domingo, 30 de agosto de 2020

CON AMIGOS ASÍ, NO SE NECESITA ENEMIGOS

 

                        Una vez más y en el momento más crítico se constata el garrafal error de Sánchez al elegir a sus “amigos” y socios de viaje para llegar a La Moncloa, primero con la moción de censura y después repitiendo con ellos una paupérrima investidura para conformar por la mínima un gobierno de coalición minoritario con Podemos, cuando el propio Sánchez ya intuía el fiasco poco antes afirmando que ni él ni la mayoría de los españoles podrían dormir tranquilos con Pablo Iglesias en su Gobierno. Sánchez era libre para elegir, incluso para  no presentarse a la investidura y convocar otras elecciones, y eligió su propio insomnio y la pesadilla para la mayoría de españoles que, cada vez más decepcionados, observan hoy cómo España se hunde sin que, desde ese mismo gobierno, se vislumbre el más mínimo atisbo de solución a los problemas que padecen. En efecto, a la ristra de evidentes desencuentros, incluso en cuestiones de Estado, entre la parte socialista y la comunista-populista del pintoresco gobierno de Sánchez, siempre superada hasta ahora por el mayor interés de ambos de permanecer en el poder (en caso contrario se les acabaría el chollo), se añade ahora la más crucial, como es la elaboración y aprobación de unos Presupuestos, pues sin ellos el camino es claro, la disolución del gobierno social-comunista y, salvo alguna otra solución, la convocatoria de nuevas elecciones para ver si los españoles apostamos ya decididamente por una sólida mayoría parlamentaria, del signo que sea, que garantice la estabilidad gubernamental de una vez por todas. Y, al efecto, cuando Sánchez intenta buscar esos apoyos en Ciudadanos para aprobar las cuentas, aunque a su vez haga guiños, por si acaso, a ERC (prometiendo incluir en ellas una partida de 759 millones pendiente del Estatuto Catalán y advirtiendo de que dichos fondos sólo podrían ir a la Generalitat con unos presupuestos nuevos), Unidas Podemos, su socio de coalición gubernamental, le lanza un desafío público en toda regla para excluir cualquier tipo de negociación con los naranjas de Arrimadas y, en caso contrario, se muestra tajante para no apoyar las cuentas, rompiendo así el Vicepresidente Iglesias la estrategia de su Presidente en el momento más inoportuno: justo ante la ronda con los partidos políticos y en medio de la presión al PP para que pacte. Podemos, con el veto a Ciudadanos, veta así cualquier opción que no sea ERC o Bildu….y, mientras Carmen Calvo pide asumir “posiciones” ajenas a la coalición, los de Iglesias reivindican la reedición de los pactos de investidura. Es tal el esperpéntico despropósito que, al final, Unidas Podemos decide suavizar su posición (lo contrario sería poner fin al chollo que tienen) y anuncia que no vetará totalmente a Ciudadanos (en fin, aquello de estar embarazada pero sólo un poquito), aunque exige a Sánchez que primero pacte las cuentas con ellos antes de negociar con otras fuerzas. ¿Es que no se da por hecho que los Presupuestos son del Gobierno y por tanto ya habrían de estar pactados si ese gobierno es de coalición? ¿A qué juega Podemos diciendo primero que por nada del mundo apoyarán unos Presupuestos negociados con Ciudadanos y al día siguiente manifestando que Sánchez podrá negociar con quien considere oportuno si antes los ha pactado con ellos? En definitiva, se da la paradoja de que al final se esté buscando (e igual se consigue) la aprobación de unos Presupuestos de un gobierno sin el apoyo de parte de dicho gobierno y con el apoyo de parte de la oposición al mismo. ¿Consideran que semejante insensatez es asumible por alguien que tenga dos dedos de frente? Lo trágico es que un presidente de Gobierno se encuentre atado de pies y manos por una parte de su propio gobierno, albergando sólo la esperanza de que al final las tragaderas de unos u otros propiciaran la aprobación de los mismos como sea por el mero motivo de permanecer en el poder y gracias a la ingenuidad de quienes pasaban por allí para echarles una mano en la aprobación de los mismos. A Sánchez, porque él mismo lo eligió, se le puede aplicar sin espacio para el error el dicho popular de que “con amigos así, no se necesita enemigos”.

            No obstante Sánchez intenta salir de este atolladero en que le meten sus propios socios de gobierno, sus amigos, rodeándose de empresarios y banqueros para presionar a Casado, convocándoles para hoy, un día antes de su cita con el Jefe de la oposición, a una reunión, que denomina “cumbre empresarial”, bajo el disfraz de una especie de “conferencia de país” con el título de “España puede” para reivindicar la necesidad de “unas cuentas de país” para superar la crisis, mientras los empresarios, en medio del desconcierto por una especie de “sumisión” de Garamendi, el presidente de la CEOE, ante el plan del Gobierno, que algunos califican de “mera propaganda”, recelan de Sánchez (y muy especialmente de su socio Iglesias) considerando que en todo este juego “hay mucho humo” y lo califican de “mera propaganda”. En dicha cumbre, reunión o acto propagandístico, que cada uno lo denomine como considere oportuno, Sánchez pedirá “unidad” para salir de ésta, cuando queda más que evidente que ni siquiera su Gobierno está unido. ¿A qué unidad apelará Sánchez si sus propios socios de Gobierno y quienes lo apoyaron abogan permanentemente por la división? En fin, sin comentarios. ¡Claro que se requiere unidad para conformar esas “cuentas de país” para superar la crisis! Pero qué unidad puede reclamar a la ciudadanía y al resto de partidos políticos si su propio gobierno anda desunido y enfrentado públicamente. Casado, a quien Podemos se lo pone como se lo ponían a Felipe II, manifiesta con razón que “no se puede pedir al PP apoyar unos Presupuestos de Podemos” y, aprovechando la ocasión, añade que su partido “siempre ha estado en el centro” y, ante el cese de Álvarez de Toledo, que dice “por el momento, me quedo: voy a averiguar hasta dónde llega la libertad de un diputado de base”, recuerda que “lo difícil no es invocar la libertad de cada uno, lo valiente es defender la de todos”.

            Por su parte Educación, aunque tarde e insuficientemente, pacta con las CCAA unas mínimas reglas para la vuelta al cole, consensuando un amplio acuerdo de mínimos para retomar la educación presencial pese a los rebrotes, decepcionando a la comunidad educativa por esta especie de escenificación de acuerdo de mínimos centrado en aspectos sanitarios, sin contemplar cuestiones básicas como la ratio de alumnos por aula, el refuerzo del profesorado o el baremo para cerrar los colegios que será “sólo en caso de contagio descontrolado” (¿y quién decide dicho descontrol?). Un acuerdo que se limita a asuntos básicos, casi de sentido común, como llevar mascarillas en clase (desde los seis años), guardar la distancia social (casi imposible en muchos centros) o la higiene (lavado de manos cinco veces al menos). En definitiva, el Gobierno se lanza a por un curso escolar sin controles ni plan B, acordando con las CCAA un plan de clases presenciales sin previsión para confinamientos, sin distancias concretas para todos los territorios, sin la obligación de test PCR, sin vigilar que se cumplan los contenidos…..es decir, ni test, ni ratios, ni enfermeros en los centros, que es lo que haría falta y Educación no concede. Dice Celáa que “los beneficios de la escuela son superiores a los riesgos” pero habría que añadir que dichos riesgos han de minimizarse de forma drástica y para ello se requiere algo más que un acuerdo genérico y en asuntos menores con las CCAA. No en vano, profesores, padres y alumnos, ante el abandono de Celáa, se quejan de que “nos lo han dejado todo a nosotros”, pues la comunidad educativa denuncia que, en definitiva, Educación y las CCAA han dejado “toda la responsabilidad a los centros” ya que no hay “medidas claras” y la “ausencia de criterios es absoluta”.

            Entretanto Sanidad registra 9.658 nuevos contagios, la cifra más alta de la segunda ola de coronavirus, y 3.781 sólo en un día, la peor cifra desde abril, mientras Defensa forma 2.000 rastreadores en cinco semanas con virología y técnicas de interrogatorio, ya a disposición de las CCAA, que seguro algunas considerarán una afrenta del maldito ejército español para sus territorios (menos mal que, al menos, ya son siete las que han solicitado su presencia). Y en semejante situación, el ministro Illa improvisa  una rueda de prensa, cuando rozamos 100.000 contagios, para anunciar los primeros ensayos en España de un laboratorio belga, sin ninguna financiación ni participación del Estado, en que se contempla que 190 voluntarios españoles sanos prueben su vacuna en tres hospitales españoles, dos de Madrid y uno de Cantabria, con la esperanza de obtener los primeros resultados en pocos meses, aunque  ello no suponga prioridad alguna en el futuro reparto de dosis. Al efecto España reclutará 190 voluntario para probar una vacuna anti-covid, autorizando por primera vez semejante ensayo, mientras el IBEX vuelve a la oficina tras las vacaciones con test, turnos rotatorios y aplicaciones para sus empleados.

            Y para poner la guinda a este pastel de despropósitos, Colau, socia de gobierno de los socialistas, facilita una moción contra Juan Carlos I y contra el propio Gobierno de Sánchez, pues en el pleno del Ayuntamiento de Barcelona, por quince votos independentistas a favor, 10 abstenciones de la alcaldesa, y 14 votos en contra del PSC, Ciudadanos y PP, más la inasistencia al pleno del ex primer ministro francés y su compañera de partido (los hay para todos los gustos) se reprueba al Gobierno de Sánchez como “cómplice” de Don Juan Carlos I por ser “colaborador necesario en la huida” del anterior Jefe del Estado y además se retira la medalla a Don Juan Carlos (los socios y amigos de Sánchez no dejan de dar sorpresas). Por su parte el prófugo Puigdemont  pone en marcha en secreto el próximo 1-O (las Fuerzas de Seguridad detectan que “elementos clave del 1-O” ya encabezan otra “sedición-rebelión” y los jueces ya han autorizado 15 órdenes de escucha), mientras la inestabilidad política en Cataluña se agrava con la baja de cargos del PDeCat, pues concejales y senadores abandonan el partido heredero de Convergencia para sumarse al antidemocrático proyecto del fugado Puigdemont….y, entretanto Torra, en plena guerra del independentismo, quiere que Mascarell le sustituya cuando sea inhabilitado para evitar que ERC se haga con la Presidencia de la Generalitat antes de las elecciones. Por otro lado, fuera de Cataluña también cuecen habas: mientras la Guardia Civil acusa al Gobierno de “pasividad” por permitir el “día del odio” en Alsasua, el PSOE facilita que Cádiz elimine de su callejero al Rey Juan Carlos, permitiendo, con la abstención de los cinco ediles socialistas, que el alcalde radical-populista Kichi saque adelante su moción.

