Una grave epidemia de
titulitis diabólica se ha cebado con los currícula de nuestros políticos y
amenaza con dejar a muchos de ellos inhabilitados para ejercer sus interesantes
cargos públicos, mientras, mediáticamente, otros temas de vital importancia
social y económica quedan relegados a un segundo plano. Tras la caída de
Cifuentes por su polémico master y las acusaciones contra Casado por presuntas
irregularidades o tratos de favor en el suyo, asunto que está hoy en los
tribunales, cae por idéntico asunto la Ministra de Sanidad, Carmen Montón, y
está en entredicho, no ya el master, sino la tesis doctoral del mismísimo
Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acusado, como su ministra cesada, de
plagio, entre otras llamativas irregularidades en la obtención del mismo. Por
su parte, medios y voceros, más o menos afines a uno u otro partido político,
así como sus militantes y simpatizantes, tratan, según les conviene, de
minimizar la gravedad de los hechos o exagerarla según si los afectados de la
titulitis diabólica son de los suyos o de los ajenos, incurriendo obviamente en
indecentes incoherencias y contradicciones al pasar de censores radicales a
defensores cínicos y viceversa, según los casos. Como ya sucedía con la
corrupción (al fin y al cabo este asunto también es corrupción), la apelación a
la presunción de inocencia y la petición de dimisiones inmediatas (presunción
de culpabilidad) son moneda de cambio utilizada según se trate de aplicarla a
los tuyos o a los contrarios, lo que, en términos generales, deteriora la
credibilidad de la clase política en su conjunto. En efecto, Pedro Sánchez,
que, durante el debate de la moción a Rajoy, había dicho, con razón, que en
Europa hay países donde se dimite por plagiar tesis doctorales, tras saltar el
“caso Montón” la defiende a capa y espada en el Senado y afirma que “está
haciendo un trabajo extraordinario y lo va a seguir haciendo”, mientras se
acumulaban las pruebas de plagio y las manipulaciones del máster de la ministra
y aumentaba la presión de cargos del PSOE y del Gobierno…..para, cuatro horas
después, encontrarse con la dimisión de Montón, afirmando “he sentido siempre
su apoyo; para que mi situación no influya le he presentado mi dimisión”, que,
obviamente, el Presidente acepta contestándole “tu decisión, valiente, te
honra”. ¿Es valiente y honroso dimitir cuando te pillan con el carrito del
helado? En fin, sin comentarios. La ministra cesada, ya sustituida por Marisa
Carcedo, miembro de la Ejecutiva del PSOE, como suelen hacer todos en estos
casos afirmaba hasta el final que tiene su conciencia tranquila, mientras
Sánchez, volviendo a rectificar, la deja caer, evidenciando la debilidad del
Ejecutivo (o el poco acierto de Sánchez a la hora de los nombramientos), que en
sólo tres meses ya ha perdido dos ministros por asuntos poco honorables y
gracias a la presión de la opinión pública. Por su parte Casado, no dará un
paso atrás y se confía al Supremo, que pregunta al fiscal si debe investigarlo,
en tanto que él presenta un escrito para probar su inocencia, alegando que no
cometió delitos y que, en todo caso, estarían prescritos. Ya ven, como sigamos
así, nos quedamos sin gobierno…..y sin oposición, visto el alto índice de
mortandad política de la titulitis diabólica.
