Trump plantea expulsar a
España de la OTAN si no eleva el gasto militar hasta el 5% del PIB, lo que pone
de los nervios a los socios populistas de Sánchez que con su peculiar pacifismo
ilusorio entienden que la defensa ante las amenazas de otros es un regalo
gratis de la naturaleza humana y no una necesidad que tienen los distintos
pueblos y Estados para mantener su libertad e independencia frente a dictadores,
que existen, y que se empeñan en someterlos por la fuerza. El mandatario
norteamericano, que sabe que no está establecido en la Alianza la expulsión de
un país-miembro, aunque sí su voluntaria salida, argumenta que España “va bien
y no tiene excusa” para no llegar a ese 5% del PIB de gasto en Defensa que “les
he pedido a todos que gasten…en vez del 2%” y “sólo hubo un rezagado, España”
por lo que “quizá deberían expulsarla”… Y, ante ello, el Gobierno minoritario
de coalición de Sánchez le responde que España es un socio “leal” de la OTAN y
se burla del aviso de sacarla de la Alianza, lo que califica de “otra
ocurrencia” del mandatario estadounidense, mientras la diplomacia, por un lado
alerta del ataque “inédito” de Trump, que Moncloa cree que “viene bien”, y, por
otro lado, alerta también de la gestión ideológica del asunto, pues “vamos mal
por el mundo”. La realidad es que los ciudadanos ya estamos hartos de
ocurrencias inéditas de unos u otros, a las que tanto Trump como Sánchez nos
tienen acostumbrados y son tan aficionados, y que, al final, sólo valen para
satisfacer sus egos personales, sin que ambos se den cuenta de que en este
mundo globalizado, inter-dependiente e inter-conexionado los contextos
geopolíticos son de vital importancia y salirse de ellos es, en el mejor de los
casos, pan para hoy y hambre para mañana. Ni Trump, por mucho dinero que ponga,
puede tratar a la UE y la OTAN como si fueran suyas o sus enemigas, ni Sánchez
puede actuar al margen de ellas por más imposición que le exijan sus socios
populistas minoritarios, defensores de un pacifismo ilusorio e inexistente, que,
de aplicarlo, como sucede a España, te deja fuera de juego e indefenso en los
ámbitos internacionales. Así las cosas, Jaime Malet, Presidente de la Cámara
Americana de Comercio, deja bien claro que “no es bueno tener con EEUU una
relación tensa, España no se lo puede permitir” y añade “es oportuno que el Rey
se implique en la relación de España con el Gobierno de Trump y eliminar
problemas políticos” pues “para que EEUU invierta en nuestro país hace falta un
entorno estable, seguro y energía más barata”…. Salvo en lo que respecta al
Rey, Jefe de Estado, cuyo papel político constitucional es muy limitado,
totalmente de acuerdo con Malet, pues, lamentablemente en España sobran las ocurrencias
ideológicas inéditas y faltan dosis de realismo, empezando por asumir lo que
somos y el contexto geopolítico al que pertenecemos, lo que llamamos Occidente,
cuyo bagaje de libertades, de democracia y de igualdad no tiene parangón a
nuestro favor con otros ámbitos geopolíticos y que, obviamente, anda amenazado
y necesita que lo defendamos con uñas y dientes, no hacerlo es preludio de un
futuro indeseable, y para ello, basta echarle un vistazo a los momentos que
vivieron nuestros antepasados.