            En fin, es el país y los políticos que tenemos, mientras los españoles, desde la llegada de Podemos para debilitar al PSOE (es decir a la izquierda) y la de Vox para debilitar al PP (es decir a la derecha), finiquitando el bipartidismo moderado, seguimos enrocados en las urnas para no poder salir de este laberinto político infernal que nos conduce al caos (político, social, económico e institucional) si es que ya no estamos en él. Como muestra valga la última encuesta de NCReport (aunque sólo se trate de encuestas) que predice que el Gobierno de coalición se deja 1´4 millones de votos con un Podemos que es el que más sufre pero con un PSOE que no rentabiliza la caída de su socio, mientras el bloque de la derecha sumaría hasta 166 escaños (23 más que el de la izquierda) pero con la moción de censura de Vox, dando algo de aire a Sánchez y frenando al PP en un mes, lo que, al final, deja en manos del secesionismo y el nacionalismo la futura gobernabilidad…..según la encuesta los resultados serían los siguientes: PSOE 26´9% y entre 113-115 escaños, PP 24´7% y 105-107, Vox 15% y 49-51, UPodemos 10´7% y 26-27, y Ciudadanos 5´7% y 8-9. Es lo que hay.

            Por lo que respecta a otros asuntos cabe citar que el consumo de luz en hoteles cae un 43% en el peor verano de la historia; que España pierde un total de 27.592 pensionistas tras el coronavirus; que, según la ministra de Exteriores González Laya, “el PP casi ha rozado lo desleal con el fondo europeo”; que un incendio forestal sin control devasta 10.000 hectáreas en Huelva; y que el PP exige al ministro Escrivá que explique por qué no se paga el ingreso mínimo. 

            Y del exterior, destacar que el Tour de Francia arranca con dos meses de retraso, mascarillas y muchas caídas de ciclistas; que Lukashenko no quiere testigos de su represión y anda a la caza del periodista internacional, mientras una gran marcha por la democracia desafía su despliegue militar, pues 100.000 manifestantes se enfrentan a la represión en el día del cumpleaños del dictador bielorruso; y que en EEUU los republicanos agitan el miedo al caos social y Trump responde a los disturbios apelando a “la ley y el orden” y anunciando un largo periodo de tipos de interés cero, mientras el espíritu de Luther King revive con una gran marcha en Washington contra el racismo tras el cierre de la convención republicana para conmemorar el discurso genial de King en 1963 y su mítica frase “tengo un sueño”…..un sueño que, desgraciadamente, sigue siendo una pesadilla.

                                    Jorge Cremades Sena

jueves, 27 de agosto de 2020

ESTADOS DE ALARMA A LA CARTA

 

                        En pleno ascenso vertiginoso y preocupante de rebrotes de coronavirus por toda España y en pleno despelote gubernamental, como jamás se había dado en nuestra historia democrática, Sánchez nos ilumina con su última ocurrencia para afrontar la difícil situación ofertando la posibilidad a las CCAA de una especie de “estados de alarma” a la carta, cuyo encaje legal no estaría exento de dificultades y, en todo caso, iría, políticamente hablando, contra el necesario esfuerzo de coordinación y autoridad que hoy más que nunca necesita esta despelotada y confusa España de las CCAA, favoreciendo más aún que cada una de ellas siga actuando como le venga en gana. El estado de alarma, que es un mecanismo constitucional excepcional, aplicable total o parcialmente en el territorio español, y está regulado ampliamente por la Ley Orgánica 4­­­/1981, tiene como único órgano constitucional competente para declararlo al Gobierno de España mediante un decreto del Consejo de Ministros y posterior ratificación del Congreso de los Diputados, recayendo las competencias durante el periodo de vigencia en quienes se diga en dicho decreto, tal como ya se hizo en el reciente estado de alarma del mes de marzo. Conviene remarcar que la declaración del estado de alarma es una excepción a la normalidad constitucional, que restringe derechos, y que, salvo que el riesgo objeto de su aplicación se concentre “exclusivamente” en el territorio de una comunidad autónoma, en cuyo caso el Gobierno podría delegar la condición de autoridad competente en el Presidente de dicha autonomía, debe conducir a la centralización transitoria de competencia en el Gobierno Central para dotar de eficacia a las medidas adoptadas, máxime cuando, como es el caso, la gravedad de la situación amenaza a todos los territorios de España y cuando las “defensas político-institucionales y territoriales” del Estado están más devaluadas que nunca. Siendo obvio que la pandemia no es un problema “exclusivo” de una autonomía sino que afecta a la salud de todos los españoles, es evidente que la única iniciativa que se le ocurre a Sánchez de que sean las CCAA quienes soliciten la declaración de estado de alarma, ofreciendo sus votos al efecto para que salga adelante la iniciativa en el Congreso, es una chapuza pintoresca cuando no una flagrante “dejación de funciones”, tal como le acusa con razón Pablo Casado, pues la responsabilidad, que es del Jefe del Ejecutivo, no se puede saldar con una llamada voluntarista a la “unidad” y dejar la iniciativa a las Autonomías, quienes, de momento, descartan pedir esos estados de alarma a la carta que les ofrece el Presidente del Gobierno, que se lava las manos cuando más contagios hay con esta sorprendente oferta de menos gobierno, asegurando que “España es un Estado casi Federal” para trasladar ahora toda la responsabilidad en las CCAA tras haber dispuesto de un largo periodo de estado de alarma de varios meses sin haber adoptado alternativa alguna a la situación posterior, dejando como única opción de nuevo la declaración de un nuevo estado de alarma pero con la novedosa ocurrencia de que ahora sean las autonomías quienes vayan pidiendo cada una el suyo en vez de atreverse, asumiendo su responsabilidad si considera que esa es la única alternativa, a decretarlo de nuevo tal como hizo anteriormente. No extraña pues que Casado, como Jefe de la oposición, le acuse de escabullirse y presidentes autonómicos denuncien su “descoordinación” y falta de liderazgo. La realidad es que ahora Sánchez se borra para que las CCAA asuman todo el desgaste ante lo que se nos viene encima, entre otras cuestiones, por una mala gestión en la desescalada, lo que supone que se le acuse no sólo de una indecente “dejación de funciones”, sino además de “falta de lealtad” y de “bajar los brazos” justo cuando España más necesita de un liderazgo político gubernamental que, a la vista está, este gobierno minoritario de coalición social-comunista, liderado por Sánchez e Iglesias, es incapaz de ofertar.

            Mientras tanto, Sanidad emplaza ahora a tomar “medidas drásticas” cuando el avance del virus parece imparable y España supera ya los 400.000 contagiados, registrando 46.000 en siete días, un 11% más del total desde marzo. Y en pleno clamor ante la “inhibición” de Sánchez, con 20.000 nuevos casos, con el gobierno ausente y con el control de la pandemia perdido, cada Autonomía va haciendo lo que buenamente se le ocurre (imaginen si finalmente se consolidan los estados de alarma autonómicos a la carta que ofrece Sánchez): Cataluña prohíbe las reuniones de más de diez personas, Murcia las de más de seis y Madrid desaconseja “interacciones sociales innecesarias”; Castilla-La Mancha pide al Presidente que no se “desentienda”, Murcia le acusa de “lavarse las manos” ante los rebrotes, en tanto que Madrid, Aragón, Andalucía, Galicia, Comunidad Valenciana y Castilla-León le reclaman “instrumentos jurídicos”…. Por su parte Simón, mientras las autonomías siguen adoptando medidas dispares, advierte sólo a Madrid de un posible “confinamiento” y resta importancia a que nuestro país registre 166 casos por cada 100.000 habitantes, diez veces más que Italia, o que la covid haya subido un 50% en el último mes, situándose a la cabeza de Europa. Y, ante esta falta de liderazgo del Gobierno, Feijóo, que rechaza la declaración de las alarmas autonómicas a la carta, retrata la parálisis de Sánchez y lidera la propuesta del PP de llevar al Congreso una nueva Ley de Salud Pública completa, mientras los juristas tildan de “absurdo” instar estados de alarma simultáneos en las diferentes autonomías y Sánchez añade a su pintoresca iniciativa de estados de alarma a la carta, el uso de la “app” Radar Covid y oferta dedicar a rastreo 2.000 militares, ante la evidente falta de rastreadores. Pero, sinceramente, ¿ustedes creen que podemos seguir así un minuto más? Yo considero que en este asunto, como en otros muchos, no; y apuesto a que cada vez son más quienes tienen mi misma sensación.

            Con idéntico desbarajuste el Ministerio de Educación carga a las CCAA la decisión de volver o no al colegio (en Reino Unido, por ejemplo, consideran “vital” ir a la escuela y avisan que se multará a los padres que no lleven a sus hijos), mientras Madrid retrasa el inicio de curso y reduce los alumnos por aula en tanto que las demás autonomías mantienen por ahora la fecha prevista….y Podemos, partido cogobernante con el PSOE, acusa a la ministra Celáa de falta de liderazgo en Educación, que tratará hoy mismo de intentar unificar algunos criterios con las CCAA ante la disparidad de normas anunciadas para la vuelta al cole en cuestiones tan simples como ventilar el aula o llevar mascarillas. Y mientras Celáa negocia su ocurrencia de un permiso pagado, discutible desde Hacienda, si los hijos no pueden ir al colegio, aunque se diseña un protocolo común para el absentismo pues la no asistencia a clase “no es una opción en la enseñanza básica”, las CCAA, divididas, no se ponen de acuerdo en la ratio de alumnos por aula, ni en si deben hacerse PCR, ni en el uso de la mascarilla (en Madrid proponen que sea obligatoria desde los seis años y que las clases sean presenciales hasta 2º de la ESO)….todos a la espera de un tardío protocolo de Sanidad sobre la vuelta al colegio, en el que parece ser que, entre otros, se contempla que los profesores deberán usar EPI si un alumno presenta síntomas y que sólo se cerrarán los centros si hay un “elevado número” de casos, mientras las CCAA piden que las asignaturas tengan menos contenido y el Sindicato de Estudiantes echa un pulso a la ministra Celáa con anuncio de huelga y pide apoyo a Pablo Iglesias en sus reivindicaciones.

            Y mientras Sánchez busca oxígeno en el fondo europeo (España recibirá 21.300 millones de euros en créditos para pagar los ERTE, que habrá que pagar después) y en el diálogo con Ciudadanos para afrontar este tormentoso inicio de curso político y poder aprobar los Presupuestos, las empresas aceleran para lanzar en otoño una oleada de prejubilaciones…… cuando se conoce que, ante el desorbitado gasto público inasumible, no se puede ni siquiera afrontar la propuesta estrella podemita, convertida en ley, del Ingreso Mínimo Vital, defraudando las expectativas de muchos de sus posibles receptores que ven denegadas o aplazadas sus peticiones con la artimaña de estar pendientes de información pese a cumplir todos los requisitos; en efecto, por email enviado a los trabajadores de la empresa pública subcontratada por la Seguridad Social para tramitar los expedientes de ingreso mínimo se indica registrar las peticiones como pendientes de información pese a cumplir los requisitos, con instrucciones de clasificarlos como “requerido” o más información, tanto si es realmente necesario “como si hemos comprobado que la documentación aportada es la correcta y no falta nada”, mientras Hacienda, por su parte, atribuye empresas fantasma para denegarlos, paralizando peticiones por errores en la tramitación como solicitudes por administrar sociedades inexistentes o ya dadas de baja. Es la chapuza vergonzante para no admitir que no hay ni un euro y esa es la causa de que todas las medidas tomadas y especialmente las sociales, anunciadas a bombo y platillo pero no acompañadas de una memoria económica que las avale, son de momento inviables al cien por cien. Podemos, y por lo visto Sánchez, no se han enterado de que la época de la propaganda demagógica ya pasó, que ahora gobiernan y, obviamente, que no es lo mismo predicar que dar trigo.

