La
manifiesta incapacidad de este gobierno de coalición social-comunista presidido
por Sánchez para entenderse y llegar a acuerdos internos entre sus propios
miembros y, menos aún, con la oposición parlamentaria, está consolidando una
preocupante parálisis gubernamental e institucional que pone en grave riesgo la
convivencia social y política cuando ello debe ser básico para el buen
funcionamiento del propio sistema democrático. En efecto, las múltiples
discrepancias entre los ministros socialistas y los comunistas, arropados por
radicales y secesionistas, están frustrando las expectativas de miles y miles
de ciudadanos en plena crisis económica ya que exhibiendo múltiples batallitas
internas y postureos demagógicos lastran la agenda social al chocar sendos
grupos por asuntos importantes como el salario mínimo, las pensiones o los
desahucios, mientras otros asuntos ya superados, como los ERTEs, o anunciados a
bombo y platillo, como las ayudas a fondo perdido a las empresas obligadas a
cerrar, no llegan con normalidad a sus destinatarios cada vez más cabreados por
un Ejecutivo que a todas luces funciona de cara a la galería pero no para
remediar los problemas reales que sufren los ciudadanos en su conjunto. Y, en
efecto, el choque incomprensible entre Sánchez, que como Jefe de Gobierno tiene
el deber de superarlo, y Pablo Casado, que como Jefe de la Oposición debe
colaborar a ello, provoca una intolerable parálisis institucional ya que el
entendimiento entre sus respectivos partidos, PSOE y PP, es imprescindible para
desbloquear la renovación y funcionamiento de determinadas instituciones
básicas del Estado como el GGPJ, el Defensor del Pueblo o RTVE que llevan
demasiado tiempo en situación de interinidad o provisionalidad sin que se
perciba el mínimo acercamiento político para que sus órganos de dirección sean
renovados tal como exige la propia Constitución. En definitiva, parálisis
gubernamental e institucional que está lastrando la higiene democrática en
nuestro país, máxime cuando hasta la primera institución del Estado, la
Jefatura, es puesta en entredicho desde el propio gobierno (o parte del mismo)
pues el PSOE es incapaz de aplacar el ataque de Podemos a la Corona. Así las
cosas, no extraña que Iglesias exija a Sánchez que desautorice a Calviño en el
salario mínimo, respaldando a la ministra Yolanda Díaz contra el plan de
congelación del SMI de la vicepresidenta hasta que acabe la pandemia, que
critique la subida a 35 años la base del cálculo de pensiones propuesta por el
ministro Escrivá, o que apriete a Hacienda para imponer su plan antidesahucios,
asuntos todos ellos que duermen el sueño de los justos a la espera de que los
propios ministros decidan al final al respecto o que Sánchez se incline por dar
apoyo a las propuestas de los socialistas o las de los comunistas. Y, así las
cosas, no extraña ya que Sánchez y Casado se dediquen durante 45 minutos a
hablar por teléfono para constatar el bloqueo del CGPJ y que Moncloa pueda
seguir dedicándose a criticar el obstruccionismo y el líder del PP reafirmarse
en sus condiciones para renovar los vocales del Gobierno de los Jueces sin el
concurso de Podemos y tal como siempre se hizo mediante el pacto PSOE-PP que es
el que garantiza la mayoría cualificada requerida para hacerlo, sin necesidad
de otros por más que éstos, socios en el Gobierno con el PSOE, le exijan a
Sánchez su participación en las negociaciones y, ante semejante situación, PSOE
y Podemos decidan acelerar el asalto a la independencia Judicial pidiendo
tramitar por vía urgente una reforma que limite las funciones del CGPJ mientras
que los jueces se preparan para responder a “una ofensiva sin precedentes” y
desoyendo al Gobierno se dispone a nombrar los cuatro nuevos magistrados…..si
el Gobierno de Sánchez en funciones actuó como le vino en gana ¿qué razón puede
ahora alegar para que el Gobierno de los Jueces vea mermadas sus competencias
por estar en funciones?. Lo grave es que el deterioro gubernamental e
institucional es ya de tal envergadura que las grietas del Ejecutivo en materia
socio-económica se visualizan y exhiben en los pasillos del Congreso de los
Diputados con una tensa discusión entre Iglesias y Montero, al extremo de que
la ministra de Hacienda le espetó al vicepresidente “no seas cabezón”, mientras
en este último pleno del año el PP lanzaba en el Hemiciclo su ataque más duro
al Gobierno y el Vicepresidente Iglesias se ausentaba visiblemente de su escaño
y abandonaba la Cámara desairando a la ministra Laya quien en ese momento
puntualizaba, ante una pregunta sobre Venezuela, que la política exterior era
competencia del Presidente del Gobierno y de ella misma como ministra de AAEE.