Entretanto, frente a las excesivas
expectativas de Trump (y de Sánchez), el Nobel de la Paz se le concede a María
Corina Machado, opositora a la dictadura de Maduro en Venezuela, con lo que se
desnuda al ex presidente Zapatero que, con el beneplácito del gobierno de
Sánchez, desoyó la petición de la galardonada para que hiciera de altavoz contra
Maduro en Europa. Una vez más el Gobierno de coalición español, supongo que por
la presión de sus socios gubernamentales, que están de parte del dictador
Maduro, se coloca en el lado equivocado por meros intereses populistas e
ideológicos. La galardonada, que está colocada en el lado correcto, dice, nada
más recibir el premio y desde la clandestinidad que “este reconocimiento es un
impulso para conquistar la libertad”, objetivo que debiera asumir sin
paliativos todo gobierno o partido político democrático que se precie, y añade
“Maduro tiene que decidir, pero va a salir con o sin negociación”, “Venezuela
está en el umbral de la libertad y esto es una inyección”, “España pudo tener
en Venezuela un papel estelar, pero optó por callar; la historia juzgará”, “la
liberación de Venezuela traerá también la de Cuba y Nicaragua y tendrá
consecuencias en España”, “Maduro tiene que escoger, se va con negociación o
sin negociación, pero se va”, “Trump lidera el corte de los recursos del
narcotráfico al régimen y Maduro no controla a su Ejército”, “el premio lo
ganamos todos los venezolanos”… (palabras que cualquier demócrata podría
ratificar). Y mientras Corina dedica el Nobel de la Paz a Trump (en plena
declaración del alto el fuego en Gaza) y a todos los venezolanos (ansiosos de
recuperar la libertad), la Casa Banca critica el Nobel porque “antepone la
política a la paz”…..¡Lástima que esta España desnortada, esté, una vez más, en
el lado equivocado de la historia!
Y es que, por fin, Israel y Hamás
firman un acuerdo para la paz, auspiciado por Trump, que contempla la
liberación de los rehenes israelíes (muertos y vivos) por parte de la milicia
terrorista y la excarcelación de 2.000 presos palestinos por parte del Gobierno
israelí de Netanyahu, que, como venganza por el atentado cruel y sanguinario en
Israel perpetrado por los terroristas de Hamás (dejando 1.200 israelíes
muertos, más de 3.000 heridos y más de 200 rehenes llevados a la Franja)
invadió Gaza, apelando a su derecho a defenderse y usando desmesurada violencia
durante dos años contra los palestinos sembrando el horror en la Franja hasta
derrotar y descabezar a Hamás, que, al final, ha tenido que claudicar con este
acuerdo de paz (para muchos una rendición) que a regañadientes acepta también
Netanyahu, quien quería proseguir con la masacre, sin reparar en los daños
colaterales al pueblo palestino, hasta exterminar el grupo terrorista o
expulsarlo de Gaza. Un acuerdo, impuesto por Trump que celebran tanto israelíes
como palestinos, es decir, que celebran todos, mientras el ejército israelí
inicia los preparativos para la retirada, aunque seguirá manteniendo el control
del 55% de la Franja, a la que llegan miles y miles de palestinos huidos para
encontrarse con los escombros de sus casas a las que ni identifican, pero dicen
que “los escombros son parte de la patria a la que no renunciaremos”. Y,
mientras Netanyahu presume que sólo la combinación de fuerza militar y la
presión diplomática ha hecho posible el acuerdo y anuncia que “Hamás será
desarmado y la Franja será desmilitarizada por las buenas o por las malas”,
autoridades de Gaza agradecen a Trump su mediación en el conflicto y éste habla
del “principio de una paz duradera”. ¡Ojala que así sea! De momento, Trump
sella hoy la paz sin israelíes ni palestinos en un encuentro con más de veinte
mandatarios en la ciudad egipcia de Sharm el Sheij, al que asiste Sánchez
invitado por Egipto.