            Por cierto, hablando de Podemos y de la corrupción, hemos asistido a un bochornoso espectáculo parlamentario en el que mientras el Presidente Sánchez y todos los partidos que le apoyaron en la censura cerraban filas para que Iglesias no comparezca en el Congreso ni se cree una comisión parlamentaria de investigación para aclarar políticamente y con transparencia los presuntos asuntos de corrupción que afectan a Podemos, éste partido, por boca de su Secretario de Organización, amenazaba con su “jarabe democrático” advirtiendo de que si se ataca al matrimonio Iglesias los trabajadores despedidos pueden acosar al Rey, a los empresarios o a los periodistas en sus domicilios, cuando debiera decir que estuvo mal (como ahora lo está el acoso al matrimonio Iglesias-Montero) y que fue un grave error democrático poner de moda los escraches que ellos practicaron con absoluta impunidad (entre ellos contra Rosa Díez en la Complutense con Iglesias y Errejón gritando “¡fuera fascistas!; contra Cristina Cifuentes que tuvo que refugiarse en un restaurante ante los insultos de los “indignados” que la rodearon en la calle; contra el domicilio de la Vicepresidenta del Gobierno Sáenz de Santamaría donde se concentraron los colectivos antidesahucios; o contra Begoña Villacís, acosada por los radicales al grito de “¡ahora que estás embarazada a ver si te desahucian!”), y que ahora sufren ellos en sus propias carnes cuando ellos lo consideraban como “jarabe democrático”, en vez de señalar el camino para que otros los sigan practicando siempre que no sea a ellos. Pues bien, el PSOE sabrá por qué libra a Iglesias de explicar la “caja B” de Podemos (por cierto, la que vende como solidaria cuando apenas paga fines sociales, pues en 2019 sólo dedicó a proyectos un 18% de las donaciones de altos cargos) a pesar de que algunos ministros, como Margarita Robles, y barones socialistas abogaban al menos por que Iglesias compareciera en el Congreso, generando tensiones en el Gobierno de coalición. Y todos los que bajo la bandera de la corrupción auparon la moción de censura de Sánchez contra Rajoy, sabrán explicar por qué ahora no hacen lo propio, por lo que, entre ellos, además del PSOE, Unidas Podemos, ERC, Junts, PNV, Bildu y Compromís habrían de aclarar a los ciudadanos si es que hay corrupciones malas y buenas.

            En fin, que cada quien aguante su vela y asuma sus propios errores e incoherencias. Lo cierto es que Iglesias, que lleva 31 días sin dar una rueda de prensa, se libra de la demandada transparencia y, por tanto, no comparecerá para dar explicaciones en el Congreso de los Diputados por la imputación de su partido, cuya financiación tampoco será investigada en sede parlamentaria. Sánchez prefiere cerrar filas con él, pase lo que pase, para mantenerse en el poder, sin importarle las salpicaduras que le puedan llegar y olvidando que por un caso parecido, el de la financiación irregular y la corrupción, él fue aupado a ese poder que ahora no quiere dejar y, por si ERC le deja tirado en la estacada en los Presupuestos, prioriza a Ciudadanos sobre los republicanos en este turbulento inicio de curso político. Casado por su parte, demandante de la comparecencia de Iglesias en el Congreso junto a Ciudadanos, irá a la Moncloa ante la citación del Presidente con una negativa a grandes pactos y sólo negociará los Presupuestos si Iglesias sale del Gobierno, aunque tenderá la mano en Educación y Sanidad, pero no en Justicia.

            Por lo que respecta a otros asuntos cabe citar que se produce un triple homicidio en Móstoles al embestir intencionadamente un coche a otro tras una disputa familiar; que Messi pide irse del Barça y el City de Guardiola es el gran candidato para ficharlo; que los separatistas celebrarán la Diada pese al riesgo de contagios con autorización de Torra; y que San Sebastián, donde el PNV gobierna con el apoyo del PSE, margina el español para convertirse en “la capital del euskera” pretendiendo eliminar el castellano de su “paisaje lingüístico”.

            Y del exterior, destacar que los análisis apuntan a que Navalni fue envenenado; que la ira vuelve a prender en EEUU tras los disparos por la espalda a un hombre negro por la policía, desencadenando graves disturbios y tres jornadas violentas especialmente en Wisconsim; y que, mientras la bielorrusa Svetlana Alexiévich, Nobel de Literatura, dice que “en cualquier momento llaman a la puerta y me detienen”, Svetlana Tijanovskaya, líder opositora y refugiada en Lituania, declara “yo soy la presidenta electa de Bielorrusia”, “si Lukashenko cede el poder hoy mismo, le dejamos irse”, “Lukashenko toma el fusil porque tiene miedo, por primera vez no sabe cómo salir de ésta”, “Putin tiene derecho a reconocer el resultado electoral, pero la gente en Rusia nos apoya” y ruega “que los demás países respeten nuestra soberanía, no queremos guerra como en Ucrania”.

                                    Jorge Cremades Sena

lunes, 24 de agosto de 2020

NI CASUALIDAD, NI MALDICIÓN DIVINA

 

                        No puede ser mera casualidad, ni deberse a una maldición divina que en estos momentos España registre las peores cifras de contagios de coronavirus de toda la UE, al extremo de que con 68.000 contagios en catorce días supera los de Italia, Francia, Reino Unido y Alemania juntos. Obviamente los expertos, entre otras cuestiones, achacan este descomunal rebrote de contagios a la falta de medios, a una desescalada precipitada, a la imprevisión del Gobierno, al maremágnum de medidas autonómicas, a la falta de sensibilización, a la inacción de Sanidad e Interior y, en definitiva, a una mala gestión para enfrentar el contagio de forma eficaz y uniforme. La triste realidad es que España no controla el covid-19, que entre todos la mataron y ella sola se murió y que por este camino vamos a un desastre descomunal sin lugar a dudas. Para intentar evitarlo los especialistas, ante este aumento de casos y muertes, exigen mejorar los sistemas de rastreo, insuficientes y de baja calidad, y garantizar los aislamientos que casi se dejan al arbitrio de los afectados, en una España tan excesivamente garantista, no sólo en este asunto sino en otros muchos, en la que cada uno hace lo que le viene en gana sin que apenas tenga repercusión en quienes se saltan las leyes y las normas sistemáticamente dando la sensación de que se protege más a los delincuentes y a los que se mueven al margen de la ley que a quienes la cumplen civilizadamente. Menos mal que, al menos, Simón, por fin, admite que el virus está sin control (la triste realidad le hace desistir de su enfermizo optimismo propagandístico) y que “las cosas no van bien” aunque matiza, ¡cómo no!, que es “en puntos concretos”. Por algo se empieza y lo primero para intentar resolver un problema es reconocer que existe, aunque sea tarde y a destiempo. Y lo dice cuando sufrimos más de 3.000 nuevos contagios diarios, in crescendo, y en plena oleada de nuevos positivos en los hospitales de Madrid, por ejemplo, que detectan cinco veces más casos que hace dos semanas, mientras la Comunidad recomienda no salir de casa en los barrios más afectados (como Usera y Carabanchel o en pueblos como en Alcobendas, Fuenlabrada, Móstoles o Parla) y un juez suspende la aplicación de las nuevas medidas en la región, entre ellas no fumar en la calle, cuando en otras autonomías similares medidas siguen vigentes. Si esto no es un cachondeo que venga Dios y lo vea. El caso es que, mientras un juez pone en cuestión que sin estado de alarma se limiten libertades como la de fumar en la calle o el ocio nocturno, en otras no sucede dicha limitación, pero, a pesar de todo este desbarajuste esquizofrénico el Gobierno traslada toda la presión política a las autonomías y desiste de las reformas legales anunciadas en su día como alternativa al estado de alarma, pues Sánchez descarta tomar el control pese a este caos regional, cuando se dan 8.148 casos más (3.349 en sólo 24 horas) y cuando la OMS cifra en un 5% el límite para evitar que el virus nos desborde y España ya roza el 8%. El Presidente, que vuelve de vacaciones, no prevé, que se sepa, una reforma legal o un nuevo estado de alarma y Sanidad avisa de que el Remdesivir, único fármaco de momento con cierta eficacia frente al virus, “se va a agotar” ante el repunte de contagios, y los hospitales están en alerta ante un nuevo colapso por los rebrotes, avisando los médicos de que “viviremos un tsunami” en los centros en otoño. Entretanto Castilla La Mancha prohíbe la venta de alcohol a partir de las 22 horas, mientras en España se desencadena una controversia sobre por qué siguen abiertos los prostíbulos, pues las asociaciones de mujeres explotadas sexualmente critican que la orden del Gobierno de cerrar prostíbulos sea sólo temporal por razones sanitarias y que las sigan esclavizando en pisos, mientras feministas del PSOE cargan contra Irene Montero alegando que “son centros de esclavitud no focos de contagio” por lo que subrayan que “la justificación no debe ser la pandemia sino los derechos y la dignidad de las mujeres”. Evidentemente esta caótica situación ni es una casualidad, ni obedece a una maldición de los dioses.

            Y en idéntico maremágnum que en asuntos de Sanidad, en Educación se afronta el inicio del nuevo curso escolar, cuando la reapertura segura de los colegios será clave para evitar otro confinamiento. Las autonomías, cada una a su aire, endurecen sus protocolos para salvar la vuelta a las aulas, mientras los profesores ven inviable un curso semipresencial. De momento las CCAA renuncian a que el arranque del curso escolar sea al 100% presencial, varias autonomías obligarán a los padres a declarar que sus hijos van a clase sin fiebre y asociaciones de padres se plantean que los niños no inicien el curso si no se toman medidas ante el aumento de los rebrotes, generando alerta por el absentismo escolar que se puede provocar por la falta de protocolos en Educación, mientras las CCAA hicieron sus planes, cada una a su aire, en un escenario demasiado optimista y ahora renuncian a la enseñanza presencial en su totalidad por falta de recursos, sin medios ni personal para garantizar las mínimas condiciones que eviten los contagios. Así las cosas, según NCReport, más de la mitad de los padres manifiestan que no llevarán a sus hijos al colegio, el 73% de los españoles cree que el Gobierno gestionó mal la desescalada, el 60% considera que el Ministerio de Educación no tiene un protocolo seguro y siete de cada diez encuestados teme contagiarse del virus.