Y cuando todo apuntaba a un futuro
algo más tranquilo tras la dimisión de Montón, salta una nueva alarma mediática
y política, al poner en duda Rivera la limpieza en la obtención del doctorado
de Pedro Sánchez, quien le declara la guerra por dudar de su tesis,
convirtiéndose así la titulitis diabólica en arma arrojadiza en una tensa
sesión parlamentaria de control de todos contra todos. Rivera le reprocha que
tras la dimisión de Montón “oculte” el trabajo pese a las sospechas de que él
no lo escribió y Sánchez estalla contra el líder naranja, manifestando que “su
pregunta es un lodazal”. Lo cierto es que, aunque Sánchez lo niega y amenaza
con llevarlo a los tribunales, se publica que Pedro volcó en su tesis textos
escritos con un miembro del tribunal evaluador, pues Juan Padilla firmó dos
publicaciones meses antes con Sánchez, plagiadas casi íntegramente y sin citar
en la tesis; que dicho tribunal estaba formado por “amiguetes”, “novatos” y “afines”,
pues tres miembros se acababan de doctorar, dos compartían con Sánchez
directora de tesis y uno, como se ha citado, había escrito un artículo con él;
que el tribunal le otorgó la máxima calificación “cum laude”; que también
plagió al Ministerio de Política Territorial de época de Zapatero, conteniendo
la tesis un párrafo plagiado y sin citar del mismo; que “fusiló” informes del
Gobierno de ZP y volcó en la tesis artículos suyos ya publicados; que su
trabajo se publicó como libro firmado por un asesor del ex ministro Sebastián,
quien confesó en un foro privado que Industria hizo el 90% del libro-tesis de
Pedro; y que catedráticos de Economía certifican que el contenido de la tesis “no
tiene calidad y ninguna revista de prestigio lo publicaría”…… En definitiva,
toda una serie de circunstancias y sospechas por lo que PP y Ciudadanos piden a
Sánchez que comparezca en sede parlamentaria para dar explicaciones, mientras
Podemos y los nacionalistas se prestan a que el Presidente no las dé y que se
limite a publicar la tesis, mientras la presión fuerza definitivamente a que se
haga pública para cotejar las acusaciones de plagio e irregularidades de que es
objeto, y Sánchez, que evita a los medios y zanja la polémica con mensajes en
Twitter y Facebook (al mejor estilo de Podemos), amenaza con acciones legales a
quien le acuse de plagio, en tanto que la Universidad afirma no ver
irregularidades en su obtención.
Tal ha sido el revuelo político y
mediático (esperemos que todo vuelva a su cauce) por este último episodio de la
titulitis diabólica, que hasta el objetivo estrella del Gobierno de Sánchez, la
exhumación de Franco (la convalidación del decreto-ley es aprobada en el
Congreso por 172 votos y la abstención de PP y Ciudadanos), ha pasado a un
discreto segundo plano en los medios, al quedar el “día histórico” del
Ejecutivo de Sánchez eclipsado por la crisis del currículum, mientras los
Franco empiezan el proceso contra el Gobierno. De momento pasa casi
desapercibida la decisión de un Congreso partido por la mitad, calificada de “cortina
de humo” por un lado (para ocultar otros asuntos de mayor interés) y de “insuficiente”
por otro (los bandazos e indecisiones sobre el futuro de El Escorial defraudan
a los propios socios de Sánchez). No extraña que ante la erosión del
Presidente, se genere cierta preocupación en el PSOE, que urge elecciones, ya
que el Gobierno no ha sido capaz, de momento al menos, de rentabilizar la
dimisión de Montón y creen que el “efecto Moncloa” se está dilapidando. Valgan
como aval los dos últimos bandazos de Pedro Sánchez, que se suman a los anteriores.
Por un lado España enviará definitivamente a Arabia Saudí las polémicas 400
bombas, que irresponsablemente la ministra de Defensa sacó a relucir
demagógicamente, pues Borrell dice ahora que las bombas no causan “daños
colaterales” y Podemos se olvida de que los gobiernos de España son asesinos
por vender armamento a dictaduras….¿ya no lo son?, cabría preguntarles. Por
otro lado el PSOE enfría ahora el cacareado incremento de las pensiones con
arreglo al IPC, una nueva rectificación del Gobierno que cambia de postura en
el Pacto de Toledo y se muestra abierto a introducir otras variables de
revalorización….¿ya no es perverso desvincular las subidas de pensiones al IPC?
En fin, una tras otra y suma y sigue.
