendría 173 y el de la derecha 177)…..ya ven, hay para todos los gustos. Pero, en fin, no pasa nada, sólo son encuestas, y seguro que, cuando menos lo esperemos, aparece Tezanos con su CIS y lo cambia todo. No obstante, Moncloa sentencia a sus socios convencidos de que “hay que prescindir de ellos”, pues el PSOE, que ahora culpa de la debacle al “desplome a su izquierda” (como si el PSOE no se hubiera desplomado), ignora a Podemos y Sumar para apelar al “voto útil” y “concentrar” el voto de izquierdas bajo sus siglas y marca distancias con Yolanda Díaz con el argumento de “cada uno por su lado”, mientras Belarra y Montero reivindican a Podemos argumentando que “hemos perdido un batalla, no la guerra”…… Y cuando, según SigmaDos, la mayoría, harta de tanto desencuentro, desmadre y egoísmos partidarios, aboga por dejar que gobierne la lista más votada (lo que supondría cambiar la ley electoral), el socialista Page tiene muy claro que “del 23-J depende la medicina que reciba el PSOE y su dosis”.

            Por su parte Feijóo integrará a los cargos de Ciudadanos que “den el paso” tras haber decidido este partido no presentarse el 23-J, pues, aunque Génova no hará fichajes “por respeto”, sí que “escuchará con generosidad a aquellos que quieran cambiar de partido”, mientras Arrimadas decide abandonar la política, descarta ir al PP y admite “aciertos y errores”. En definitiva, Feijóo busca listas plurales con guiños al centro y a Vox, a quien pide que “facilite” los gobiernos del PP en los ayuntamientos y CCAA o que admita que sólo persigue “cuota de poder”, y anuncia que, si gana en las generales, pedirá una auditoría a fondo sobre el desorbitado gasto público ya que los populares sospechan que en los años de gestión del actual gobierno de coalición han disparado el despilfarro en temas superfluos e ineficientes. La campaña del PP dejará un tiempo de respiro a la ciudadanía en esta contrarreloj hacia el 23-J, que definirá el futuro gobierno del país, tendrá un tono presidencialista y Bendodo y Tellado volverán a ser los ejes centrales del diseño de la estrategia de la misma. Una campaña en que el inesperado adelanto electoral ha revolucionado la vida política, con un Sánchez buscando como sea ensanchar el electorado del PSOE, con un Feijóo planteándola como conservadora, mientras Sumar corre con urgencia para sellar un pacto de la izquierda a la izquierda del PSOE y Vox pendiente de qué hacer en la formación de los gobiernos locales y autonómicos, pues ya libran su primer pulso con el PP, con Feijóo pidiendo a Abascal que deje gobernar a sus candidatos, mayoritariamente votados, mientras la nueva líder popular en Extremadura cierra la puerta a una coalición de gobierno con los ultras.

            Entretanto dos asuntos llaman la atención. El primero es que diputados alemanes visitan España para presionar por Doñana y Sánchez alienta dicha iniciativa de que se reúnan con altos cargos de Consumo y de Transición Ecológica, mientras su Gobierno justifica el boicot alemán a la fresa de Huelva y culpa al Presidente de la Junta andaluza de un uso abusivo del agua del parque nacional, cuando se conoce que Monedero y Garzón tienen vínculos con el lobby antifresa, pues dos de los directores de la plataforma que promueve el boicot en Alemania proceden de Attac, que tiene el ideólogo de Podemos, y el Ministro de Consumo trabajó para la organización…..y el alcalde socialista de Moguer arremete contra Sánchez porque “ha echado más madera” en el problema. El segundo asunto lo protagoniza la socialista griega Eva Kaili, ex vicepresidenta del Parlamento Europeo e implicada en el caso Qatargate, que también acusa a Marruecos, Francia y Bélgica de rastrearla por investigar el software israelí, y niega que el país árabe la sobornara, se siente víctima de un complot y, entre otras cosas, declara: “España espió al Comité Pegasus del Europarlamento”, “falsificaron pruebas contra mí desde España sobre cuentas mías en Panamá con millones”, “el dueño de los 150.000 euros encontrados en mi casa debería dar explicaciones, no tienen mis huellas y no son mis ahorros”, “hay una conexión entre el espionaje al Gobierno de Sánchez y Marruecos”, “nadie me ha ofrecido nunca un soborno y ningún gobierno lo ha intentado, los regalos que recibí eran recuerdos” y “dije que Qatar es el país líder en reformas en el mundo árabe y eso es un hecho, ¿podría ser mejor?, sí”…….en fin, dicho queda, y lo que también podría ser mejor es que Sánchez explicara a los españoles su cambio copernicano en las relaciones con Marruecos en el asunto del Sáhara, todavía está a tiempo de hacerlo antes del 23-J, esperemos que así sea.

            Y por lo que respecta a otros asuntos, cabe citar que el Parlamento Catalán acata la inhabilitación de Laura Borrás le quita el escaño y celebra ahora su relevo; que la Junta Electoral se decanta por pedir el DNI en el voto postal y un registro al depositario; que tras el 28-M Tudela se ha convertido en el último bastión del avance proetarra en una Navarra con el norte de Bildu y el sur de UPN; que los pacientes alcohólicos pueden optar a un trasplante de hígado y los afectados de VIH se han reducido a la mitad en los últimos cuatro años; que la Iglesia española identifica a 728 abusadores desde 1950, más de la mitad ya fallecidos; que el alquiler bate otro record en el mes de la Ley de Vivienda; que el BCE apunta a una nueva subida de tipos de interés de 0´25 puntos en junio; que el Barça femenino de futbol se alza con su segunda Champions; que Sánchez busca vías para que España use los fondos europeos después de 2026; y que el empleo crece con fuerza en mayo hasta los 20´8 millones, gracias a los hosteleros de Cataluña y Baleares en especial, y el paro está en el nivel más bajo desde 2008, pero España lleva once meses seguidos liderando las cifras de desempleo en Europa y el absentismo laboral se dispara con 1´6 millones de empleados que no trabajan una hora a la semana….. en definitiva, más trabajo, sí, pero menos horas globales trabajadas, también.

Fdo. Jorge Cremades Sena