            Entretanto, con los Presupuestos como tema esencial (aún estamos con los que hizo Montoro durante el Gobierno de Rajoy), mientras Moncloa advierte a Podemos de que “no queremos ni vetos ni juegos”, Inés Arrimadas, tras la baja maternal, manifiesta: “si el Presupuesto no contenta a Iglesias, mejor para España”, “en una situación normal no hablaríamos con el Gobierno, pero estamos en medio de una pandemia”, “el Ejecutivo dedica más esfuerzos a atacar a la concertada que en planificar la vuelta a clase” y “si hay medidas comunes para las discotecas en todas las CCAA las tiene que haber en los colegios”. Por su parte Casado, tras la remodelación del PP, rechaza grandes pactos con Sánchez y deja claro que el cese de Álvarez de Toledo no persigue facilitar el diálogo con el Gobierno, y, manifestando “no somos una muleta” y que la destituyó para ganar elecciones, defiende los cambios en su partido para ensanchar su electorado, pide “lealtad”, rechaza las “agendas paralelas” y coloca como “número tres” del PP a Almeida quien, como portavoz nacional declara que “el PP no va a optar por la polarización, pero tenemos que ser una alternativa al Gobierno”, que “había discrepancias con Álvarez de Toledo y lo lógico era zanjarlas” y que “Sánchez no puede pasar del estado de alarma a decir que no tiene nada que ver con la pandemia”, mientras Cuca Gamarra, la nueva portavoz del PP en el Congreso, añade que “los reproches de Cayetana no son lo importante; hay que dejar de mirarse el ombligo”, que “Pedro Sánchez ha renunciado a gobernar a cambio de una tumbona” y que “vamos a pedir una comisión en el Congreso sobre las cuentas de Podemos”.

            Y es que, en efecto, la Fiscalía ve indicios de delito en las cuentas del 28-A de Podemos, sospechando el ministerio público de un contrato con una consultora, por lo que le señala por falsear gastos electorales. Así las cosas el Fiscal Jefe del Tribunal de Cuentas pide abrir la vía penal por “falsedad en documento mercantil” y por “un delito electoral” al apreciar elementos “sugerentes de responsabilidad penal” por lo que los enviará a la justicia ordinaria. Señala así los contratos con Neurona, que ya investiga el juez que imputó al partido y que fichó a una empresa para clonar en secreto el ordenador de su propia abogada. El juez pues investigará a Podemos por “fraude electoral” ya que, según el Tribunal de Cuentas, el partido no ha justificado un contrato por 363.000 euros, sospechándose que los pagos de Podemos a Neurona, la consultora chavista, fueron una “tapadera” en Méjico, donde la sociedad tiene su domicilio en una casa de una barriada de la ciudad de Guadalajara, mientras su escasa actividad se realizaba en América pero a ella llegaron casualmente los gastos electorales de Podemos, haciéndose un trasvase de 308.000 euros a través del Banco Mercantil del Norte. En fin, ahora habrá de ser el PSOE quien decida, al margen de la investigación judicial, si el Congreso investiga la financiación de Podemos ante la propuesta del PP, que quiere que Iglesias comparezca para dar explicaciones.

            Por cierto, hablando del Tribunal de Cuentas, mientras Moncloa busca cerrar un acuerdo sobre las pensiones en un mes (es decir, antes de los presupuestos), dicho Tribunal destapa otro turbio asunto como es el descontrol en las ayudas a la dependencia con más de 284 millones dados a las CCAA de forma indebida; mientras tanto, familias desahuciadas siguen a la espera de cobrar el Ingreso Mínimo Vital, aprobado en mayo, quejándose algunas de que “no lo cobro y me han quitado la ayuda autonómica”, en tanto que el Gobierno se defiende por los retrasos y dice que la mitad de las solicitudes llega incompleta. ¿No será que lo que sucede es que no hay ni dinero ni medios para tramitar tan honorable iniciativa? De ser así estaríamos ante una mezquindad intolerable, pues como sucede con otras prestaciones de ayuda, nada peor que dar esperanza a los más necesitados y vender la iniciativa como propuesta estrella para después dejarlos tirados con el ya famoso “vuelva usted mañana”. En fin un desastre se mire por donde se mire, como sucede con la okupación de viviendas, puesta de moda por Podemos y Ada Colau, que ha dado lugar a que algunos pueblos estén secuestrados por los okupas, con alcaldes obligados a llevar escolta, con familias extorsionadas por las mafias para devolverles las llaves (hasta dos años de media se necesitan para desalojar a un okupa) y pueblos y barrios arruinados por la llegada de centenares de asaltantes de viviendas que toman el control en plena crisis económica, agravada por esta maldita pandemia…..un pintoresca situación que sólo sucede en España, pues en otros países la okupación ilegal de viviendas se resuelve en 24 horas, no en vano un matrimonio noruego, que tenía una segunda residencia en España, se echaba las manos a la cabeza tras ser avisados de que dicha vivienda estaba okupada y como solución les dijeron que negociara con los ilegales okupantes: “¡estas cosas no suceden en mi país!”, decían, ni en ningún otro país civilizado y democrático, añadiría yo. Está más claro que el agua que todos estos fenómenos ni son por casualidad ni obedecen a una maldición divina.

            Por lo que respecta a otros asuntos cabe citar que las elecciones catalanas serán en otoño, más lejos todavía por los rebrotes; que Corina asegura que Don Juan Carlos no quería “esconder” o “lavar” el dinero, mientras el fiscal suizo investiga un lujoso palacete que ella compró en Inglaterra por 13 millones y que está a nombre de una fundación panameña; que Abascal será el candidato de la moción de censura de Vox y la ofrecerá para ir a las urnas; y que el Sevilla consigue su sexta Europa League al vencer al Milán, 3-2, en la final, consiguiendo el pleno histórico de seis títulos en seis finales.

            Y del exterior, destacar que Steve Bannon, ex consejero de la Casa Blanca y cerebro de la campaña de Trump, es detenido por fraude en las donaciones para el muro de Méjico y acusado de estafar a los donantes; que Biden promete acabar con la “oscuridad” de la era Trump; que el Bayern conquista su sexta Champions tras ganar, 0-1, al PSG en la final; que el ex director de Pemex, Emilio Lozoya, que colabora para librarse de la cárcel, acusa a tres ex presidentes de Méjico –Peña Nieto, Felipe Calderón y Carlos Salinas de Gortari- en el cobro de dinero del “caso Odebrecht”; que, según Borrell, el alto representante de la UE para AAEE, “Lukashenko es como Maduro; no le reconocemos pero hay que tratarle” mientras una marea humana desafía las amenazas del presidente bielorruso y vuelve a tomar las calles del país; que EEUU busca 350 millones de dólares expoliados a los venezolanos, mientras Baltasar Garzón intenta evitar la extradición desde Cabo Verde de Alex Saab, el testaferro del régimen de Maduro a quien Washington acusa de fraude en la ayuda humanitaria y negocios ilegales con Irán; y que el líder opositor Navalni, en coma y con síntomas de envenenamiento tras perder el conocimiento en un avión después de beber una taza de té, con lo que Putin se libra de su mayor opositor mientras sus rivales denuncian que Navalni es la última víctima de las fuerzas oscuras del sistema, es trasladado a Alemania tras autorizar Rusia a regañadientes su traslado para ser atendido en un hospital alemán.

                                    Jorge Cremades Sena

jueves, 20 de agosto de 2020

IMPRESCINDIBLE MODERACIÓN

 

                        Desde que, con cierto éxito electoral, irrumpiera Podemos en la escena política española y, posteriormente, Vox hiciera lo propio, rompiendo así el tradicional bipartidismo moderado e impulsando a PSOE y PP respectivamente hacia un radicalismo indeseado para no perder su respectivo espacio electoral hacia la izquierda o la derecha, los acontecimientos demuestran que el desencuentro impulsado por el radicalismo no es una opción de futuro por lo que hay que recuperar de nuevo la imprescindible moderación política, entre otras cosas, porque la inmensa mayoría de los ciudadanos españoles es moderada y es consciente de que el insulto y el desencuentro sistemático sólo nos conduce a la nada y al caos. Si a lo anterior se añade el fracaso electoral de Ciudadanos en su intento de ocupar ese espacio político de centro y el éxito de la moción de censura contra Rajoy gracias al apoyo del radicalismo podemita y del secesionismo a un desconocido renovado PSOE cada vez más escorado hacia la izquierda por parte de Sánchez, el caos político está más que servido…..y la ingobernabilidad también, justo cuando España, espoleada por la crisis sanitaria y económica, más necesita de amplios consensos mayoritarios. En definitiva, o PSOE y PP recuperan su anterior moderación, relegando el radicalismo de Podemos y Vox, así como los nacionalismos radicales indeseables, o el proyecto de convivencia pacífica surgido de la Transición, que tantos años de paz en libertad y progreso nos ha dado, tiene los días contados, dando paso a un incierto futuro de desencuentros de todo tipo entre los españoles que sólo conduce a la violencia, al enfrentamiento y a la pobreza. En este sentido cabría enmarcar la decisión de Casado, apoyada por los barones populares, de destituir a Álvarez de Toledo y remodelar el PP con un giro hacia la moderación y con la economía, la sanidad y el empleo como ejes de su política de cara al futuro; y en este sentido, cabe enmarcar, la decisión de Sánchez de buscar un acuerdo con Ciudadanos de cara a la aprobación de los Presupuestos, aunque, todo hay que decirlo, obligado por las deslealtades de quienes facilitaron su débil gobierno de coalición y presionado por el sector moderado, socialdemócrata, de su propio partido frente al sector filocomunista más radicalizado. En efecto, al margen del resultado de las negociaciones entre Sánchez y Arrimadas, en el PP Casado destituye a su portavoz, Cayetana, por desafiar su autoridad, refuerza a Ana Pastor y elige a moderados en las portavocías (Cuca Gamarra en el Congreso y Almeida en el partido), mientras García Egea, que ha liderado el sector de Génova que acusaba a la portavoz de “deslealtad” con Casado, gana poder y pone ahora el objetivo en los barones comenzando a hacer nombramientos en los territorios para reforzar el control de la dirección. Y mientras dirigentes del PP jalean a Almeida, el nuevo portavoz del partido a nivel nacional, considerando que “no tiene techo en política”, la dirección del partido esgrime que la radical Cayetana “sólo era portavoz de sí misma” y ella, tras su cese, sostiene que “la discrepancia no es deslealtad” y, sin desvelar si abandonará el escaño, aunque el PP da por hecho que se irá, reprocha a Casado que quiera dirigir el PP como a un ejército, le advierte de que no conseguirá agrandar la base del partido expulsando a los discrepantes y considera su cese como un castigo a su “libertad” denunciando que la dirección del partido ha elegido “el pasado”……  Bienvenido ese pasado si consiste en la recuperación de una moderación que permita el consenso, al menos en temas de Estado y en asuntos vitales para nuestra convivencia, con un PSOE que, como el PP, debiera hacer idéntico tránsito hacia su pasado moderado y glorioso, frente al peligroso radicalismo de sus actuales socios de gobierno, verdadera barrera para establecer acuerdos ampliamente mayoritarios. Las extremas radicales de izquierda o derecha, representadas en España por Podemos y Vox respectivamente, y sus mensajes demagógicos y propagandísticos, prácticamente irrealizables e inconvenientes, no son la mejor receta para buscar los encuentros políticos mayoritarios que España necesita y, de momento, sólo sirven para alimentar el ánimo de una minoría de ciudadanos, salvo que las torpezas de los partidos mayoritarios moderados les sigan dando alas con sus erradas políticas, pues, al final, si no son capaces de mostrar las abismales diferencias con ellos, con la democracia como eje, muchos votantes, ante la confusión ideológica preferirán el original a la copia, que es lo que sucede ahora….y así nos va.

