Aunque
con la que está cayendo no estamos ni para distracciones ni para demagogias
baratas o especulaciones innecesarias, es inevitable dejar de tener a Cataluña
en el horizonte ya que, aunque con la pandemia, el problemón del secesionismo
catalán totalitario está temporalmente algo eclipsado sigue estando ahí, vivito
y coleando, pues, al igual que sucede en España, parece que los ciudadanos no
están por la labor de dar un giro copernicano y prefieren que el desmadre
gubernamental siga siendo lo que guíe nuestro futuro hasta donde podamos
aguantar. En efecto, aunque Arrimadas ofrece a Illa, el ministro-candidato, una
coalición para evitar la reedición de un tripartito, mientras el PP se desmarca
y sólo apoyaría un pacto sin el candidato socialista (lo que es prácticamente
imposible), según NCReport, todo intento de cambiar la situación política en
Cataluña será en vano pues el famoso “efecto Illa”, buscado por el PSOE incluso
a costa de descabezar el Ministerio de Sanidad en plena ola de la pandemia, no
llega al nivel de poder lograrlo y, menos aún, con la estrepitosa caída de
Ciudadanos, lo que abocaría de nuevo a otro gobierno soberanista, que, sin
duda, pasada la refriega electoral, se llevaría a efecto, pues ya Puigdemont elude
criticar demasiado a ERC y arremete contra Illa, al que califica, no exento de
razón, como “uno de los peores ministros de Sanidad de la UE”, mientras
Iglesias, vicepresidente del Gobierno español, eleva al prófugo ex president a
la categoría de exiliado, equiparándole con los exiliados republicanos
españoles y, obviamente, generando una lógica polémica, pues, entre otras
cosas, en un estado democrático, como es el caso, quienes no comparecen ante
los tribunales de justicia o no acatan sus decisiones, no son exiliados, sino
prófugos de la Justicia, que debieran estar en busca y captura y repudiados
obviamente por el Gobierno democráticamente elegido en las urnas. Pero ya ven,
en España es diferente, y el Vicepresidente del Gobierno, con el beneplácito del
Presidente, que lo ha nombrado y no lo cesa, se permite considerarle como
exiliado político a pesar de haber encabezado un totalitario “procés” frustrado
por el que sus compañeros totalitarios, que sí tuvieron la decencia al menos de
comparecer ante los tribunales están pagando penas de no pocos años de prisión
por sus delitos cometidos y probados. En efecto, según NCReport, el no “efecto
Illa”, mejoraría los resultados del PSC pero no lograría cambiar el escenario
político en Cataluña, pues los resultados serían: ERC 20´5% de votos y 33
escaños, frente al 21´4% y 32 de 2017; JxC 19´2% y 32, frente al 21´7% y 34;
PSC 18´7% y 25, frente al 13´9% y 17; Ciudadanos 11´1% y 14, frente al 25´4% y
36; Comunes de ECP 7´3% y 8, frente al 7´5% y 8 del CEC; PP 6´7% y 8, frente al
4´2% y 4; CUP 6´1% y 8, frente al 4´5% y 4; y VOX 6% y 7, que se estrenaría
como fuerza parlamentaria en el Parlament de Catalunya. De acertar más o menos
la encuesta, está claro que los catalanes siguen optando por no dar ese giro
copernicano que llevaría a Cataluña a la necesaria normalidad constitucional en
vez de apostar por soluciones totalitarias radicales. Y en estas condiciones
Cataluña encara la campaña electoral sin saber ni siquiera qué día se va a
votar, aunque los jueces mantienen de momento la fecha del 14 de febrero (el
Tribunal Superior prevé dictar la sentencia definitiva como tarde el 8 de
febrero). Illa, que según Iceta dimitirá antes del 29 de enero, se compromete a
dejar el cargo de ministro cuando empiece la campaña, mientras los jueces abren
la vía a retrasar el 14-F si hay más restricciones, aunque por “interés
público” mantienen esta fecha. Por su parte Pere Aragonés, Presidente en
funciones de la Generalitat, sostiene que “para evitar sospechas de
ilegitimidad lo mejor es retrasar el 14-F” y su partido, ERC, resucita el
“frente común” con el prófugo Puigdemont para evitar el “efecto Illa”. Mientras
tanto se conoce que el Tribunal Constitucional respaldará al Supremo sobre el
“procés”, debatiendo los magistrados el primer recurso por las condenas, con lo
que el Alto Tribunal apoyaría la competencia del Supremo en el famoso 1-O para
“dar una respuesta ante Europa”, rechazando el recurso de la ex consejera de
Gobernación Maritxell Borrás y escenificando así firmeza ante Bélgica, que dio
la razón a Puig y puede dársela a Puigdemont…… Peliagudo asunto que un país
amigo y socio como España en la UE no avale las tesis democráticas y las
resoluciones de la Justicia española, enmarcada obviamente en la Justicia
Europea; un asunto que debiera resolverse cuanto antes, pero, obviamente, se
hace complicado cuando el propio Gobierno español, y especialmente su
Vicepresidente, entiende que la situación de Puigdemont es la de un exiliado
político.