Y, regresando de nuevo a España, donde
Sánchez consigue sacar adelante a duras penas el decreto de embargo de armas a
Israel, que sus propios socios califican como “fake”, nos topamos con la cruda
realidad de la corrupción, pues decenas de mensajes confirman el dinero en B
del “caso Koldo”, mientras la UCO acredita el trasiego de efectivo en la sede
del PSOE, que Ábalos y su asesor Koldo pagaban gastos siendo él ministro y que
los viajes y regalos a mujeres eran constantes (mensajes como “voy con dos
chicas”, “espera, que dice Jose que vayan las dos” o “necesito pulseras….para
la puta”), el entonces ministro, tras uno de esos pagos de Koldo, lamentaba “si
lo pudiera deducir” y en la forma de repartir la trama el dinero negro a Ábalos
se dejaba claro: “apunta 1.800, jefe B, apunta 800, jefe A”, es decir, lo más
perecido a Alí Babá y los cuarenta ladrones. En fin, sin comentarios. Y en las
grabaciones inéditas de la investigación al Fiscal General del Estado se
muestran las estrategias de éste, de González Amador, de Almudena Lastra y de Miguel Ángel Rodríguez…..¡veremos
a ver como salen unos y otros de semejante enredo! Por su parte el juez Puente
da un rapapolvo a Cerdán por deslizar que la UCO ha filtrado cosas al PP y
descarta investigar a los agentes por las declaraciones de Tellado, quien
asegura que no se le filtró información alguna sino que así lo dedujo él. Y
mientras la Comisión de Venecia rechaza el sistema del Gobierno español de
elegir el CGPJ, Feijóo decide lanzar el órdago final a Sánchez en todo o nada contra
él, pues la citación parlamentaria en la “Comisión Koldo” responde a los datos que llegan al PP del
ámbito judicial y policial. Y mientras la amenaza de prisión sobrevuela la cita
de Ábalos y Koldo ante el juez esta semana, el ex ministro socialista Jordi
Sevilla dice que “el PSOE es ya el club de fans de Sánchez, es hora de otra corriente”,
“Sánchez abraza el populismo polarizado; un populismo de izquierdas de brocha
gorda”, “hay más agua de la que parece en el partido para la vuelta a un proyecto
socialdemócrata de diálogo” y “sobre la corrupción, los principios del partido
deberían obligar a entrar a saco en una investigación”.
No obstante Sánchez aguanta contra
viento y marea y convocará elecciones cuando Vox esté más fuerte, explotando el
momento de más debilidad de Feijóo y la falta de alternativa por la izquierda,
con la esperanza de que en el PP afloren discrepancias sustanciales como la que
ahora protagoniza Ayuso con el tema del aborto, que muchos consideran un regalo
gratuito al sanchismo, o errores de bulto en la gestión como en el cribado del
cáncer de mama en Andalucía. En todo caso, según NCReport, Moreno Bonilla
mantendría hoy la mayoría absoluta en Andalucía con Vox al alza, como en toda
España, pues la socialista María Jesús Montero, más sanchista que Sánchez, no
rentabiliza la crisis de los cribados sanitarios: los resultados serían, con la
mayoría en 55 escaños, PP, entre 57-59, cuando ahora tiene 58; PSOE, 26-28, cuando
tiene 30; Vox, 16-17, hoy tiene 14; Por Andalucía (coalición de Podemos, IU y
Sumar) mantendría sus cinco escaños; y Adelante Andalucía (la marca de Teresa
Rodríguez) 3 escaños, uno más de los que ahora tiene. En todo caso Feijóo ya se
prepara para la contienda electoral en medio de la salida de tono de Ayuso con
el aborto, diciendo a la oposición en la Asamblea “váyanse a otro lado a abortar”,
lo que obviamente utiliza el Gobierno de Sánchez como muleta para debilitar
ante la ciudadanía el liderazgo de Feijóo en el PP; quien, entre otras cosas,
promete bajar impuestos y cuotas a tres millones de autónomos y dice que “vamos
a recuperar la clase media”, limitar al máximo la residencia por “arraigo” a
los inmigrantes restringiendo las vías actuales de regularización “generalizadas
y sin control” otorgando a la raigambre un “carácter excepcional” para que deje
de ser un “atajo” y primando la inmigración de los “países seguros” (en fin,
todo un plan migratorio que presentará mañana en Barcelona, convencido de que
la migración será uno de los temas calientes de la campaña electoral).
Y en estas circunstancias los Reyes
presiden el desfile militar de la Fiesta Nacional, marcada este año por la
crispación y la incomodidad para el Presidente Sánchez, quien fue abucheado en
el desfile y evitó a la prensa y los corrillos antes de abandonar el Palacio
Real antes de terminar la recepción de los invitados; desfile al que Abascal
dio plantón en plena huida de Sánchez que refleja lamentablemente la
polarización política que estamos soportando los ciudadanos españoles. Es lo
que hay.
Jorge Cremades Sena
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