            Tan deseado es ese regreso a la moderación por parte de los partidos que han liderado estos años de democracia y libertad, que hasta setenta y cinco ex ministros y altos cargos del PSOE, PP y la extinta UCD, defienden públicamente y sin reparos el legado del reinado de Juan Carlos I, mientras  Margarita Robles censura los ataques de Podemos a la Monarquía y apela a que “hay que respetar la presunción de inocencia”, también para el Rey Emérito, que, de momento, ni siquiera está imputado, y de quien, por fin, la Casa Real confirma que está en Emiratos Árabes, aunque sin desvelar si es un destino temporal o definitivo. Presunción de inocencia que muchos exigen cuando se ven inmersos en procesos judiciales, como sucede en estos momentos con Podemos y su líder Iglesias, pero que no reclaman, sino todo lo contrario, cuando idénticas razones afectan a los contrarios. Son las cínicas contradicciones de la ley del embudo que suelen utilizar los radicales sin apenas ruborizarse, como sucede ahora con Pablo Iglesias, obligado a abandonar sus vacaciones en Asturias por el permanente escrache que sufre en su residencia vacacional y que cualquier demócrata, a los que me sumo, debiera repudiar y condenar tajantemente. En efecto, ante el acoso sufrido, dice Iglesias y con razón que “lo que la extrema derecha hace a mi familia es grave”…..estamos de acuerdo, por supuesto, es muy grave y lo condenamos, pero cabe recordarle que quienes pusieron de moda los escraches, como las “okupaciones” ilegales de viviendas y otras nefastas ocurrencias, fueron ellos, que las alentaron y las consideraron como estrategia política, y ahora, una vez instalados en el sistema capitalista aunque sólo sea de boquilla y para aprovecharse de sus ventajas, sufren en sus propias carnes las consecuencias de sus propias consignas que otros ministros y altos cargos sufrieron en su día en sus propios domicilios, en la universidad y en la calle. No estaría de más que Iglesias y compañía al ver que los demócratas denunciamos el acoso que él y su familia está sufriendo, dijera que en su día se equivocó alentando e incitando a semejantes acosos a sus contrincantes políticos…..es lo que daría verdadera dimensión y credibilidad a su queja, que compartimos. Por cierto, Sánchez es abucheado en Matalascañas, lo que también denunciamos, mientras aumentan las protestas contra su desgastada coalición gubernamental social-comunista que, según encuestas, retrocede hasta 19 escaños en ocho meses….. ¡cómo para no agarrarnos a la esperanza de una imprescindible moderación política que finiquite este desmadre demagógico propagandístico!

            Mientras tanto los contagios de coronavirus se desbocan en España y, se registren como se registren (16.269 sólo en tres días, 3.175 nuevos casos en un día, 131 muertos en los últimos siete días frente a los doce de la tercera semana de julio….), ponen en alerta a la ciudadanía en tanto que Simón por fin reconoce que las cifras son preocupantes y la OMS llama la atención por la gestión de dichos brotes y explica la restricción a viajes en la falta de información pues España, lamentablemente, ya es el país que registra más casos de Europa cuando, curiosamente, ha sido uno de los países que con el estado de alarma tomó las medidas más drásticas en plena pandemia. En efecto, España, con 2.128 nuevos contagios y 1.000 ingresos hospitalarios pasa en una semana del quinto al primer lugar de países con más contagios por cada 100.000 habitantes y se convierte en líder de la epidemia de Europa en rebrotes, multiplicándose por once las muertes por covid en un mes y agravándose la situación con los peores datos de la desescalada, en tanto que las residencias de mayores alertan de su precariedad ante una nueva ola más que previsible si es que ya no está aquí. Así las cosas, España, con Madrid y Aragón como las zonas con más afectados y hospitalizados, acelera sus dos vacunas para que estén listas en 2021 mientras que China patenta su fármaco, cuando una irresponsable manifestación, sin mascarillas ni distancia de seguridad se produce en Madrid con absoluta normalidad, en tanto que cada vez son más quienes se preguntan ¿por qué el Delegado del Gobierno en Madrid no prohibió dicha manifestación de los “negacionistas antimascarillas”? y los científicos proponen aislar en “arcas” a los positivos y más PCR, alertando de que la estrategia del Gobierno nos lleva a pérdidas económicas enormes. Y mientras las muertes registradas en las últimas 24 horas por coronavirus se duplican en España, Médicos sin Fronteras, sobre lo ocurrido en 486 residencias de mayores, sostienen que “golpeaban las puertas y suplicaban salir” sin que nadie les hiciera caso y Sanidad sostiene que “las medidas acordadas deben aplicarse con el máximo rigor”. La realidad es que, al margen del acierto o no de las medidas adoptadas, su manifiesto incumplimiento empeora la situación de forma alarmante.

            Y todo ello de cara al comienzo del próximo curso escolar sin que la ministra Celáa, si es que puede, haya diseñado un protocolo, cuando los  profesores avisan de que las dispersas medidas adoptadas para volver al colegio “no son realistas”. En efecto, Educación, sin que se haya decidido todavía, plantea que el curso sea semipresencial a partir de los 14 años, mientras la ministra ultima con Sanidad el protocolo que supondría acudir a clase en días alternativos a partir de 3º de la ESO y en el Bachillerato, y en Infantil y Primaria acudirían todos los días en “grupos burbuja” de 25 alumnos guardando la distancia de seguridad. Y es que el Ministerio de Educación, vaciado de competencias, es incapaz de unificar los protocolos autonómicos ante la pandemia, mientras los sindicatos anuncian huelgas para el arranque del curso en Madrid, concentrando sospechosamente sus ataques en dicha Comunidad cuando las demás, cada una a su aire, están en semejante situación de incertidumbre, lo que demuestra que el asunto está cargado de connotaciones políticas ignorando que lo que está en juego en todas las CCAA, al margen de por quién y cómo estén gobernadas, es la salud de nuestros niños y jóvenes. Y mientras Ayuso pide “responsabilidad” ante las anunciadas huelgas en su Comunidad, que no en otras, Feijóo decide hacer test a todos los docentes y propone mascarilla desde los seis años….Los padres, ante semejante desmadre, empiezan a buscar alternativas a las clases y los profesores alertan de la falta de planes claros ante la pandemia. Es nuestra triste realidad en este entramado de diecisiete sistemas educativos distintos autonómicos en que ha derivado la Educación, al igual que la Sanidad, en España, desde que se despojara a los respectivos ministerios de casi todas las competencias.

            Entretanto España se queda sin escudo contra la gigantesca deuda pública, que crece en 32.000 millones en sólo un mes por la avalancha de medidas sociales aprobadas por el Estado, las CCAA y los Ayuntamientos, hipotecando así la ansiada recuperación económica. El Banco de España calcula que la deuda pública equivaldrá al 119´3% del PIB a finales de 2020, un verdadero estado de ruina, pues el pinchazo económico del verano enfría la reincorporación de los ERTEs con el pertinente incremento del ya exagerado desempleo registrado en nuestro país. No en vano, un documento firmado por médicos, virólogos y economistas avisan de que “la estrategia actual conduce a pérdidas económicas enormes”….. y es que si la única medida para afrontar la crisis sanitaria consiste en cerrar los centros productivos, la ruina está más que garantizada, pues sólo el sector turístico prevé unas pérdidas de 100.000 millones por el fiasco del verano, cuando el otoño será mucho peor.

            Por lo que respecta a otros asuntos cabe citar que España está a la cola de la UE en el rescate a las empresas; que la moción de censura contra Ayuso cobra fuerza en el PSOE; y que Ciudadanos releva a su candidato en Cataluña, con lo que Carlos Carrizosa será el cabeza de lista en las elecciones catalanas en vez de Lorena Roldán.

            Y del exterior, destacar que China patenta una vacuna anti-covid19 y prevé su uso masivo en breve; que un golpe de estado militar derriba al presidente de Mali; que Biden muestra su fuerza en la Convención Nacional Demócrata en EEUU y arranca con un llamamiento a la unidad frente a Trump; y que Lukashenko trata de ganar tiempo ante el clamor para que dimita y manifiesta que en Bielorrusia “sólo habrá elecciones si me matáis” mientras ordena sofocar las protestas masivas y detener a sus líderes, en tanto que la UE rechaza su victoria electoral fraudulenta y llama al diálogo para resolver la crisis.

                                    Jorge Cremades Sena

lunes, 17 de agosto de 2020

FALTA DE UN LIDERAZGO COMÚN

 

                        Lo peor que le puede pasar a cualquier Estado, al margen de la estructura que tenga, es la falta de un liderazgo común de su gobierno para imponer los intereses generales de todos sus ciudadanos frente a los intereses particulares de índole sectorial o territorial, al menos en aquellas cuestiones esenciales como la salud o la educación, derechos básicos para todos que no debieran depender ni del origen territorial ni de la condición económica que tengan. Lamentablemente es el caso de esta España de las autonomías, cada vez más a su libre albedrío cada una de ellas y cada vez con menos autoridad del Gobierno de todos para imponer la más mínima coordinación, lo que provoca que los españoles cada vez somos más desiguales entre nosotros y, por tanto, estemos inmersos en preocupantes desencuentros que amenazan incluso a la supervivencia del propio Estado, del que hasta su modelo de Jefatura está en discusión. Así las cosas, ante la preocupante escalada de rebrotes de contagios de coronavirus tras el desconfinamiento y el final del estado de alarma, los colegios médicos, hartos de la situación, alertan del “riesgo de colapso” por el “continuo y preocupante aumento de casos” y reclaman a los responsables políticos un “golpe de timón” ante la “falta de un liderazgo común”, denunciando el “caos de cifras insuficientes y contradictorias”, mientras Simón, el portavoz autorizado del Gobierno, sigue negando la existencia de una segunda oleada de contagios y lo reduce a una “cuestión semántica” restando importancia, como sucediera cuando la pandemia apareció en nuestro país, a lo que ya casi todo el mundo percibe; no extraña que el Presidente de la Organización Médica Colegial diga que “necesitamos un comité de expertos independiente y Simón no debería liderarlo” (cabe recordar que, incluso en pleno auge de la pandemia, el Gobierno ya nos mintió sobre la existencia de un inexistente comité de expertos en que basaba las decisiones que tomaba). La triste realidad es que, mientras Simón sostiene que “septiembre será el momento de riesgo”, los contagios ya están disparados y los médicos avisan de otro colapso, denunciando que las medidas adoptadas “no son suficientes” y exigiendo, al menos, coordinación entre el Gobierno y las CCAA, en tanto que Simón, que no descarta cerrar todos los colegios de España, se limita a agradecer la “llamada de atención” para mantener la tensión, aunque, según él, “2.935 casos en un día no es tan grave”. Entretanto la iniciativa de Galicia de prohibir fumar en la calle sin la distancia de seguridad, se va extendiendo por otras autonomías, comenzando por Canarias, hasta que, finalmente, Illa, el Ministro de Sanidad, a remolque de las circunstancias, pacta once medidas con las CCAA para intentar atajar la expansión del virus, un plan acordado por unanimidad, por el que se decreta el cierre de discotecas y bares de copas de todo el país, se prohíbe fumar en la calle a menos de dos metros de otra persona y las reuniones de más de diez personas, mientras los expertos abogan por una “Ley Covid” que permita actuar de forma homogénea en todo el territorio. El sector del ocio nocturno califica la medida, que afecta a 200.000 empleos, de “absolutamente desproporcionada”, e irá a los tribunales y exige un rescate económico; por su parte el Gobierno Vasco impone además desde hoy el estado de emergencia en Euskadi y endurecerá el control, mientras Alemania declara a España zona de riesgo, excepto Canarias, y Madrid hará 6.000 PCR aleatorios en las zonas de la región con más Covid-19. Y cuando los contagios diarios se acercan a los 3.000 diarios, los negacionistas del coronavirus, sin mascarillas ni distancia de seguridad, reúnen a unas 3.000 personas en la madrileña Plaza de Colón para protestar contra el uso obligatorio de mascarillas y contra la “farsa” del Covid, convencidos de que en este país el incumplimiento de las leyes y normas sale bastante barato, como sucede, entre otros ejemplos, con la “okupación” de viviendas o la reiteración de delitos menores, al extremo de dar la sensación de que se protege más al delincuente que a la víctima.

