domingo, 14 de diciembre de 2014

EL OBJETIVO DE FELIPE VI

                        En un país como el nuestro, con una Monarquía Parlamentaria en la que el Jefe del Estado, es decir, el Rey, que reina pero no gobierna, carece obviamente de todo tipo de competencias ejecutivas y legislativas, limitándose su figura, que no es poco, a simbolizar la unidad del País y su permanencia, a arbitrar y moderar el funcionamiento regular de las instituciones y a representar al Reino de España, amén de las funciones que le atribuyan expresamente la Constitución y las leyes, así como su condición de comandante en jefe de las FFAA y, como tal, capitán general de los Ejércitos, el objetivo del actual Jefe del Estado, es decir, de Felipe VI, es bien simple y, a la vez, bien complejo, tal como, acertadamente, él mismo lo acaba de expresar tras seis meses de reinado: “Quiero que los españoles se sientan orgullosos de su Rey”. Esa es, sin duda, la mayor aspiración que puede tener, y, más aún, tras el deterioro que la Corona sufrió durante los últimos años del reinado de su padre, al extremo de que en mayor o menor medida empañaron todos sus éxitos anteriores y, muy especialmente, durante la transición y consolidación de la Democracia, aunque algunos quieran hoy injustamente olvidarlo. Pues bien, si hacemos caso a las encuestas, como sucede para otros asuntos, según la de NCReport, Felipe VI supera ya en valoración a Don Juan Carlos; el 72´7% de los españoles (entre ellos el 66´4% de los jóvenes) califica su, hasta ahora breve reinado, de forma positiva, mientras que el 64´1% le pide al Monarca un papel más activo en política, asunto éste que, teniendo en cuenta sus limitadas competencias, es bastante complicado de asumir. En todo caso, no está de más que esté estudiando su borrador del tradicional discurso de Navidad, en el que, al parecer, apelará a la unidad de España y se referirá a algunos graves asuntos que hoy sufre la sociedad española, como la corrupción, por ejemplo, así como al reto de mirar al futuro con optimismo (los españoles somos propensos al extremismo, igual estamos eufóricos que apáticos). De entrada, por lo tanto, según todos los datos, Felipe VI no anda desencaminado en el papel que le hemos dado todos los españoles.
            Frente a este papel del Rey, el Gobierno, su partido y el resto de partidos políticos aspirantes a gobernar, que son a quienes compete presentar proyectos legislativo-ejecutivos y, por tanto, los verdaderos responsables de la situación, indagan los espacios electorales que les permitan hacerse un hueco de confianza y credibilidad ante los españoles. Rajoy y el PP, ante los huecos que dejaron otros, presenta la defensa de la Constitución como gran baza electoral, defendiendo, como aviso a navegantes, que la Carta Magna “no es un juguete” que admita “bromas” y admitiendo que, a lo sumo, aceptaría una reforma para avanzar en el proyecto europeo, pero no para aventuras inciertas. Por su parte Sánchez, que lamenta su falta de ambición, y el PSOE se empeñan cada vez más en una especie de indefinición permanente que genera tensiones internas cada vez más evidentes, al extremo de que, al parecer, Susana Díaz confía cada vez menos en él como candidato y estrecha sus contactos con Madina y los barones críticos, sin descartar incluso presentarse a las primarias. Por otro lado IU y Podemos andan ya a la gresca, cada vez más evidente, por hacerse con el espectro electoral a la izquierda del PSOE, lo que, de entrada, apunta a un descalabro inesperado de los primeros, ya casi incapaces de confrontar su proyecto con el de Pablo Iglesias para diferenciarse como opción. En cuanto a UPyD se refiere cada vez son más sus problemas internos, al extremo de que un eurodiputado critica a la dirección del partido y acusa a Rosa Díez de “falta de generosidad” en un acto con Rivera, el líder de C´s, por negarse a compartir con éstos el cartel electoral ante la multitud de coincidencias de sus respectivos proyectos. Bueno, y entretanto, los partidos nacionalistas, incluido el PSC, a lo suyo. Es el panorama preelectoral que se respira en España, en la que De Guindos insiste en que “Zapatero forzó la salida a Bolsa de Bankia a golpe de BOE” y vaticina que “la recuperación llegará en 2015 a las rentas y al empleo”. Una España que, entretanto, sufre un récord de asaltos cibernéticos desde Rusia y China ya que los cuatro ministerios vinculados a la seguridad (Defensa, Interior, Exteriores y Presidencia) han recibido ataques de “hackers” ubicados en dichos países con los más sofisticados virus que se conocen.
            Y, mientras la Audiencia pide a Rabat los datos de los militares que mataron a dos melillenses, en el exterior destaca y es preocupante el desencanto de la comunidad negra con Obama, ¡quién lo diría!, que, harta de la violencia policial en EEUU, ha tomado Washington mediante una multitudinaria manifestación de protesta… mientras tanto la NASA buscando un millón de asteroides que podrían acabar con una ciudad. Bueno, y qué decir de Venezuela y su líder Maduro, quien, sin ton ni son, ha arremetido contra el ex presidente Aznar tachándole literalmente de asesino y provocando una protesta diplomática por parte de España; mejor no decir nada sobre un sujeto que se comunica con su antecesor Chaves mediante un periquito, que, por lo visto y según él, es su reencarnación… mejor, por tanto, quedarnos pues con las palabras de la líder venezolana María Corina Machado: “el régimen chavista llegará hasta donde le dejemos”.
            En cuanto al mundo del deporte, especialmente del futbol, destacar que una veintena de “Boixos” se colaron en Getafe para ver empatar, 0-0, al Barça, mientras que el Real Madrid con el 1-4 en Almería se le distancia hasta cuatro puntos en la cabeza de la tabla. Entretanto se publica que Roures posee 250 millones en 150 cuentas (un tercio en paraísos fiscales), siendo obvio que el futbol es un verdadero maná o chollo (como quieran llamarlo), no sólo para los futbolistas, pues el fundador de Mediapro, que solicitó concurso en 2010, controla los derechos televisivos de la mayoría de los clubes y, según los resultados, no le va nada mal.

                                               Jorge Cremades Sena

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Deja tu comentario, gracias