Y
con Cataluña en el horizonte y con toda España en plena tercera ola de
contagios del coronavirus, Illa, ante su inminente dimisión como Ministro de Sanidad,
se instala ya en Cataluña y dejará de ser ministro sin rendir cuentas al
Congreso, incumpliendo su compromiso, con la complicidad de Batet, para no
comparecer en plena tercera ola, mientras Moncloa valora que siga como ministro
hasta que el TSJC decida, ya que el objetivo es no desactivar su tirón
electoral hasta saber con certeza si los comicios se aplazan o no, lo que, al
final, dependería de si se aumentan las restricciones o no. De entrada todo
apunta obviamente a que no se aplazarán los comicios ya que, tras la decisión
de la Justicia de mantenerlas, porque existe “un interés público muy intenso”,
el asunto depende del Ministerio de Sanidad y obviamente al ministro-candidato,
como al PSC, no le interesa retrasarlos. Por su parte la Generalitat agitará el
miedo a la covid para frenar el 14-F y presionará hasta el final a la Justicia
ante la llegada del pico de contagios, mientras Sánchez lanza en Cataluña el
primer acto de campaña del ministro-candidato, a quien la oposición critica de
electoralismo al no actuar ante la crisis de esta tercera ola. En definitiva,
por las razones que sean Illa se va y deja un caos autonómico ya que la
inacción del ministro descoloca a los consejeros territoriales, cuando la cepa
británica complica más aun la lucha contra la pandemia y se acercan los días más
duros para los hospitales (centros de Madrid y Cantabria detectan que un 20% de
sus casos son ya de la nueva variante) y algunos médicos de UCI relatan que “son
ya muchos meses de batalla y no ves el final”, en tanto que los distintos
Presidentes autonómicos van endureciendo las restricciones en la medida de sus
posibilidades legales y llaman a la población a auto-confinarse voluntariamente
ante la inacción del Ministro de Sanidad y los expertos urgen a un
confinamiento obligatorio ante el colapso inminente de las UCI. Y por si fuera
poco todo esto, mientras Moncloa frena el toque de queda, según algunos, para
salvar el 14-F, Madrid suspende la vacunación por falta de dosis, pues la
imprevisión en el plan para vacunar por parte del Ministerio de Sanidad está al
borde del caos y ya son diez las CCAA las que se encuentran a punto de agotar
las reservas ya que apenas quedan para tres días. Así las cosas, Madrid, como
otras autonomías, avanzan hacia el confinamiento “de facto”, ya que “de iure”
sólo podría imponerlo el Gobierno, y prohíbe las visitas en casa, pide
teletrabajo, adelanta cierres y toque de queda….intentando atajar esta tercera
ola que crece desbocada en contagios, hospitales, UCI y muertes hacia un destino
sin rumbo y sin dirección alguna convincente. “Pedimos a los ciudadanos que se
rebelen ante la lentitud y la ineficacia del Gobierno", dice Igea, el
Vicepresidente de Castilla y León; es el grito de la impotencia ante tanta
desidia.
Una
falta de control en todos los sentidos que, para colmo, favorece la picaresca
para adelantarse en la vacunación, llegando a salpicar no ya a demasiados
cargos públicos civiles sino a la propia cúpula militar, generando al final una
verdadera crisis en el Ministerio de Defensa, uno de los pocos que se salvan de
la quema en cuanto a la gestión se refiere. En efecto. El Jemad se vacuna al
margen de los protocolos de vacunación establecidos y la ministra Robles pide
explicaciones al Jefe de la cúpula militar, aunque no lo cesa ni a él ni a su
cúpula militar, mientras Podemos exige su destitución inmediata, generando el
asunto decepción en los militares y crisis en el ministerio, hasta que, al
final, el Jefe de la cúpula militar dimite por el escándalo de la vacunación,
ya que, a todas luces, Villarroya se inmunizó sin tener aun derecho, mientras
unos cien sanitarios del Ejército se quedaban de momento sin vacuna. Y Robles
obviamente se ve empujada a aceptar el cese tras fulminar Marlaska por idéntico
motivo al enlace de Interior con los militares. No obstante el Jemad dimite
pero defiende haberse vacunado (el Estado Mayor puso la vacuna a más de 300
militares), asegurando que siguieron órdenes aprobadas en el Ministerio de
Defensa y que el Emad recibió los viales antes de inmunizar a los sanitarios
castrenses…..otro conflicto más que tendrá que intentar solucionar el próximo
Jefe del Estado Mayor, quien podría encontrarse con una verdadera cascada de
dimisiones, mientras públicamente se desencadena un debate sobre la conveniencia
o no de que Jefatura de Estado, Gobierno y otros gobernantes, cúpula militar,
etc etc debían tener prioridad para la vacunación frente a otros grupos, tal
como han hecho en otros países incluso públicamente para dar ejemplo……sin
entrar en este debate, que tiene sus pros y sus contras, en todo caso era tan
fácil como haberlo recogido en los protocolos de vacunación, lo intolerable es
que éstos no sean aplicados a rajatabla.