            Y en este lamentable panorama de falta de un liderazgo común habremos de afrontar además el inicio del nuevo curso escolar con plena incertidumbre ya que, a pocas semanas de iniciarse el mismo, seguimos sin protocolos, mientras los profesores temen que esta falta de previsión en Educación haga perder otro curso a unos diez millones de alumnos. No en vano los expertos en enseñanza critican los bandazos y la falta de liderazgo de la ministra Celáa (entre otras cosas porque el Ministerio apenas tiene competencias y cada autonomía hace lo que considera oportuno) y muchos se quejan de que “el Estado no está garantizando el derecho a la educación”, un derecho esencial que nos hace más iguales y más libres y que, por tanto, para el conjunto de la ciudadanía no puede depender del capricho de cada gobernante autónomo en cada uno de los territorios que conforman el Estado, tal como establece la Constitución. Mientras tanto, el Ayuntamiento donostiarra pide a los padres de recién nacidos que usen el idioma vernáculo para “sentirse arraigados” ya que “el euskera le dará más oportunidades en la vida”……si, como sucede en Catalunya, además se persigue el español, la lengua oficial de todo el territorio, está claro que lo que se resta es dar menos oportunidades en la vida para ser y sentirse españoles.

            Entretanto España lidera el mayor desplome del PIB de Europa, siendo la economía española la más afectada de toda la UE (el PIB europeo cae de abril a junio un 11´7% frente al 18´5% en España), mientras la mitad de las empresas que cerraron por el aislamiento no han reabierto. No en vano Antonio Garamendi, Presidente de la CEOE, manifiesta que “la política está muy radicalizada, lo que hace falta es moderación”…..algo bien complicado con un Gobierno en el que, parte del mismo, sostiene que “el cielo no se toma por consenso, sino por asalto”, lo que, en democracia, parece poco viable, aunque dicho sector ahora, ya bien instalado en la tierra y en la “casta”, sólo utilice la frase marxista con la boca pequeña mientras se beneficia del, según ellos, perverso sistema capitalista a nivel personal. Un Gobierno social-comunista que ahora proyecta un “comité de sabios” para repartir los anhelados fondos europeos dando así un giro (otro más) en plena crisis al pensar en personalidades del ámbito económico para recomponer la colaboración público-privada que tanto detesta el Vicepresidente Iglesias y los suyos. Y, mientras tanto, los Presupuestos en el aire, aunque Ciudadanos esté dispuesto a negociar pese a la imputación de Podemos en causas judiciales, obviando así su programa de regeneración al no pedir la salida de los imputados como habitualmente ha venido haciendo en los acuerdos con el PP, al que siempre exigieron apartarlos.

            Y es que siguen apareciendo datos de las supuestas conductas delictivas en el seno de Podemos, donde una “trama corrupta” desactivó el control contable, al detallar Calvente, su ex abogado, cómo una “suborganización” anuló auditorías y ocultó presupuestos, en tanto que, bajo la dirección de dos íntimos de Iglesias, se allanó el terreno a “actos irregulares” en la financiación. Calvente, llega a decir que “esto es mucho peor que Gürtel” y declara ante el juez que había facturas ficticias, pero Iglesias atribuye la investigación a Podemos a “viejos poderes” porque se basa en “acusaciones sin fundamento” y vincula la causa judicial a sus críticas recientes a la Monarquía. Por otro lado la consultora chavista exhibe a Monedero, fundador de Podemos, como uno de sus directores, pues la firma investigada, Neurona, presenta en su informe de 2019 al ex líder podemita como clave para captar clientes, aunque Monedero lo niega. La realidad es que Podemos no hace auditoría externa de sus cuentas desde 2017, coincidiendo el periodo opaco con los investigados por el Tribunal de Cuentas y la Audiencia, por más que Iglesias zanje la polémica con un tuit y diga que todo es un “juicio mediático”, mientras el declive electoral de Podemos le cuesta al partido 5´4 millones en ingresos y lo deja en pérdidas por primera vez, pues el descalabro electoral en 2019 provoca que cierre un año en números rojos al caer en subvenciones y en ingresos de cargos y afiliados (los otros dos damnificados son Ciudadanos y Podemos, seguidos del propio PSOE). No obstante, “la coalición tiene salud de hierro” pues la estrategia de Sánchez frente a la imputación de su socio prima mantener el Gobierno pese a la investigación sobre la financiación de Podemos, por más que los barones socialistas teman que el apoyo a Iglesias les desgaste y pregunten “¿a qué esperas, Pedro?”…… si Ciudadanos además está dispuesto a mirar para otro lado con el fin de aprobar los Presupuestos es obvio que hay gobierno social-comunista para rato, por débil y poco recomendable que sea.

            Por lo que respecta a otros asuntos cabe citar que la juez eleva al TS el caso del magistrado del TC detenido por indicios de malos tratos; que Justicia tumba la ley estrella de la ministra Montero y retira el proyecto del “sólo sí es sí” por su inconsistencia, un nuevo choque en la coalición gubernamental sin lugar a dudas; que tres españoles mueren y uno desaparece en un accidente de barranquismo en los Alpes suizos; que el Barça sufre una histórica derrota con el Bayern, 2-8, y queda apeado de la Champions de forma humillante en cuartos de final; que uno de cada cinco pisos turísticos regresa al mercado del alquiler; que, según Álvarez de Toledo, la portavoz del PP en el Congreso, “un partido no debe ser una estructura militar”; que encallan los contactos para renovar el CGPJ ya que PSOE y PP siguen sin pactar los nombramientos; y que los Reyes visitan Menorca por primera vez desde que son reyes con el objetivo de promocionar el maltrecho turismo y sus productos tras el “mazazo” de la  pandemia, recibiendo el calor de los ciudadanos en todos los lugares que visitaron, coreando consignas como “¡Menorca tiene Rey!”, mientras por la tarde una marcha a favor de la Monarquía recorrió Mallorca, en tanto que, según GAD3, la mayoría de españoles prefiere la Monarquía Parlamentaria, un 56´3%, frente a la República, el 33´5%, y más de la mitad considera positivo el legado de Juan Carlos I aunque desaprueba su marcha y cree que perjudica al Rey.  

            Y del exterior, destacar que EEUU entra en campaña con Trump en guerra contra el voto por correo; que el líder bielorruso, Lukashenko, acorralado por una presión popular histórica, apela a Rusia y agita el fantasma de una intervención militar y se aferra al poder, mientras Putin expresa su apoyo al dictador; que, según Bolton, ex asesor de Seguridad Nacional del Presidente de EEUU, “Trump puede abandonar la OTAN antes de las elecciones”; que Israel cierra un histórico pacto de paz con Emiratos Árabes, auspiciado por EEUU, y suspende la anexión de Cisjordania, lo que cambia el tablero de Oriente Próximo; que arranca la Convención Demócrata estadounidense bajo el temor del voto oculto a Trump; que el tráfico de pateras crece en el Canal de la Mancha (unas 4.000 han llegado a las costas británicas en lo que va de año, el doble que en 2019) y Londres pide a París que intensifique los controles, cuando la realidad es que la cuarentena impuesta por Reino Unido a los viajeros procedentes de Francia es lo que provoca el caos; y que Bruselas teme el cierre de fronteras y pide coordinación, mientras varios gobiernos ordenan restricciones internas por el auge generalizado de casos de coronavirus, entre ellos Reino Unido que extiende las cuarentenas obligatorias a nuevos países, mientras la UE reclama que la respuesta sea “proporcionada”, o Alemania que impone registros sanitarios en sus fronteras a países con alta incidencia de covid como España.

                                    Jorge Cremades Sena

jueves, 13 de agosto de 2020

INDECENTE DOBLE RASERO

 

                        El juez imputa a Podemos por financiación irregular, investiga al partido como persona jurídica por la presunta existencia de una “caja B” e imputa a una parte de su cúpula, citando al jefe de la consultora Neurona, mientras busca ramificaciones en Brasil y sospecha de Monedero. En definitiva, el juez imputa al partido de Iglesias y a parte de su cúpula por malversación y administración desleal. ¿Les suena eso de las presuntas “cajas B” y la malversación en el seno de los partidos políticos? Si no es así o ya lo han olvidado basta darse un paseo por las hemerotecas para conocer los ríos de tinta vertidos sobre el PP o sobre el PSOE en sus peculiares mochilas de corrupción....y, por supuesto, para recordar lo que decían los dirigentes de Podemos al respecto o lo que los dirigentes populares o socialistas manifestaban cuando era el contrario el imputado. Si además analizamos lo que los dirigentes de los partidos imputados decían para defenderse, podríamos deducir que a los partidos políticos y a sus ilustres dirigentes les importa un pimiento resolver la corrupción y que sólo la utilizan como arma arrojadiza para minar al contrario poniéndose muy dignos cínicamente cuando dentro de sus propios partidos practican idénticas conductas intolerables. Es más, esta indecente forma de proceder cada vez es más eficaz, al extremo de que ha sido capaz de hacer triunfar una moción de censura y el pertinente derribo de un gobierno, el de Rajoy, en base a las investigaciones judiciales por presuntos casos de corrupción y al acoso mediático-político de los partidos de la oposición, que hoy gobiernan, al entonces gobernante Partido Popular. Un indecente doble rasero de medir que los ciudadanos no debiéramos permitir por mera salud democrática. Si además del asunto de la “caja B” de Podemos, añadimos el oscuro asunto del “caso Dina”, por el que el juez estrecha el cerco sobre Iglesias, actual Vicepresidente del Gobierno de Sánchez, por presunta denuncia falsa, y cita como testigo al ex abogado de Podemos que denunció públicamente que la investigación era “un montaje” y quiere saber si el líder "morado" y su ex asesora simularon delitos para basar su campaña electoral en las “cloacas del Estado”, la gravedad del asunto es mucho mayor aún, pues Podemos, partido gobernante, se enfrenta a dos casos judiciales de envergadura. En efecto, además del “caso Dina”, el juez cita a declarar a la mano derecha de Iglesias y al tesorero del partido (¿les recuerda al PP?) y exige conocer el sueldo del líder y del resto de miembros de la dirección (¿les recuerda el asunto de los “sobres” del PP?), mientras los líderes podemitas arremeten ahora contra la justicia, manifestando que se ha abierto una “causa general” para sacarlos del gobierno, y contra los medios, por dar crédito y publicar noticias al respecto de su presunta corrupción, cuando, ante la presunta corrupción del PP, acosaban a sus dirigentes al más mínimo indicio de ser citados por un juez aunque sólo fuera a título de testigos y pedían la dimisión de su máximo dirigente, Rajoy, como Presidente del Gobierno. ¿Acaso lo que pretendían entonces no era sacar a Rajoy del Gobierno? y si ahora esa fuera la pretensión ¿cuál es el problema?. La realidad es que, al igual que el PP en su momento, Podemos está hoy siendo investigado por presuntos delitos similares a los que al final provocaron la caída de Rajoy, aunque los populistas consideren que la “caja B” del PP era para repartirse una pasta entre los dirigentes y su presunta “caja B” sea para fines solidarios. Si antes era saludable en base a la libertad de expresión publicar las presuntas conductas delictivas ¿por qué ahora no lo es cuando se publican las de Podemos? Por cierto, entre otros asuntos, se acaba de publicar que Podemos cargó de forma irregular 15 contratos a una subvención, mientras el Tribunal de Cuentas detecta 384.646 euros fuera de lo previsto en la ayuda estatal de seguridad, mientras el juez investiga si Monedero percibió alguna comisión de su partido el 28-A. Por si acaso, los podemitas dicen que, en todo caso, el ex abogado de Podemos, consiguió las pruebas de forma irregular y piden que se archive la causa….¿no es la misma estrategia que utilizan todos para intentar eludir sus presuntas conductas delictivas?.