Ya ven, el Gobierno, por llamarlo de alguna manera, no tiene ya reparo alguno
en exhibir su crisis en pleno caos ante la Navidad, mientras Illa permite a las
CCAA imponer nuevas restricciones a su aire limitándose a dar consejos
simplemente. Pero no pasa nada, las encuestas que tiene Moncloa, así como otras
publicadas, constatan la caída de Podemos y el “liderazgo” de Sánchez mientras
la comisión del pacto de gobierno queda relegada a las comidas entre presidente
y vicepresidente, ya que “Iglesias pierde votos cada vez que la monta”…..¡pues
nada, que la sigan montando entre unos y otros mientras la parálisis gubernamental e institucional
revienta y la ciudadanía sufre las consecuencias!
Entretanto
el Tribunal Supremo ordena repetir el juicio a Otegi por intentar reconstruir
la ilegalizada Batasuna, un juicio por el que el líder abertzale cumplió
cárcel, y, ¡cómo no!, otra discrepancia interna más en el Ejecutivo, pues,
mientras el Gobierno espera que su “situación personal” no afecte a los
Presupuestos, Podemos y Bildu, valedores de los mismos, califican de sabotaje
la decisión unánime de la Sala del Alto Tribunal, ataque al que se suma el PNV,
otro valedor de las Cuentas y del Gobierno social-comunista que atacan al
Tribunal por mandar al banquillo a Otegi, el líder de Bildu, quien reaparece,
rodeado de su cúpula abertzale, todos ellos ex condenados, para manifestar
todas las maldades de este Estado represor en el que, según él mismo, cada vez
los abertzales tienen más peso y por ello se les persigue. Ya ven, está claro,
para los socios variopintos de Sánchez, cuando la Justicia les da la razón se
hace Justicia…..cuando no, se les persigue. Por otro lado el Congreso da luz
verde a tramitar la ley que limita las funciones del CGPJ y los socios de
Sánchez celebran con insultos a los jueces el inicio de dicha reforma, mientras
el Presidente llama a Casado, pero rechaza sus condiciones para negociar,
chantajeándole con anular en la práctica al Gobierno de los Jueces si no lo
renueva, mientras el ministro Campo avisa al PP de que “está agotando los
plazos y el Estado no lo va a permitir”.
Y
mientras una mujer con 104 años vence al covid tras pasar catorce días en la
UCI del Gregorio Marañón y apela a que “salud que no falte”, sólo cuatro
millones y medio de españoles, un 10% de la población, ya ha pasado la
infección, por lo que el estudio de seroprevalencia confirma que España está
lejos de alcanzar la protección de grupo, pues sólo uno de cada diez ha pasado
la enfermedad, en un país que, pese a ello, cuenta con menos medidas de
protección mientras la subida de la tasa de contagios, tras el puente de
diciembre, anticipa la llegada de una tercera ola. En efecto, a diferencia de
Alemania, un Estado Federal, donde Merkel ha pactado con los Estados alemanes
federados una respuesta conjunta frente a la amenaza de un repunte contagioso,
en España, a una semana del inicio de las Fiestas Navideñas, seguimos en el
caos más absoluto, pues Sanidad, es decir el Gobierno Central, se limita a
invitar a las CCAA a limitar movilidad, horarios y reuniones, con lo que cada
Autonomía decidirá al respecto eligiendo los comensales y los cierres que considere
oportunos. Es obvio que Sanidad pasa la pelota a las CCAA en pleno aumento de
casos, mientras algunas de ellas ya se plantean endurecer el plan para Navidad,
Baleares y Canarias actúan ya y Cataluña, País Vasco y Andalucía lo estudian.
