RECTIFICAR ES DE SABIOS, PERO….

                        Se dice, y con razón, que rectificar es de sabios, pero que rectificar permanentemente es de necios, y me temo que esto último es lo que sucede con el Gobierno de Sánchez, acertando sólo cuando rectifica. La última de las rectificaciones, que ha de sumarse a otras anteriores sobre otros asuntos, es para enmarcar. Me refiero a la defensa del juez Llarena ante la indecente demanda interpuesta por Puigdemont en Bélgica, que, finalmente, será asumida por Moncloa, como debe ser, pero lamentablemente después de que jueces y fiscales hayan clamado contra la “aberrante” indefensión en que el Gobierno pretendía dejar al instructor del “procés” con peregrinos argumentos. En efecto, el CGPJ solicitó al Gobierno dicha ayuda jurídica y Abogacía del Estado apoyó la iniciativa conminando a Justicia a que defendiera al juez y pidiendo al Ejecutivo contratar un letrado, pero, sorprendentemente, el Ministerio de Justicia se opuso a la propuesta, dejando solo al instructor del “procés” ante la Justicia belga, entendiendo que la demanda de Puigdemont contra él era por “actos privados” y que “en ningún caso” le defendería, salvo que el juez belga cuestionara su labor como instructor. Tan peregrina decisión desencadenó un lógico debate y un ambiente de malestar indiscutible: miembros del CGPJ y las asociaciones mayoritarias de la Magistratura alertaban de que la decisión gubernamental atentaba contra la soberanía jurisdiccional española; jueces del Supremo lamentan que Justicia deje vendido al instructor; los fiscales progresistas piden también ampararle; el CGPJ se disponía a contratar un seguro para cubrir los posibles costes…. Y finalmente Sánchez se ve obligado a rectificar y, corrigiendo a la Ministra Delgado, asegura que ya ha iniciado los trámites para garantizar la soberanía jurisdiccional española y defenderá a Llarena de la demanda civil interpuesta en Bélgica por Puigdemont contra él. Una rectificación que llega después de que Magistratura mostrara su “estupor” por el desamparo en que el Ejecutivo pretendía dejar al juez que instruyó el 1-O nada menos. Seguramente al considerar la demanda por “actos privados” (vamos, como si Llarena y Puigdemont hubieran tenido simplemente problemas personales) es que desconocían, no ya todo lo actuado tras el 1-O, sino que además en la citada demanda se sostiene que “España es uno de los Estados delincuentes, al igual que Kazajistán”, pues en la demanda de Puigdemont contra Llarena, de la que pretendía desentenderse el Gobierno de Sánchez, se describe España como una dictadura donde hay “represión” situándola “al lado de Kazajistán entre los estados delincuentes que se niegan a someterse a los principios que rigen los derechos fundamentales” (en fin, sin más comentarios). El Gobierno, aunque sea de esta impresentable forma, defenderá a Llarena contratando un bufete belga tras haber afirmado indecentemente que “no lo haría en ningún caso” y que la demanda a la que tenía que enfrentarse el juez era por “actos privados”. Y, mientras el PP le acusa de dar bandazos, argumenta que no se trata de una rectificación y que la demanda de Puigdemont está tan “trenzada” que es posible que no pueda separarse la instrucción del “procés” de las declaraciones del juez. El día que el Ejecutivo se entere, como la inmensa mayoría de españoles, del grave fenómeno al que nos enfrentamos y no se preste a paños calientes con tan peligrosos actores, otro gallo nos cantará sin lugar a dudas. 

            Entretanto, Puigdemont, supongo que contento, abandona Bruselas y viaja a Escocia para participar en un coloquio, mientras la tensión crece en Cataluña por los lazos amarillos, con episodios violentos cada vez más frecuentes como el de una mujer agredida por quitar los lazos al grito de “extranjera de mierda”, cuando incluso era española. Y es que Torra, el subalterno de Puigdemont, ya aviva el enfrentamiento ante el próximo juicio del “procés” y sin duda aprovechará la Diada y el aniversario del ilegal 1-O para agitar las calles, mientras los CDR lanzan ya un himno que insta a la violencia por la “república catalana”, preparando la “toma” de ayuntamientos e instituciones del 11-S al 1-O; el himno, basado en el musical “Los miserables”, dice “todo el pueblo cantará”, “lucharás a mi lado…si unimos nuestras fuerzas el enemigo no pasará”, en tanto que Puigdemont asegura que “la mayoría de los conflictos violentos se originan al negar la autodeterminación”. Por su parte los Mossos evitan unirse al Centro Antiterrorista Español e Interior les insiste desde hace un año para que se unan, pero la policía autónoma catalana no quiere modificar su sistema informático para no compartir datos, cuando la Ertzaintza lo hizo sin problemas en un mes.