            Pero lo grave no es que los dirigentes de Podemos apliquen este doble rasero basándose en el principio de que la derecha es intrínsecamente corrupta y la izquierda intrínsecamente buena; lo grave es que el PSOE guarde silencio ante estos presuntos delitos en el ámbito de Podemos, mientras la oposición reclama que comparezca en el Congreso. Lo grave es que ahora Sánchez no exija ejemplaridad a su socio de Gobierno, a su Vicepresidente, y se niega a valorar la imputación de Podemos y a una parte de su cúpula, escudándose en su “máximo respeto” a las decisiones judiciales, cuando no lo hacía si el investigado era el Gobierno de Rajoy y él estaba en la oposición. Es más, Sánchez, como Presidente del Gobierno, esquiva el ataque frontal que Podemos hace a la Justicia para defenderse, aunque evita respaldar a su socio limitándose a pedir respeto a la independencia judicial….¿por qué no hacía lo mismo cuándo el investigado era el PP o cuándo era el PSOE de Andalucía? ¿Entonces no era lo correcto pedir respeto a la independencia judicial y ahora sí? En fin, lo tremendamente grave es que Sánchez tenga ahora un doble rasero con su socio Iglesias con el único objetivo de salvar la coalición de Gobierno y permanecer en el poder, diciendo, tras la imputación de miembros de la cúpula de Podemos por la presunta “caja B”, que “esta investigación está en manos del Poder Judicial, por lo tanto, máximo respeto a la independencia de los jueces” (declaración que cualquier demócrata podría suscribir, pero en todos los casos), cuando, tras la imputación de miembros de la cúpula del PP en 2014 por la presunta “caja B” de los populares, decía “Rajoy debe asumir responsabilidades, porque es injusto que los españoles aún no sepan lo que ha pasado con la contabilidad” (fin de la cita, que diría Rajoy). Cabe preguntarle ¿Por qué era injusto que los españoles no supieran lo que ha pasado con la contabilidad del PP y ahora es justo que no sepan lo que pasa con la de Podemos? ¿Por qué Rajoy, como máximo líder del PP tenía que dejar el Gobierno ante los presuntos delitos de su partido e Iglesias no tiene que dejarlo siendo el máximo líder de Podemos? En fin, un indecente doble rasero de medir las cosas que los ciudadanos jamás debiéramos consentir aunque sólo fuera por mera higiene democrática.

            Entretanto prosigue la expansión de la pandemia mientras expertos y juristas urgen crear una norma para imponer restricciones contra los brotes y que no se siga actuando por parte de CCAA y Ayuntamientos como en el ejército de Pancho Villa. Y, mientas las autoridades sanitarias de la UE sugieren a España que adopte más medidas, se confirman más de 3.000 contagios diarios y 73 muertos el fin de semana por Covid-19 en esta segunda oleada, negada por el Ministerio de Sanidad, en tanto que Defensa comienza la instalación de un hospital provisional de apoyo frente al Clínico de Zaragoza, pues Aragón triplica las muertes por coronavirus en una semana. Por su parte Madrid prepara un protocolo para geriátricos ante esta posible segunda oleada de contagios, mientras Galicia prohíbe fumar en la calle si no hay distancia social y Andalucía, Castilla-La Mancha y Castilla y León analizan con sus expertos la medida y los países europeos aumentan los controles a los viajeros españoles o desde España (Alemania y Grecia exigirán test de coronavirus a los que lleguen desde nuestro país y ya son 15 naciones las que les obligan a guardar cuarentena), cuando se conoce que España es el país que peor ha colaborado con la sanidad privada durante la crisis de Covid-19, ¿prejuicios ideológicos del gobierno social-comunista de Sánchez? Ya en su día Podemos puso el grito en el cielo cuando Amancio Ortega, de forma altruista, donó a la Sanidad pública medios para mejorarla…. pues, ya se sabe, el totalitarismo comunista prefiere la miseria y la enfermedad dentro de lo público a la opulencia y la salud dentro de lo privado.

            Y mientras la OCDE avisa de que España está perdiendo el tren de la recuperación económica y alerta de que la economía española no se está recuperando cuando en el resto de países ricos la evolución es positiva, y la epidemia fuerza una bajada del alquiler en las grandes ciudades (las rentas caen por primera vez en más de un lustro ante la mayor oferta por el confinamiento y el trasvase de pisos turísticos, según los grande portales inmobiliarios), los rebrotes frenan la Bolsa, que es la que más cae de Europa. En fin, la ruina económica está servida. Por su parte el Gobierno, que no tiene ni un duro y está a la espera de que lleguen los fondos europeos (rescate lo llamaban en la anterior crisis), patina en su intento de hacerse con los 14.000 millones de euros de los ahorros de los ayuntamientos, mientras Colau se suma a la rebelión de los alcaldes y complica su plan de hacerse con semejante efectivo. En efecto, Hacienda trata de sofocar la rebelión de los alcaldes y el Ejecutivo ofrece a los ayuntamientos pagar el coste financiero de sus ahorros, en tanto que Barcelona y Valencia, junto a otros ayuntamientos populares y alguno socialista, se oponen al decreto de Hacienda y ponen en apuros su convalidación en el Congreso, donde, al final, el Gobierno negociará este pacto con la FEMP, cuyo Presidente, Abel Caballero, dice al respecto “pediría a algunos partidos que se documenten primero”.

            En otro orden de cosas, con los Reyes y sus hijas ya en Mallorca, donde reciben a las principales autoridades de las islas, la Familia Real visita en Petra la casa natal y el museo de Fray Junípero Serra, donde Felipe ensalza el legado español en América y dice que el santo siempre será “admirado y valorado”. Una aparición pública de los Reyes en familia y con absoluta normalidad tras la salida de Juan Carlos de España, siendo recibidos con calurosa bienvenida en Mallorca, donde Felipe VI recibe a Pedro Sánchez para el tradicional encuentro veraniego de la Jefatura del Estado con la Presidencia del Gobierno. Tras dicho encuentro, preguntado Sánchez sobre el paradero de Juan Carlos, dice que revelarlo corresponde a la Casa del Rey con lo que traslada la responsabilidad de hacerlo a la Corona con el argumento de que “somos instituciones distintas y tiene que ser la Casa Real o el propio afectado quienes comuniquen estas cuestiones”. Entretanto Torra, que plantea celebrar las elecciones catalanas el 15-N (aunque en plena guerra con ERC preferiría convocarlas el 18-S, antes de ser inhabilitado por el TS), dado que los rebrotes de virus han obligado a la Generalitat a retrasar los comicios previstos para octubre, exige el cese del letrado del Parlament por acatar la doctrina del TC respecto a la Monarquía Constitucional.

            Por lo que respecta a otros asuntos cabe citar que el Banco de España afirma que jubilarse después de los 65 años no compensa; que Bildu baraja designar a Otegi como senador tras la anulación de su condena sin que éste condene a ETA; que Competencia plantea multar con 47 millones a 22 consultoras por repartirse concursos públicos, pues, al parecer, los directivos pactaban quien debía ganar y el resto del cartel acudía con propuestas falsas, planteando en los e-mails “hay que presentar ofertas de cobertura que den el pego”; y que el magistrado del TC, Fernando Valdés, ha sido detenido por violencia de género, lo que ha generado verdadera conmoción en el alto Tribunal, al parecer la Guardia Civil, a petición de los vecinos, se personó de madrugada en el domicilio de Valdés tras una fuerte discusión con su mujer y, tras declarar, el magistrado quedó libre.

            Y del exterior, destacar que Tijanóvscaya, líder de la oposición en Bielorrusia, se refugia en Lituania; que China redobla el pulso con EEUU y la presión en Hong Kong, donde ya hay colas en los quioscos para apoyar la libertad, pues comprar el diario Apple Daily se ha convertido en símbolo de apoyo a las libertades; que Biden elige a la senadora Kamala Harris como su vicepresidenta y Trump carga contra ella como “número dos” de los demócratas por “falsa y radical”; que los partidarios de Evo Morales dejan Bolivia sin oxígeno, pues las protestas bloquean las calles e impiden que los suministros lleguen a los hospitales; que la Iglesia venezolana corrige a la oposición e insta a votar contra Maduro; que la economía del Reino Unido sufre el mayor batacazo de toda Europa ya que el confinamiento hunde el PIB más del 20% y lleva al país a la recesión; que el Gobierno de Líbano dimite en bloque tras la catástrofe de Beirut, forzado por las protestas cuando se había formado hace sólo seis meses; y que Putin da por buena la vacuna rusa anti covid-19 sin concluir los ensayos y afirma que estará disponible en enero, asegurando que una de sus hijas ya se la ha inoculado, mientras los expertos dudan de que sea segura y eficaz.  

