Siendo malo en
democracia que un gobierno sea inoperante a causa de su escaso apoyo parlamentario
(por ello cuando esto sucede el pertinente gobierno desamparado por sus socios
suele convocar elecciones anticipadas), es peor aún, nefasto y peligroso diría
yo, que en tal desamparo decida operar utilizando argucias (que siempre las
hay), aunque estas fueran legales, con el objetivo de burlar las mayorías
parlamentarias, que decidieron sus pueblos soberanos, para imponerles por la
puerta falsa y de forma poco transparente determinadas políticas no respaldadas
por ellos en las urnas, siendo la peligrosidad extrema si dichas argucias
atentan contra la soberanía nacional y además afectan a asuntos de vital
importancia o esencial trascendencia. Tan peligroso que estas prácticas
autoritarias y poco democráticas, suelen ser la antesala de regímenes
totalitarios. La Constitución Española sostiene que la soberanía nacional
reside en el pueblo español y que son los representantes del mismo, elegidos
democráticamente, los depositarios de esa soberanía en las Cortes Generales: el
Congreso de los Diputados y el Senado. Y la composición de ambas cámaras
legislativas tras las últimas elecciones generales es la que es: ningún grupo
político ni coalición gubernamental con suficiente mayoría en el Congreso y
mayoría absoluta, incluso cualificada, del PP en el Senado. Guste o no guste es
lo que hay….y todos lo sabían y lo saben antes y desde que cambió el Gobierno
gracias a una moción de censura, legal y legítima por supuesto. Malo pues si el
gobierno surgido de la moción es incapaz de sacar adelante su proyecto
minoritario y sobrevive sin convocar elecciones de forma inoperante (afectará
finalmente a cuestiones económicas, sociales o de otro tipo sectorial), pero pésimo
si además, no conformándose con políticas gestuales y de márketing, pretende
ser operativo e imponer sus políticas minoritarias burlando a las instituciones
soberanas (afectará a la esencia de nuestra propia democracia). Por ello es
preocupante que el Gobierno, tras los bandazos e incoherencias gubernamentales
en muchos asuntos y las ocurrencias y proclamas propagandísticas de políticas
irrealizables, pretenda ahora una argucia, por legal que sea (si es que lo es),
para desbloquear su proyecto de Presupuestos (el asunto más trascendental cada
año) a base de burlar el papel del Senado (dónde él y sus socios son flagrante
minoría y obviamente lo vetarían) y utilizar sólo la pírrica mayoría
parlamentaria del Congreso (si es que todos los socios se ponen de acuerdo)
para sacarlos adelante. En efecto, una enmienda a una norma de formación de
jueces en violencia de género permitiría la reforma de la ley de estabilidad
presupuestaria y, al parecer, es lo que piensa hacer Sánchez, mientras su socio
Iglesias defiende el mecanismo como “completamente reglamentario”. Yo me
pregunto, por reglamentario que fuera, ¿entonces para qué está el Senado, para
saltárnoslo a la torera cuando nos interesa?.
Aunque es cierto que tal argucia no es la primera vez que se utiliza,
semejante burla al Congreso vulnera nada menos que catorce sentencias del TC,
pues reformar una ley con una norma sin conexión, como es el caso, supone “una
infracción de la legalidad parlamentaria”, mientras el PSOE, de momento, elude
comprometerse a acatar el dictamen de los letrados de la Cámara y los juristas
avisan que la “argucia” de Sánchez choca con el Tribunal Constitucional, por lo
que el PP pedirá a dicho Alto Tribunal que paralice su entrada en vigor. Y digo
yo, ¿no sería lo más decente y democrático convocar cuanto antes elecciones
generales?