            Y mientras la UE rechaza la presión de Italia para repartir 150 refugiados, atrapados varios días en un puerto en Catania, Cáritas y cincuenta ONGs censuran la expulsión “exprés” de los 116 inmigrantes desde Ceuta y el ministro Salvini dice tras dicha expulsión que “si lo hago yo soy un racista”….la realidad es que el inicial “efecto llamada” de España con el Aquarius (rectificado luego por Pedro Sánchez) atrae a unos 50.000 africanos desde Níger. Por otro lado Sánchez se salta los plazos y retrasa sin fecha los Presupuestos, iniciando un trámite de varios meses para reformar la Ley de Estabilidad Presupuestaria y regatear la mayoría del PP en el Senado e incumpliendo la obligación de presentar  ya la senda de déficit. Y es que Sánchez aborda el inicio del curso político como si se tratara de una campaña electoral, reuniendo al Gobierno en la finca toledana de Quintos de Mora (adonde llegó con su mujer en helicóptero) para hablar de temas de futuro y de reformas para varias legislaturas, dejando claro a sus ministros que agotará esta legislatura con la ayuda del BOE, pues “se puede gobernar con renglones torcidos” dado su escaso apoyo parlamentario, pero mostrándoles una agenda hasta 2030 ya que aspira a “trascender la presente legislatura”.

            En lo que Sánchez sí anda seguro, firme y decidido, sin titubeos ni rectificaciones, es en el asunto de la exhumación de los restos de Franco que finalmente saldrán del Valle de los Caídos 43 años después de ser allí enterrado, pues, según Carmen Calvo, “un dictador no puede tener una tumba de Estado en una democracia”. Sin duda Sánchez quiere apuntarse el tanto de haber sido él quien ha sacado al dictador de su tumba, aprovechando un mandato en dicho sentido del Congreso de los Diputados en la legislatura anterior. Y para ello, cómo no, lo hace mediante un decreto-ley, cuya urgencia justifica la Vicepresidenta Calvo porque “vamos tarde” y para la sociedad es “inaplazable” que no se exhumen ya. En definitiva, el Gobierno da 15 días a los Franco para decidir el destino de los restos o lo hará Moncloa directamente, mientras los nietos del dictador dicen que “nos haremos cargo de nuestro abuelo y no contemplamos El Pardo por seguridad”, añadiendo que “gastar dinero en contra de un gobierno es perder el tiempo”, aunque agotarán “todos los recursos legales” contra la exhumación. Y, según NCReport, el 61´7% de los españoles no ve una “prioridad” el traslado del Valle de los Caídos, cada vez más visitado últimamente,  mientras el 50´5% aboga por dejarlo como está.

            Por lo que respecta a otros asuntos cabe citar que el hiperliderazgo de Iglesias y Montero eclipsa a Podemos; y que el Corte Inglés llama a la unidad tras la salida de Gimeno, quien sale del Consejo con 8´7 millones de indemnización.

            En cuanto se refiere a asuntos del exterior cabe destacar que prosigue el éxodo de venezolanos cruzando diariamente cientos de ellos la frontera de Brasil ya que “aquí podemos comer todos los días”; que ha muerto John McCain, héroe de guerra y azote de Trump; que un tiroteo masivo en un torneo de videojuegos deja muertos y varios heridos en Florida; y que el Estado Islámico llama a la guerra biológica con bacterias, pues los yihadistas enseñan a sus seguidores cómo atacar con un microorganismo. Y todo ello en plena visita del Papa a Irlanda, que le recibe con reproches, en medio de la polémica por abusos sexuales en plena efervescencia; Francisco lamenta y denuncia en Dublín el “fracaso de las autoridades eclesiásticas al afrontar estos crímenes repugnantes” de abusos sexuales que avergüenzan a la comunidad católica y pide “normas severas”, mientras el primer ministro irlandés le exige que pase “de las palabras a la acción” y mientras un arzobispo, el ex nuncio del Vaticano en EEUU, acusa por carta a Francisco de encubrir los abusos y le pide que dimita, pues, según él, no actuó al menos en un caso de abusos del que fue avisado y, por su parte, el Papa cierra su viaje pidiendo perdón por los “crímenes” cometidos por el clero irlandés tras reunirse con las víctimas.

            Y en lo que respecta al fútbol, la selección sub-20 femenina quedan finalmente como subcampeonas del mundo al perder, 3-1, en la final del Mundial con Japón; y en la jornada de Liga Benzemá lidera con dos goles la victoria, 1-4, del Real Madrid en Girona, el Barça gana, 0-1, en Valladolid, el Atlético gana, 1-0, al Rayo, Sevilla y Villarreal empatan, 0-0, en la capital andaluza y el Valencia pierde, 2-0, con el Español en Barcelona. Y en automovilismo, Alonso sobrevive a un aparatoso accidente en Spa en el Gran Premio de Bélgica.

Jorge Cremades Sena