Y,
como los conflictos no cesan, el Poder Judicial se defiende ante los ataques
que está recibiendo por parte del Poder Ejecutivo, y, por acuerdo del pleno del
CGPJ, dieciséis de los veintiún vocales alertan al Congreso de que atenta
contra la separación de poderes y “lamentan profundamente” que PSOE y Podemos
impidan que les escuche el Parlamento, urgiendo a la Cámara Legislativa para
que frene la reforma que anuncia el Gobierno y alertando de que tramitar dicha
reforma acelerada es inconstitucional, por lo que pide a la Mesa del Congreso
que lo reconsidere antes de que sea demasiado tarde; mientras tanto Lesmes
mantiene el pulso al Ejecutivo y seguirá nombrando jueces pese a estar en
funciones, al igual que Sánchez obró cuando en funciones estaba. Entretanto,
otro pulso de las CCAA complica a Sánchez controlar el fondo europeo, forzando
a Hacienda a darles más poder en la gestión de los mismos; la ministra de
Hacienda retira su reglamento de “cogobernanza” tras la queja general de autonomías
del PSOE, PP y nacionalistas, aunque María Jesús Montero advierte a los
consejeros autonómicos en la primera reunión sobre el dinero y les dice “tenéis
que cambiar el chip”. En fin, conflicto tras conflicto en este gobierno de
coalición mal avenido, como el evidenciado en la bronca entre cuatro ministros
por las manipulaciones atribuidas a Iglesias, en la que el ministro de Inclusión,
Escrivá, afeó a la titular de Trabajo, Díaz, la manipulación del debate de las
pensiones por parte de Podemos y ésta respondió diciendo “a mí no me digas
nada, que yo no soy de Podemos”, un reciente desencuentro durante una reunión
convocada por Calviño a la que asistió también María Jesús Montero, en la que el ministro clamó “no hay derecho”
y Díaz, que milita en el PCE, rechazó formar parte de la estrategia de Iglesias;
no en vano, Teresa Rodríguez, hoy diputada del Parlamento andaluz y otrora
dirigente podemita en Andalucía, contesta a las acusaciones de transfuguismo
que le hacen los acólitos de Iglesias “soy tan tránsfuga como la ministra
Yolanda Díaz, que abandonó IU”…..es lo que se cuece en el gallinero populista
dominado por Iglesias.
Por
lo que respecta a otros asuntos cabe citar que el juez rechaza imputar por alteración
del orden público al vecino de Iglesias; que Marlaska utiliza los acercamientos
exprés de presos etarras tras enviar estos una carta-tipo y logran beneficios
sin pedir perdón ni ofrecer colaboración alguna, por lo que víctimas y oposición
reclaman al Gobierno el sentido de las misivas; que Cifuentes culpa a la
universidad de falsificar el acta que la favoreció y sostiene que presentó el
trabajo aunque no hay una sola prueba; que los jesuitas admiten que 81 menores
sufrieron abuso sexual desde 1927; que, según Rocío Monasterio, presidenta de
Vox en Madrid, “tenemos delante una
situación social que nos va a explotar”; que Susana Díaz ve en su relevo un “tinte
machista”, se aferra a otras primarias y dará batalla ante Ferraz; que, según
José Bogas, consejero delegado de Endesa, “los precios de la luz no se van a
mantener así de altos”; y que el responsable electoral de Podemos, Tirso
Nohales, ex encargado de las producciones audiovisuales, afirma ante el juez
que desconoce cualquier trabajo de la consultora mejicana, añadiendo “jamás oí
hablar de Neurona en toda la campaña de 2019”.
Y
del exterior, destacar que Johnson sospecha que la cepa británica es más mortífera
que la original; que son detenidas más de 2.500 personas en Rusia durante las
manifestaciones por Navalni; que el BCE considera que se agrava el riesgo de
una nueva recesión económica; que Anne Hidalgo apunta a rival de Macron por la
Presidencia de Francia; que la UE pide acelerar la vacunación y acuerda
restringir los viajes para evitar el colapso por la cepa británica, aislando
regiones para evitar el avance de las nuevas cepas; que Biden se estrena con
una ambiciosa ofensiva ante la pandemia y cambia toda la gestión de Trump
contra el Covid-19, se plantea sacar de la pobreza a doce millones de personas
y sube a 15 dólares por hora el salario mínimo de los funcionarios; que
Portugal elige a su Presidente en el peor día de la pandemia en el país, y, con
una abstención similar a la de 2016, da una clara victoria a Marcelo Rebelo de
Souza, reelegido sin necesidad de una segunda vuelta; y que la UE presiona a
los laboratorios ante los retrasos de la vacuna, viendo el Presidente del
Consejo en riesgo los objetivos de inmunización, pues Europa sólo ha inyectado
dosis al 2% de su población, cuando en Reino Unido es al 10%, por lo que
eurodiputados y ONG exigen conocer los contratos confidenciales y, en plena
guerra con las farmacéuticas, la UE amenaza con denuncias si no se cumplen los
plazos de entrega.
Fdo.
Jorge Cremades Sena
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario, gracias