                                    Jorge Cremades Sena

lunes, 10 de agosto de 2020

UNA EVALUACIÓN INDEPENDIENTE

 

                        En plena ebullición de escalada de rebrotes de coronavirus, Simón, la voz autorizada del Gobierno en asuntos sanitarios, niega una segunda ola de contagios mientras, entre otros, Castilla y León aísla a los 32.000 habitantes de Aranda de Duero por el aumento de casos, el gobierno del País Vasco cree que ya estamos ante una nueva oleada “con el virus igual de letal que en marzo”, más de veinte países europeos ya ponen restricciones a los viajeros procedentes de España, Aragón sufre una ola de contagios entre los sanitarios como en lo peor de la pandemia, España es ya el país de Europa Occidental con más infectados por coronavirus, la transmisión del virus se ha duplicado en el país en dos semanas, los ingresos por covid en hospitales se cuadruplican en un mes, los centros sanitarios se pertrechan ante la proliferación de brotes, las medidas de confinamiento afectan ya a doce provincias españolas y España supera los 314.000 casos convirtiéndose en el país europeo que más casos tiene. Son indiscutibles señales de alerta, cuando sólo en una semana se detecta más de un centenar de nuevos brotes y los focos activos ya suman más de 580 en todo el país con casi 7.000 casos, que siguen creciendo de forma preocupante. Y mientras Simón insiste en negar esta segunda oleada de contagios, Sanidad comunica 1.683 casos nuevos y actualiza la cifra con 4.088 que no estaban registrados, en tanto que Madrid localiza altos niveles de coronavirus en las aguas residuales de 28 zonas de la región. Así las cosas, la Justicia limita a siete días el confinamiento en Aranda de Duero, reduciéndolo a la mitad, Aragón se dispone a vigilar “casa por casa” que se cumple el confinamiento, mientras se publica que Simón dio datos falsos sobre los asintomáticos de Madrid en medio de una nueva guerra de cifras entre la Comunidad Madrileña y el Ministerio de Sanidad. Por su parte Moncloa no desclasificará los informes del virus para evitar conflictos diplomáticos, pues en los documentos, al parecer, hay alusiones negativas a las políticas de China, EEUU y Venezuela. Todo un cúmulo de preocupantes circunstancias en pleno descrédito de un Gobierno que nos mintió sobre el ya famoso inexistente “comité de expertos” con que decía avalar sus políticas sanitarias. Lo cierto es que, a tenor de los datos, se tiene la sensación de que un sistema que rozó el colapso nos pone de nuevo en jaque con esta segunda oleada, por más que Simón y Sanidad lo nieguen….pero ya nadie les cree, mientras Carlos Vidal, Profesor de Derecho Constitucional en la UNED, sostiene, ante el balance autonómico de la lucha contra el covid-19 durante esta cogobernanza (en realidad cada uno hace lo que considera oportuno), que “a veces, las autoridades públicas rehúyen la responsabilidad propia y exigen la ajena”, cuando ya no hay duda alguna de que con el mando único se produjeron graves errores, entre otros, de suministro. No en vano, ante los pésimos datos de la evolución de la pandemia en España, la élite científica se pregunta “¿cómo es posible que España se encuentre ahora en esta situación?” y pide una auditoría nacional de la gestión del virus para conocer toda la verdad de la misma, al extremo de que veinte expertos han publicado una carta en The Lancet, la más prestigiosa publicación de investigación médica internacional, pidiendo que se compruebe los fallos en todos los sistemas para afrontar la enfermedad. En definitiva, los especialistas en salud pública reclaman una evaluación “independiente” (realmente científica y no el invento de chapuza del lamentable “comité de expertos” inexistente) de la crisis y critican los errores cometidos, afirmando que los índices de contagios y de mortalidad no corresponden al nivel de la Sanidad española, que sitúa a nuestro país a la cabeza de Europa en número de contagios. Lo que está en juego es la vida y la salud de los ciudadanos, asunto que debiera estar siempre muy por encima de cualquier otra consideración política, territorial o administrativa.

            Mientras tanto, paradójicamente, seguimos enredados en el inoportuno debate Monarquía-República que buena parte del Gobierno y los secesionistas, sus avalistas, han puesto encima de la mesa, al extremo de que Sánchez, al final, ha tenido que contener en el PSOE la campaña antimonárquica mediante carta a su militancia pidiendo la defensa plena de la Constitución y del Rey para abortar que sectores de su partido secunden a Podemos. Al parecer, el Gobierno apoyaba la salida de Juan Carlos de Zarzuela pero no del país y tras una reunión del Rey Felipe con su padre surgió la resolución de marcharse al extranjero, siendo el deterioro de la Corona en las encuestas el detonante de la medida. Y mientras el CIS de Tezanos agitará el debate del modelo de Estado en plena ofensiva contra la Corona (el barómetro de septiembre preguntará sobre la reforma constitucional), Podemos, cogobernante con el PSOE de Sánchez, pide que Felipe VI y Carmen Calvo, la Vicepresidenta, comparezcan en el Congreso; en tanto que el Parlament de Catalunya desafía al Tribunal Constitucional y al Rey con que “Cataluña es república” pasando de las advertencias de los letrados de que ello supone desobediencia al Constitucional. Es la patética realidad de un Gobierno bicéfalo a la deriva con posiciones irreconciliables sobre temas de Estado, mientras la oposición, por boca de Casado, sostiene que “Felipe VI es el mejor Jefe de Estado que puede tener España y lo vamos a defender”, pues “la Monarquía parlamentaria es la garantía de la unidad nacional y de la convivencia” y considera “una broma” que PSOE y Podemos den lecciones de ejemplaridad a la Casa Real. Una patética realidad gubernamental, al extremo de que Iván Redondo y Carmen Calvo tuvieran que negociar con Zarzuela al margen de Podemos para evitar filtraciones, estando en contacto durante meses para buscar una salida al Rey Emérito, de cuyo paradero siguen las especulaciones, entre ellas, que desde Vigo marchó a Abu Dabi en un Global 6500 con bandera de Malta de la compañía TAG. Por otro lado, sobre el Emérito, asegura Luís María Ansón, periodista y académico de la RAE, que un sector de la izquierda puso en marcha en 2019 una operación contra él y que “Don Juan Carlos se ha ido profundamente dolido”.

Y mientras Felipe VI, tras reaparecer después de la marcha de su padre para recibir al ministro de Exteriores de Uruguay, marcha a Mallorca con Leticia y sus hijas para reunirse en el Palacio de Marivent con Doña Sofía, dos sondeos sobre lo que piensan los españoles de la Monarquía Constitucional vienen como anillo al dedo. Según NCReport, España apoya al Rey Felipe, quien, junto a su madre, la Reina Sofía, es el mejor valorado de la Familia Real, el 78´3% considera que ha actuado bien al distanciarse de su padre y el 71´3% avala la decisión de Juan Carlos de trasladarse fuera del país. Y, según SigmaDos, los españoles elogian el reinado de Juan Carlos I pero piden que responda ante la Justicia, un 41% de votantes del PSOE no quiere a Podemos en el Gobierno, el 54% de los españoles (entre ellos los cuatro de cada diez votantes socialistas) piden que Iglesias salga del Ejecutivo, Felipe VI logra una valoración muy superior a la de cualquier político y el 56% aplaude su labor durante la pandemia, mientras los ciudadanos partidarios de la Monarquía sacan diez puntos a los que prefieren la República.

Entretanto se conoce que, según informe del Tribunal de Cuentas, Podemos trucó sus cuentas al detectar gastos irregulares y facturas sin justificar por casi 500.000 euros en las subvenciones solicitadas por el partido en los comicios del 28-A. Facturas irregulares que sacan a relucir la caja B del partido de Iglesias, que no ha podido acreditar el gasto de 425.000 euros de la campaña, existiendo pagos de consultoría de los que no se ha demostrado su realización. Y se publica que Antiblanqueo ya avisó en mayo a la Policía de los pagos de Podemos a la consultora Neurona. No extraña pues que en el PSOE crean que Podemos usa al Rey para tapar sus irregularidades contables por lo que los socialistas acusan a Iglesias de “lanzar una cortina de humo” con sus ataques a la Corona. Lo que extraña es que Sánchez no exija a su Vicepresidente que rectifique o, en caso contrario, que le cese “ipso facto” pues es insólito que un gobierno sea mitad monárquico y mitad republicano…..o monárquico por la mañana y republicano por la tarde. Un Gobierno que, por cierto, eleva el techo de gasto por encima de los 20.000 millones, una subida record, y que presentará los Presupuestos a finales de septiembre, mientras Trabajo prepara un subsidio para 550.000 parados sin prestación alguna (gobierno, patronal y sindicatos negocian un pago de 430 euros mensuales para los desempleados que agoten todas las ayudas en plena pandemia)….. ¿pero no se había aprobado ya la renta básica para quienes carezcan de recursos para sobrevivir? Y todo ello en una situación económica deplorable que, hoy por hoy, nos aboca a una España subsidiada. Una España que recibirá en 2021 hasta 30.000 millones de ayudas europeas y la llegada de más fondos dependerá de la rapidez en ejecutar los proyectos, mientras cunde la alarma en el sector del ocio y se prevé que seis de cada diez locales cerrarán por el covid-19, en tanto que con el adiós a las verbenas en esta nueva normalidad (o anormalidad, como prefieran) se acaba con las orquestas que entran directamente en bancarrota.

Y por si fuera poco, en medio de todo este embrollo, los alcaldes se rebelan contra el pacto entre Gobierno y la FEMP, pues ediles de todos los partidos, salvo del PSOE, se reúnen contra el plan para repartir el superávit municipal, ya que el pacto entre PSOE y el Ministerio de Hacienda no convence a casi nadie. Entretanto, los ediles del PP, que se reunirán hoy en Madrid, se niegan a entregar los ahorros de sus ayuntamientos a Hacienda y los socios nacionalistas de Sánchez amenazan con tumbar la medida en el Congreso, una medida que la Ministra de Hacienda sacó adelante sólo con los votos de los ediles socialistas (ni siquiera el de Podemos que se abstuvo) y gracias al voto de calidad del Presidente de la FEMP, el socialista Abel Caballero, que incluso dice que “el acuerdo de la FEMP es mejorable” (vamos que no le gusta ni a él, que lo aprobó) aunque se justifica con que “nadie planteó una alternativa”. Y es que eso de que habrá 5.000 millones a fondo perdido para los que entreguen sus remanentes no gusta a nadie, mientras el PP acusa a Sánchez de “confiscar” así el ahorro de los ayuntamientos.

Por lo que respecta a otros asuntos cabe citar que los incendios forestales golpean a Galicia y a la provincia de Alicante; que la banca española blinda sus cuentas ante la incertidumbre, por lo que las seis principales entidades provisionan 14.700 millones, el doble que en 2019; que los alumnos madrileños que usen el móvil en clase podrán ser expulsados; que el diputado Ignacio Garriga será el candidato de Vox en las elecciones catalanas y manifiesta “queremos liderar la oposición al independentismo”; y que se ahogan 50 migrantes cuando intentaban llegar en dos pateras a Canarias, convertida en la puerta mortal de Europa, pues el mar se traga a un migrante por cada veinte que consiguen llegar a las islas.

Y del exterior, destacar que el virus enmudece Miami, siendo ya Florida uno de los epicentros de la pandemia en EEUU; que la primera Fiscalía Europea, un organismo sin precedentes en la Historia de Europa, vigilará los fondos y el IVA; que Trump topa contra una oposición creciente a su intento de controlar el BID, pues quiere colocar por primera vez a un estadounidense al frente del Banco Interamericano de Desarrollo, pero la UE y Argentina, a las que acaba de unirse Chile, maniobran para evitarlo; y que tras la dantesca explosión en Beirut la llama de las protestas prende en Líbano con violentos enfrentamientos entre la policía y los manifestantes llenos de ira popular en medio del caos, mientras el presidente libanés sugiere que “un misil” pudo causar la explosión y mientras la Comunidad Internacional se moviliza para ayudar al país prometiendo 252 millones de euros en ayudas de emergencia, pero la oleada de furia y protestas pone al gobierno libanés contra las cuerdas al extremo de que ya han dimitido dos ministros.

                                    Jorge Cremades Sena