Por otro lado, Sánchez propone
eliminar el aforamiento para delitos ajenos a la política, una medida que exige
reformar la Constitución, y por tanto mayoría cualificada, y que, en todo caso
no afectaría a actos de corrupción cometidos en el ejercicio del cargo. Vamos
una milonga o cortina de humo, para adelantarse a una propuesta ya presentada
por Ciudadanos en el Congreso. Y mientras tanto Moncloa monta un acto al
Presidente para celebrar, como dice algún medio, cien días de dimisiones,
rectificaciones, rebelión de jueces y fiscales, amenazas a los medios por
desvelar plagios de su tesis….y la irresponsabilidad de anunciar ahora una
reforma constitucional en plena ofensiva del populismo y el secesionismo. No en
vano muchos analistas consideran que Sánchez idea esta inviable reforma de la
Constitución para tapar su tesis doctoral (curiosamente el mismo día que
estalló el caso de su tesis decidió plantear este pintoresco cambio exprés de
la Carta Magna) sobre la que el CEO de Plagscan dice “a nosotros nos sale un
21% de coincidencias, no un 0´96%”, mientras los socios de Sánchez aprovechan
la apertura del “melón constitucional” para exigir que se vote en referéndum,
que se incluya la autodeterminación y que se suprima el “blindaje” al Rey, en
tanto que Casado rechaza la propuesta de reforma exprés porque “no es lo
urgente” y manifiesta que “no vamos a morder el anzuelo de los aforamientos” y,
en todo caso, apoya eliminar todos los aforados, los 250.000, y no sólo los
políticos como propone el Gobierno, planteando además que se aplique el 155 en
Cataluña porque “ya no hay margen para la negociación”, mientras estudia “que
las competencias de Educación estén centralizadas en el Estado”. Y es que,
además, la Ministra Celaá no se toma en serio el Informe de la Alta Inspección
y lo descalifica afirmando que no tiene “rigor científico” y que no lo hará
público. En dicho Informe, demoledor, algunos libros de texto catalanes
sostienen, entre otras cosas, que “España es responsable de todos los
contratiempos de Cataluña” y detalla cómo muchos manuales escolares “crean una
Historia ficticia e irreal”, mientras el PP, que admite no haber hecho nada
cuando llegó el informe a manos del Ministro en su día, pide ahora por boca de
Casado que el Estado recupere competencias, y Ciudadanos ve un “escándalo” que
se ocultara el documento y, por tanto, llevará el caso al Congreso. Y mientas
Celaá, yendo más allá que su antecesor del PP, tilda de “censura” vigilar el
adoctrinamiento en los manuales (repite que no hará nada y dice que quien quiera
que vaya “a los tribunales”) el principal sindicato de funcionarios la acusa de
“dejación de funciones” y los inspectores quedan “perplejos” con la ministra y
manifiestan que “hay que actuar”, recordándole su sindicato que la existencia
de “un solo libro de texto” que vulnere la Constitución (esa que desde su
minoría parlamentaria quiere reformar Sánchez) ya es razón suficiente para
intervenir, en tanto que los libros dan por hecho que “el actual modelo
autonómico está agotado” (no me extraña, con semejantes irresponsabilidades lo
raro es que todavía estemos figurando como un Estado y que en su territorio no
hayan aparecido ya varios totalmente independientes). Ya ven, según Celaá, que
quien quiera vaya “a los tribunales”….aunque, según algunos de sus colegas de
gobierno, como Borrell y Batett, si los tribunales deciden encarcelar a los
presos por presuntos graves delitos supone una dificultad para hacer política
en Cataluña. En fin, sin más comentarios.
Por lo que respecta a otros asuntos
llamativos de este Gobierno desorientado, cabe citar que Exteriores
desaprovecha el Brexit para reclamar la soberanía de Gibraltar (el Gobierno
aparca su reclamación “para obtener las cosas más positivas posibles”, mientras
Dominic Rabat, el ministro británico para el Brexit, sitúa en manos de la UE la
responsabilidad sobre la negociación y dice “no convocaremos un segundo
referéndum”); citar también que Fomento se dispone a penalizar a los dueños de
pisos vacíos sean bancos, firmas o personas físicas; citar que la ministra
Calviño dice que “ahora” es un momento ideal para subir los impuestos (el
incremento del IRPF para los que ganan más de 140.000 euros sólo recaudará 400
millones y pagaría un 52% de cargas fiscales; y añadir citando que el Gobierno
anula un impuesto eléctrico y lanza un bono para calefacción cuando la luz es
hoy un 46% más cara que hace un año (la ministra Ribera anuncia que facilitará
las condiciones para que los consumidores vulnerables accedan a descuentos en
la factura, mientras el Gobierno baja los impuestos a las eléctricas para
contener un 2´5% el recibo de la luz, es la medida estrella para abaratar la
luz).
Y en medio de este mareante
maremágnum, prosigue el feo asunto de la famosa tesis de Pedro Sánchez,
conociéndose que el Tribunal de Cuentas alertó de los agujeros en el control
universitario y que la comisión de doctorado debió anular el tribunal “cum
laude” que calificó al hoy Presidente. En definitiva, mientras un ex profesor
de la UCJC dice que Sánchez “trasladó sus cursos de doctorado desde la
Complutense porque allí no le iban a regalar el título”, la empresa alemana
antiplagio que utilizó Moncloa para defender a Sánchez del presunto plagio,
acusa al Gobierno de manipulación, asegurando PlagScan, que para lograr un
resultado más beneficioso, el Ejecutivo utilizó filtros con los que manipuló
los porcentajes de plagio en la tesis doctoral, por lo que Moncloa cocinó el
Informe. Por su parte ABC desvela nuevos plagios y no rectifica lo publicado,
ya que la UCJC permitió lo que prohíben todas las universidades, desde Oxford a
la Complutense, como es presentar el trabajo ajeno como propio, suplantando al
autor original; incluir frases, párrafos o ideas de otros autores sin citar su
procedencia o autoría; no emplear las comillas en una cita literal; dar
información incorrecta sobre la verdadera fuente de una cita; el parafraseo de
una fuente sin mencionar la fuente; el parafraseo abusivo, aunque se mencione
la fuente; y el “autoplagio”, como es presentar un trabajo nuestro ya utilizado
como si fuera nuevo…..en fin, graves acusaciones que Sánchez debiera aclarar
ante la opinión pública o, en caso contrario, dimitir. Lo que sí tendrá que
hacer es explicar su tesis en el Senado, pues los populares piden su
comparecencia y el PP hará valer su mayoría (salvo que alguna argucia lo
impida) y forzará su presencia tras el pírrico veto de sus socios para que
hable en el Congreso.