Por
lo que respecta a otros asuntos cabe citar que Celaá irrita a los rectores al
imponer una prueba de acceso para extranjeros; que el Gobierno asume la
“diplomacia” de Iglesias con el chavismo en Bolivia; que Ayuso blinda la
enseñanza concertada en la Comunidad de Madrid ante la ley Celaá; que el TS
elimina el límite temporal para reclamar que los etarras indemnicen; que
Baleares cancela las extraescolares con excepción de los talleres en catalán;
que el Gobierno se impone y libra de ir a la cárcel a los piquetes violentos,
avanzando en la derogación de los castigos fijados en el Código Penal a los
piquetes de huelga por coacción a trabajadores; que el ex jefe de la Policía
señala en el caso Kitchen a la cúpula del PP; que Garamendi pone un sueldo de
240.000 euros a Fátima Báñez, provocando críticas en la CEOE porque se aseguró
que la ex ministra no cobraría; que el juez acorrala al tesorero de Podemos
diciendo “no sabía usted que Neurona no tenía trabajadores” y que el arquitecto
de la sede del partido que se duplicó alardeó del “bajo precio”; que Fiscalía
instó en 2018 a Hacienda a investigar al Emérito, alertando de que podrían
derivarse denuncias por “delito fiscal” y que su posible regreso podría
retrasarse hasta después de Reyes, mientras el rechazo a una comisión de
investigación en el Congreso enfrenta a Sánchez y sus socios, al votar el PSOE
el rechazo a la misma junto a PP, Vox y Ciudadanos; que una reforma legal
abaratará hasta un 13% el recibo de la luz pero a costa de subir los
carburantes; que Oliu dejará las funciones ejecutivas en el Sabadell tras 21
años; que Competencia para el reloj de la fusión del superbanco de CaixaBank
reclamando más información sobre la concentración en el negocio de pymes,
planes de pensiones y sucursales; y que Génova evita apoyar a Ayuso para que
lidere el partido en Madrid, argumentando García Egea que “siempre hemos
defendido que los afiliados elijan a su dirección”, en tanto que Almeida se
opone igualmente a que la Presidenta de la Comunidad presida el partido y pide
una “tricefalia” que se reparta el poder entre la alcaldía, el gobierno
regional y la presidencia del PP, no obstante Ayuso seguirá la “vía Aznar” ya
que su equipo le diseña una estrategia para reforzar su liderazgo fuera de
Madrid como hizo el ex presidente desde Castilla y León.
Y
del exterior destacar que Navalni, líder opositor ruso, dice “no he sido el
primero ni seré el último envenenado por Putin”; que comienza la vacunación
anticovid en EEUU; que Guaidó, Presidente de la Asamblea, asegura “mi
presidencia es la defensa de lo que queda de democracia en Venezuela”; que se
imponen penas de hasta treinta años para los cómplices de la matanza de Charlie
Hebdo; que Biden acusa a Moscú de “hackear” el Tesoro de EEUU; que los
senadores republicanos dejan solo a Trump al reconocer a Biden; que Alemania se
confió y ahora tiene que parar habiendo sido ejemplar al contener la primera
ola de la pandemia pero sucumbir ante la segunda ola; que la UE ve más cerca el
acuerdo sobre el Brexit pese al escollo en el sector pesquero; que Bruselas
sanciona a España por gestionar mal los fondos del AVE, detectando la Comisión
irregularidades en proyectos pagados con dinero europeo, por lo que aplica
penalizaciones de hasta el 25%, concluyendo la auditoría que los criterios para
adjudicar los contratos de varios tramos no fueron transparentes; y que la UE
acelera el inicio de la vacunación antes de fin de año, adelantando el comité
científico al lunes la reunión que decidirá si aprueba el fármaco de Pfizer, lo
que permitiría empezar las vacunaciones antes de que acabe 2020, mientras el
cierre de tiendas y colegios se extiende en Europa, cuando la campaña de
vacunación ya ha empezado en Reino Unido, EEUU, Canadá e Israel, en tanto que
Reino Unido, Francia, Alemania y Holanda imponen restricciones más duras y
España sufre un repunte de contagios tras cinco semanas a la baja.
Fdo.
Jorge Cremades Sena
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deja tu comentario, gracias