Y por si todo lo anterior no fuera
suficiente, el independentismo recurre a la Diada para ocultar su división,
monopolizando los actos institucionales de la jornada y convirtiendo las
concentraciones en un clamor por la libertad de los presos, mientras Quim Torra
dice ante la prensa internacional “yo no puedo abrir las cárceles” y Borrell,
anterior azote socialista contra el golpismo catalanista, se suma a la Fiesta,
que debiera ser de todos los catalanes y no de la mitad de ellos, y, de alguna
forma, critica a Llarena por su decisión de mantener preventivamente presos a
los líderes del 1-O, diciendo en Estrasburgo que hay “otras maneras de prevenir
que se fuguen”, mientras el separatismo llena las calles contra el Rey y los
jueces. ¿Qué otras maneras prefiere Borrell? Supongo que Puigdemont estará
contento con esta declaración del Ministro Español de Asuntos Exteriores, que,
de alguna forma, da alas a los soberanistas al asegurar que le gustaría que los
políticos no estuvieran en la cárcel….a mí, y supongo que a muchísimos demócratas,
nos gustaría que no fueran golpistas y que no amenazaran mis libertades y
derechos. No obstante el Supremo no prevé liberar a los presos antes de que se
celebre el juicio (ya sólo faltaría de que todos se fugaran y se reunieran en
el exterior para seguir golpeando a España). Y mientras la Generalitat cifra en
un millón los asistentes a la concentración de la Diada, el Gobierno no ofrece
datos por primera vez (menuda forma de evitar la tradicional guerra de cifras).
Por otro lado, mientras Sánchez y el Presidente de la Federación de Fútbol, Luis
Rubiales, se reúnen y coinciden en negar que el partido Girona-Barça se juegue
en Miami para evitar que el partido se convierta en un altavoz del secesionismo,
tal como pretenden los golpistas, Javier Tebas, el Presidente de la Liga de
Fútbol Profesional les contradice y defiende el derby catalán en EEUU….ya ven,
siempre hay un roto para un descosido.
Por lo que se refiere a otros
asuntos cabe citar que una serie de expertos avalan la legalidad de las
inmatriculaciones de la Iglesia, unos 40.000 bienes según el censo del
Gobierno; que Interior acerca al etarra que intentó atentar contra Don Juan
Carlos; que un ex alto cargo de Gallardón ocultó 1´4 millones en las islas
Bahamas; y que Economía prevé más impuestos si no se aprueba la senda de
déficit, confirmando que habrá subida fiscal en los Presupuestos de 2019.
Y del exterior cabe destacar que el
hambre en el mundo repunta por el clima y los conflictos; que Macron da un giro
social con un plan contra la pobreza; que diez millones de ciudadanos viven en
zonas de situación de alerta en EEUU ante la llegada de Florence, un huracán
devastador; que el Papa convoca una histórica reunión ante la plaga de abusos y
cita para febrero en Roma a todos los presidentes de las Conferencias
Episcopales para buscar una solución global, poniendo así su plan antiabusos
con esta reunión histórica; y que, mientras Orban divide a los populares
europeos en su desafío a la UE, la Eurocámara inicia el trámite para quitar el
voto a Hungría (tres diputados del PP apoyan a Orban pese a la consigna de
abstenerse), por su parte Juncker afirma que “el populismo crece porque los
partidos tradicionales coquetean con sus ideas” y que “hay países que han acogido
sólo 28 refugiados y hablan de invasión islámica”…..y Luigi di Maio,
Vicepresidente del Consejo de Ministros de Italia, afirma que “no romperemos
con la UE ni destruiremos las finanzas públicas” ……en fin, ya ven, algo es
algo.
Por lo que respecta al futbol, al
margen de la polémica sobre ese Girona-Barça en Miami, cabe destacar que la
nueva España de Luis Enrique golea, 6-0, en Elche a Croacia, la subcampeona del
Mundial.
Jorge Cremades Sena
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