Pero, como además, los bandazos
significativos de Sánchez han sido sonoros y han alcanzado incluso al futuro de
las pensiones, los jubilados y pensionistas, convencidos de que, caído el
nefasto Gobierno de Rajoy (así se lo habían vendido), sus pensiones se
revalorizarían con arreglo al IPC, vuelven salir a las calles ante la
pertinente frustración y generan una fuerte tensión en una protesta a las
afueras del Congreso. Asunto que Pablo Iglesias, el defensor de Sánchez, utiliza
cínicamente como plató propagandístico y, tratando de capitalizar las protestas,
se acerca al lugar dónde la policía contenía a los manifestantes para, rodeado
de cámaras, apoyar que las pensiones suban al menos con el IPC. ¿Pero no es el
Gobierno de Sánchez al que él apoya incluso para que siga vendiendo armas a dictaduras
asesinas, según su vocabulario al uso? Paradójicamente, los pensionistas se
revuelven contra el “gobierno social” y el Pacto de Toledo estalla mientras los
jubilados rodean el Congreso y piden garantizar por ley, tal como les prometían
desde la oposición, que sus pensiones se liguen al IPC (supondría 1.300
millones más por cada punto de subida….se olvidaban que aquellas promesas eran
sólo para minar al despiadado gobierno del PP), teniendo en cuenta que hasta el
mismísimo Sánchez les animaba en marzo a que salieran a las calles….Ahora, una
doble valla para apaciguar la tensión, controlada por la policía, le protege de
sus protestas contra su Gobierno, con consignas como “no se ven diputados del
PSOE”, mientras los manifestantes son aplaudidos por el mismísimo Pablo
Iglesias, su valedor gubernamental. ¿No les parece una burla grotesca a los
pensionistas y al resto de ciudadanos en toda regla?
Y en pleno desconcierto ciudadano
por todas estas pintorescas situaciones, aparece Aznar, Iglesias y Rufián para
ponerle la guinda. En efecto, Aznar niega la corrupción del PP en una
tormentosa sesión parlamentaria y se lanza al cuerpo a cuerpo con Iglesias y
con el lenguaraz Rufián, quien le pregunta al ex presidente de forma chulesca,
haciendo gala de su indecente estilo insultante, que si tiene vergüenza,
durante un duro enfrentamiento en la comisión parlamentaria que investiga la
presunta financiación ilegal del PP. Aznar exhibe así su vuelta al PP de
Casado, con quien estrena sintonía públicamente y con quien hará campaña, para
marcar contundentemente la línea de su partido ante los populismos y
secesionismos, diciendo a Rufián que “representa a un partido golpista que
quiere destruir la Constitución” y a Iglesias que “usted es un peligro para la
libertad y la democracia”.
En cuanto a otros asuntos también
cabría citar, al menos, que de nuevo Bélgica ignora la justicia española y se
niega a entregar al rapero Valtonic; que Cataluña vuelve al foro de financiación
con el resto de CCAA; que se hunden seis plantas del Ritz por las obras en el
edificio y provocan un muerto y once heridos; que se conoce que los Mossos sólo
detenían el 1-O a los portadores de banderas de España; que es asesinada en
EEUU Celia Barquín, una prometedora golfista española de 22 años, en un campo
de Iowa; que Borrell desvela que Trump le sugirió un muro en el Sahara para frenar
la inmigración; y que Bruselas conmina a Ryanair a cumplir la legislación
laboral del país donde opere.
Y en la Champions, cuya fase de
grupos se acaba de iniciar, el Barça noquea al PSV, 4-0, con triplete de Messi;
el Atlético de Madrid remonta, 1-2, ante el Mónaco; el Real Madrid gana, 3-0, a
la Roma; y el Valencia cae, 0-2, ante la Juve a pesar de su mayoría numérica
tras la expulsión de Cristiano por agresión a un contrario.
Jorge Cremades Sena
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